En un tweet, un abogado y profesor de la Facultad de Derecho, expresó su descontento por haber reprobado a 27 alumnos de su materia.
Sábado 14 de mayo de 2022 19:40
En la tarde del viernes se hizo viral un tweet del profesor Felix Lonigro, docente de la Facultad de Derecho de la UBA, en el que daba a conocer que de sus 27 alumnos de la materia de Derecho Constitucional ninguno había aprobado. El debate en redes sociales se centró en si es o no un buen profesor cargado de anécdotas de ex estudiantes de su materia.
Facultad de Derecho de la UBA . Tome el Primer Parcial de derecho constitucional. 27 exámenes. Ningún aprobado.
— Félix V Lonigro (@fvlonigro) May 13, 2022
Lo cierto es que es un profesor como muchos en la facultad, uno de tantos que obliga a les estudiantes a comprar su material y penaliza a quienes lo fotocopian. Además de su declaración en Twitter tuvimos la oportunidad de verlo en vivo en La Nación+ discutiendo el hecho.
Tampoco podemos dejar pasar, la posición reaccionaria que este profesor tiene respecto al derecho a decidir sobre los cuerpos gestantes, habiendo hecho una nota de opinión en Infobae sobre “la inconstitucionalidad” de la interrupción voluntaria del embarazo.
Los medios de comunicación tal como LN+ aprovechan la situación, para crear sentidos comunes a los fines de desacreditar la educación pública. En su aparición en los medios el docente y sus entrevistadores desacreditaron a los alumnos desde lo que es su voluntad de estudiar hasta sus capacidades. Encuadran este hecho, dejando de lado la realidad que les jóvenes vivimos en el contexto de crisis con salarios que parten de 30 mil y no superan los 70 mil en estudios jurídicos o en los innumerables trabajos precarios; sumando que la mayoría de los casos nos encontramos trabajando informalmente con horarios que superan incluso las 8 horas diarias con sueldos por debajo de la canasta básica.
Desde ya, esto repercute en lo cotidiano de cada estudiante y más concretamente en las horas disponibles para estudiar e incluso cursar. Es común encontrarnos con profesores que obligan a les alumnes a comprar el material de estudio de quien titula la cátedra a precios exorbitantes obligando a quienes estudian a esconder las fotocopias que ya tienen un costo elevado de por sí.
Fui alumno de Lonigro en el 2018. Puedo decir que es un mal profesor, con malos tratos hacia los alumnos en general y con las mujeres en particular. Cómo condición de cursada nos obligó a comprar un libro de su autoría, que en ese entonces costaba casi $2.000 https://t.co/LmD7oGX98b
— Lautaro Montero (@_MonteroLautaro) May 13, 2022
Si hay una educación pública que se sostiene es gracias a sus docentes y no a la academia que excluye a estudiantes y a esos mismos docentes que todos los días pelean tanto por un futuro mejor como para garantizar una educación de calidad. Abogados como Lonigro que deciden dar clases en la Facultad de Derecho, son parte de ésta academia, que excluye a les estudiantes al hacer oídos sordos de sus problemáticas; donde a su vez, forman parte diversos funcionarios, jueces y hasta incluso el propio presidente Alberto Fernandez.
La academia plantea un ritmo que excluye a esa juventud precaria, dándole la espalda, eso refleja la vulneración a nuestro acceso a la educación que, asimismo, no podemos desconocer el desfinanciamiento que en estos años tuvo la UBA y su impacto en la juventud que hoy hace malabares para coordinar sus horarios antes la escasa oferta horaria, de comisiones y lo principal falta de tiempo para estudiar.
Por eso la propuesta de la reducción de 6 horas a 5 días en la semana con un reparto de horas de trabajo, garantizaría no sólo más tiempo libre para poder estudiar todes sino oportunidad laboral para esa juventud que se encuentra en la informalidad y precarizada, y sueña con entrar a la UBA.