La senadora radical que aspira la candidatura a la gobernación, se ha destacado por sus posturas antiderechos y por acompañar cada una de las medidas de ajuste del gobierno nacional.
Miércoles 13 de marzo de 2019
En las últimas horas el diputado radical e histórico candidato a gobernador por la UCR+Cambiemos, José Cano, ha declinado su candidatura señalando a la actual senadora, Silvia Elías de Pérez, como la cabeza de la fórmula radical en las elecciones que se realizarán el próximo 9 de junio.
Fervientemente religiosa y activa militante antiderechos, Silvia Elías de Pérez ha sellado su fama en el debate que se dio en el Senado en julio de 2018, en ocasión del tratamiento del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), cuando acusó al prestigioso biólogo molecular, Alberto Kornblith, de fomentar la eugenesia, usando de ejemplo a las personas con síndrome de down.
La senadora Silvia Elías de Pérez será la candidata a gobernadora de Tucumán por Cambiemos. ¿Cómo olvidar cuando quiso "apurar" a Alberto Kornblihtt y terminó haciendo un papel lamentable? #AbortoLegalYa https://t.co/0bwCjVJdTJ pic.twitter.com/eXevZhLNUq
— La Izquierda Diario (@izquierdadiario) 13 de marzo de 2019
"No, no está bien. Está mal", fue la sentencia del biólogo que inmortalizó en el ridículo a la senadora, que no solamente se refirió al sindrome de down como una enfermedad, sino que además llegó a afirmar que detrás de la campaña nacional por el derecho al aborto se ocultaría una organización dedicada a la venta de niños abortados.
El repudio fue tan grande que hasta las propias afiliadas radicales que participaron de la vigilia durante las sesiones en el senado, taparon la foto de la senadora en la galería de "mujeres radicales destacadas" que se encuentra en el tercer piso de su Comité Nacional.
Elías de Pérez no solamente se opuso a la IVE, como legisladora provincial presentó en 2012 un proyecto para prohibir la aplicación del fallo F.A.L. de la Corte Suprema, que legaliza el aborto en casos de violación. Seguramente por esa razón prefirió mantener un estruendoso silencio respecto al aberrante caso "Lucía", la niña de once años abusada a quien se le negó la Interrupción Legal del Embarazo (ILE).
Pero su militancia antiderechos no refiere solo al aborto, también calificó de "mamarracho jurídico" la ley de matrimonio igualitario (2010) a la que ponderó como "discriminatoria" hacia las personas heterosexuales (!?) y fue la única ausencia durante la votación de la "Ley Micaela", una limitadísima iniciativa institucional para impartir formación en violencia de género a los tres poderes del Estado.
Militando el ajuste
Además de su labor parlamentaria en materia de antiderechos, Silvia Elías de Pérez, ha acompañado todas y cada una de las medidas de ajuste contra el pueblo trabajador impulsadas por el gobierno nacional levantando la mano en contra de la ley anti tarifas, a favor de la reforma previsional contra los jubilados, y en contra de la ley anti despidos, entre otras.
Al mismo tiempo, ha apoyado cada iniciativa destinada a beneficiar a los grandes empresarios como el pago a los fondos buitres, la reforma del mercado de capitales -siendo presidenta de la Comisión de Economía Nacional e Inversión del Senado-, la reforma tributaria, y cada uno de los presupuestos anuales de ajuste que impulsó el macrismo.
Con semejante legajo se ha convertido en una candidata confiable para la Casa Rosada, que ha encontrado en la senadora una defensora a ultranza de la gestión macrista.
Anticorrupción sesgada
Silvia Elías de Pérez también suele presentarse a sí misma como abanderada de la lucha contra la corrupción, pero de los casos que involucran exclusivamente al PJ. No ha sido tan vehemente para investigar los casos de corrupción que salpican a su propio partido, como el famoso "Plan Coreano" que involucra a autoridades del Pami y del Plan Belgrano, que derivó en un sumario contra los funcionarios de la obra social de los jubilados y la imputación del diputado, José Cano, en una causa por defraudación contra el Estado.
La senadora tiene historial en el negocio privado de la salud como gerenta del Sanatorio 9 de Julio, al menos entre 2002 y 2011. Quizás llegó a ese cargo de la mano del histórico dirigente radical, Alfredo Neme Scheij, accionista del nosocomio y quien en 2018 se vio obligado a renunciar a la gerencia del Pami por incompatibilidad de intereses.
En este cruce de dirigentes radicales también convergen Ricardo Ascárate -funcionario del Plan Belgrano- y el esposo de la senadora, Luis Pérez Ascárate, empresario azucarero e histórico militante radical.
Tanto el Pami como la UNT, históricamente gerenciados por funcionarios radicales, han sido señalados como las cajas negras de campaña electoral. En 2016 tanto el diputado José Cano, como la senador Silvia Elías de Pérez, fueron señalados como los beneficiarios de un sistemático desvío de fondos para financiar sus campañas electorales de 2009 y 2011.
Aunque la senadora intenta presentarse como la "novedad" de una candidata mujer a la gobernación, lo cierto es que toda su trayectoria se choca de frente con los derechos más elementales del movimiento de mujeres y del pueblo trabajador.