El miércoles autoridades del instituto y funcionarios del gobierno de Santa
Fe hicieron público el proyecto tan reclamado por estudiantes y docentes del
terciario.
Jueves 20 de diciembre de 2018 22:15
El instituto terciario más grande de Santa Fe, en el que estudian aproximadamente tres mil alumnos, se ubica en la calle 25 de Mayo 3762 y comparte el edificio con los niveles primario y secundario. El edificio en si, además de ser compartido, presenta variadas deficiencias de infraestructura y limita gravemente el acceso de los estudiantes a las carreras. Tal es así que año a año se hace cada vez más conflictiva la instancia de inscripción para los ingresantes a las carreras, a muchos se les niega el acceso a la educación pública por falta de cupo. Dicha problemática lleva a los alumnos a optar por institutos del sector privado, o por no estudiar, resignándose en su mayoría a trabajos precarizados o mal pagos.
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A la presentación del proyecto del nuevo edificio acudió la Directora de Formación Superior Irene López, que señaló que la inversión que requiere va en contra de las políticas nacionales en educación, que tienden a la desinversión y al desmantelamiento. Con un claro tono opositor al gobierno nacional reivindicó llevar la educación superior a lugares donde hoy no llega.
Luego de la breve exposición de la Directora entró en escena el arquitecto encargado de la obra, que mediante power points mostró a los asistentes el nuevo edificio. Se ubicará en "La Esquina Encendida" de San Lorenzo y Estanislao Zeballos, en el barrio Don Bosco. De esta forma sacan al Instituto de la zona céntrica y llevándolo a la periferia de la ciudad. El proyecto prevé que el edificio cuente con cinco pisos, patios delanteros y traseros, terraza, siete aulas magnas (para 55 personas aproximadamente), siete aulas grandes, cuatro aulas medianas y siete aulas pequeñas (para veinte personas aproximadamente). A partir de tener un edificio propio se agrandaría la oferta horaria, ya que el instituto pasaría a tener tres turnos. Según el encargado del proyecto se calcula el edificio para albergar a 1200 alumnos por turno.
He aquí donde empiezan los problemas estructurales del proyecto. El edificio está basado en una matrícula actual de 2910 personas, siendo que el conjunto de esas personas cursan en el turno noche. Al calcular 1200 personas por turno, no solo que se baja drásticamente la cantidad de personas que podrían cursar en el turno noche sino que se equipara a los demás turnos con el turno vespertino, siendo que la población del Almirante Brown tiende y necesita este turno para poder llevar adelante sus estudios, y que en otro turno se les haría muy difícil o imposible. Este problema surge de la falta de consulta con el alumnado, y el desconocimiento de sus necesidades.
Cabe señalar que la presentación del proyecto para el nuevo edificio se realizó un 19 de diciembre, fecha en la que ya no se dictan clases y que solo unas pocas personas acuden al instituto por parciales o trámites. Nos parece un error grave haber hecho la presentación en una instancia tan chica y sin la posibilidad de réplica del conjunto del alumnado, creemos firmemente que dicha presentación se debería repetir al comienzo de las clases y que además se deberían respetar las necesidades de los alumnos y alumnas del instituto. La dirección del terciario y el gobierno deben garantizar y organizar las instancias para que esto suceda, en la que no se computen las faltas y se garantice el derecho a participar de todos.
En el nuevo proyecto sigue estando ausente un jardín o lugar de cuidado para los y las hijas de las y los estudiantes que formamos parte del instituto, en su mayoría mujeres, cuestión clave para la continuidad de nuestros estudios y que hace a nuestras necesidades como comunidad educativa y como instancia de inclusión.
La presentación del proyecto es claramente un avance y un reconocimiento a nuestra lucha por años, pero debe estar al servicio de las necesidades de los alumnos, docentes y no docentes. Así las estudiantes de las carreras de idiomas podrán poner a debate si es necesario un laboratorio propio con el equipo necesario para la práctica de la fonética o las estudiantes de primaria e inicial sobre si es necesario un gimnasio para los talleres lúdico-expresivos Y así el resto de las carreras según sus especificidades, teniendo como objetivo el pleno desarrollo de las disciplinas para nuestro aprendizaje. Para que se cumpla este requisito es necesario instancias de deliberación democrática en donde podamos participar el conjunto de la comunidad educativa y que no sea un proyecto que se decida en mesa chica a nuestras espaldas. Como futuros docentes debemos organizarnos para hacerlo cumplir, y que lo que quede sea beneficioso para las futuras generaciones.