Publicamos a continuación la Declaración ante las agresiones a manifestantes el 1ro de Mayo en Plaza Venezuela y el intento de criminalización a los luchadores y militantes de izquierda Luis Zapata y Rafael Uzcátegui. La misma es suscrita por el Comité de Familiares y Amigos de lxs Trabajadorxs Presxs, el espacio del Encuentro en Defensa de los Derechos del Pueblo y otras organizaciones políticas de izquierda así como sindicatos, corrientes sindicales y activistas.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Jueves 16 de mayo
DECLARACIÓN
Rechazamos las agresiones a los manifestantes el 1ro de Mayo en Plaza Venezuela y el intento de criminalización de Luis Zapata y Rafael Uzcátegui.
Las organizaciones e individualidades que suscribimos este comunicado, denunciamos las irresponsables y graves declaraciones del diputado suplente de la Asamblea Nacional, Carlos Pacheco, contra los luchadores y militantes de izquierda Rafael Uzcátegui y Luis Zapata. Rechazamos las infundadas acusaciones de “conspiración”, tratándose de dos militantes cuya actividad política es totalmente pública, en función de la organización y movilización por los derechos económicos y políticos del pueblo trabajador.
En la emisión del pasado jueves 02 de mayo del programa Zurda Conducta, emitido por Venezolana de Televisión (VTV), Carlos Pacheco, diputado suplente de la Asamblea Nacional (AN), emitió contra Rafael Uzcátegui y Luis Zapata, ambos dirigentes del partido Patria Para Todos – APR, acusaciones como las de haber propiciado y dirigido una supuesta agresión contra un grupo de motorizados afines al Gobierno Nacional y, no contento con eso, empleó términos como “conspiración”.
Nos preguntamos: ¿estas calumnias, emitidas en un programa de la televisión pública, son una acción individual de esta persona, o son parte de un intento gubernamental de criminalizar a dos militantes que luchan por los derechos económicos, sociales y democráticos del pueblo trabajador?
La verdad es que los compañeros señalados participaron el 1ro de Mayo de una columna unitaria y clasista, conformada por diversas corrientes sindicales y organizaciones políticas de izquierda, que decidieron levantar cuatro consignas fundamentales: lucha por un salario igual a la canasta básica; exigencia de libertad para las trabajadoras y trabajadores presos por luchar, denunciar la corrupción o negarse a ser parte de las tramas de corruptelas; solidaridad con el pueblo palestino, rechazo total al genocidio en curso por parte del Estado de Israel con el apoyo de las principales potencias capitalistas de Occidente; y la perspectiva estratégica de que la clase trabajadora debe gobernar.
Esas eran las demandas levantadas por estos compañeros este 1ro de Mayo en la Plaza Venezuela, en el marco más general de la concentración de trabajadores de diversas tendencias y corrientes, actividad pacífica por los derechos laborales, convocada con anticipación y de manera totalmente pública. Manifestación pacífica de la que participaron también organizaciones de lucha por los derechos de las mujeres y de la comunidad sexodiversa.
A los manifestantes se les impidió marchar, las diversas gestiones con los jefes de los cuerpos de seguridad para que permitieran la movilización resultaron infructuosas, razón por la cual la concentración estuvo limitada a la plaza y, en determinado momento, a la calle aledaña a la plaza, todo sin ningún tipo de incidentes. No hubo inconveniente alguno con conductores de vehículos ni motos, puesto que el tránsito estaba siendo desviado por el propio operativo de seguridad desplegado.
La manifestación transcurrió sin sobresaltos ni incidentes hasta que, por alguna razón que, son las autoridades competentes quienes deben explicar, y no los manifestantes, el operativo policial desplegado en todas las calles adyacentes permitió la irrupción de decenas de motorizados, que actuando como grupos de choque, se dispusieron a romper la concentración, lanzando sus motos contra las trabajadoras, trabajadores, jubilados e, incluso, familias enteras que, como es usual y legítimo, participaban de una fecha emblemática para la clase obrera en todo el mundo.
Las y los manifestantes debieron defenderse de las motos que se les lanzaron encima, golpes, tubazos y cascos de motorizados con que fueron golpeados, como quedó claramente documentado en los más diversos registros audiovisuales tomados por periodistas, reporteros gráficos y fotógrafos presentes. Para empeorar lo que ya fue una inaceptable y brutal agresión, reporteras y manifestantes fueron objeto del robo de pertenencias, implementos de trabajo y materiales políticos.
¿Por qué el masivo operativo policial que impidió la marcha pacífica de las y los trabajadores, y que controlaba el tráfico vehicular en toda la zona, no impidió el acceso e irrupción de estos grupos de choque contra la manifestación? Estas son las cuestiones que deben investigarse si fuera cierto que, como señaló el diputado suplente en sus calumnias e irresponsables acusaciones, “hay investigaciones en curso”. Si esa afirmación no es una frase al pasar, a título individual de este vocero, son estas las cosas que deben investigarse con seriedad.
En lo inmediato, nos corresponde rechazar totalmente este burdo e irresponsable intento de incriminar a los agredidos y agredidas, de falsear los hechos con el objetivo político de criminalizar a militantes de izquierda que levantan posiciones independientes tanto del Gobierno Nacional como de la oposición patronal subordinada a Estados Unidos. Además de haber sido objeto del impedimento del derecho político elemental a manifestarse pacíficamente un 1ro de Mayo, haber sido golpeados y agredidos, ¿se pretende revictimizar a quienes manifestamos ese día?
Reiteramos la denuncia de las falsas acusaciones del diputado Carlos Pacheco, en especial la grave acusación de “conspiración”, una calumnia sin pie ni cabeza, un absurdo total, tratándose de militantes cuya actividad política por el salario, por el respeto a los contratos colectivos, contras las sanciones imperialistas, por el derecho a la tierra de los campesinos, contra el genocidio en Palestina, por la libertad de las trabajadoras y trabajadores presos, en solidaridad con los trabajadores y jubilados argentinos antes los ataques del gobierno de Milei, etc., es una actividad totalmente clara y pública, sin vínculo alguno con los diferentes factores de poder que, tanto dentro como fuera del país, se disputan hoy su control.
Alertamos sobre este intento de criminalización, y hacemos responsable directo a este diputado por lo que pueda ocurrirle a los compañeros calumniados, bien sea por acción oficial o por la actuación de estos grupos de choque que, por lo visto, actúan seguros de contar con protección e impunidad.
16 de mayo de 2024
