El 8 de mayo de 1987, el asesinato de tres jóvenes a manos de la Policía Bonaerense conmovía a la localidad de Ingeniero Budge, en el partido de Lomas de Zamora. El hecho pasó a la historia como la “Masacre de Budge”, y al cumplirse esta semana 28 años del hecho, una marcha y una jornada cultural organizadas por la Comisión de Vecinos de Budge, la conmemoraron. Familiares, vecinos del barrio y distintas organizaciones políticas, sociales y sindicales fueron parte de las actividades.
Martes 12 de mayo de 2015
El caso fue emblemático para la lucha contra la represión policial. Se trata del primer caso de gatillo fácil denunciado post-dictadura, que generó movilizaciones masivas e impulsó la organización de un movimiento antirrepresivo en la zona sur del Gran Buenos Aires. Oscar Aredes, de 19 años, Roberto Argañaraz de 24 y Agustín Oliveira de 26 fueron acribillados por los asesinos Ramón Balmaceda, Isidro Romero y Jorge Miño. Los policías intentaron hacer pasar el caso como un enfrentamiento entre delincuentes, pero la presión de los familiares y la comisión vecinal que se formó a partir de entonces reclamando justicia, pudo demostrar que los pibes fueron víctimas del gatillo fácil.
Los asesinos estuvieron prófugos casi veinte años, a pesar de contar con fallos que los sentenciaban. Recién en 1998 lograron encarcelar a uno de los policías, y el último fue detenido en 2006, casi veinte años después de la masacre. Esto demuestra que la impunidad policial tiene como cómplices a las propias instituciones del Estado, como la fuerza policial y la justicia, que recién después de veinte años atrapó a los prófugos. Para ese entonces, ya habían muerto varios de los familiares de las víctimas, que nunca dejaron de luchar por exigir justicia, dejando hasta su propia vida en esta lucha.
El accionar mafioso y la impunidad de la policía se mantienen hoy en pie, llevándose la vida de un pibe cada 28 horas por el gatillo fácil, como denuncia el anuario 2014 de la CORREPI. Pero la lucha contra esto también persiste, como puede verse en estos días en los juicios que se están desarrollando por el asesinato de Luciano Arruga en el Oeste bonaerense y el de Mauro Silva en la zona sur, entre otros casos.