Zeta Bosio y Charly Alberti anunciaron la publicación de la primera grabación de la banda, registrada en formato demo y recuperada tras hallarla en un casete. Un repaso por todas las maquetas primigenias que andan dando vueltas.
Juan Ignacio Provéndola @juaniprovendola
Jueves 25 de julio 00:00
Los Soda Stereo en los años de presentación de su álbum debut, editado en agosto de 1984.
Días atrás, y a poco de los 40 años de la salida del primer disco de Soda Stereo, Zeta Bosio y Charly Alberti anunciaron la publicación de una canción inédita que fue parte de las grabaciones iniciales de la banda.
Si bien el bajista y el baterista no anticiparon el nombre del tema, se supone que refieren al titulado “Dime Sebastián”, ya que Alberti le explicó a la revista Billboard que el mismo “habla de un niño que mira el cielo, una letra muy juvenil y muy ingenua que fue lo primero que hicimos”. En efecto, esta canción dice en su estribillo: “Dime, Sebastián, ¿qué hay de nuevo en el cielo?”.
En mayo de 2019, Charly Alberti había publicado en su cuenta personal de Instagram la foto de un casete TDK que tanto en su etiqueta frontal como en la caja del mismo tenía escrito con fibra roja: “1er Demo Soda Stereo”. “Finalmente, después de buscarlo durante años, apareció! Es el primer demo grabado en la sala de casa con una portastudio Tascam de uno de los músicos de mi viejo”, escribió el baterista. Su padre, Tito Alberti, fue compositor de jazz y música caribeña y autor de la celebrada canción infantil “El elefante Trompita”.
Se supone que esa es la cinta mencionada por muchos fanáticos de Soda y coleccionistas en general, y que incluye dos canciones: “Dime Sebastián” y una versión de “¿Por qué no puedo ser del Jet Set?” ligeramente más extensa que la que se terminaría grabando para abrir el primer disco de Soda, publicado el 27 de agosto con la producción artística de Federico Moura.
“El audio es bastante bueno. Lo máximo que vamos a hacer es un poco de masterización, pero la idea no es hacer otra mezcla o dividir las pistas, porque creo que perdería la esencia de lo que significa”, reveló Charly Alberti respecto del tratamiento sonoro que él y Zeta Bosio le darán a la cinta antes de publicarla. “Es importante que la gente entienda cómo empezamos, cómo sonaba la banda en ese momento, obviamente adaptándola a un sonido más actual, pero no mucho más”.
Si bien nunca se había conocido hasta el momento la canción “Dime Sebastián”, la historia oficial de Soda Stereo da cuenta de una experiencia previa bajo el nombre de Los Estereotipos que incluyó algunas grabaciones caseras con la participación de Ulises Butrón. De esa época se menciona un demo de tres temas registrado entre la Guerra de Malvinas y el Mundial España 1982, tas el cual la banda cambia su nombre inicial por el que lo volvería célebre.
Además de las composiciones incluidas en el casete rescatado por Alberti, también circulan otras que eran parte del primerísimo repertorio de Soda Stereo, tal como se desprenden de audios en vivo tomados en el Marabú, un antiguo cabaret tanguero reacondicionado como sala de rock a comienzos de 1984 por Carlos Rodríguez Ares, manager de Soda y también en aquel entonces de Virus.
El que le dio luz pública a estas canciones fue Gabriel Pereira, quien en diciembre de 2015 subió cinco de ellas a su cuenta de YouTube bajo el nombre “Demagogo - Álbum 1982”, aunque hace dos años amplió en un comentario: “Ese disco nunca existió, solo junté estos temas inéditos poco conocidos de Soda y le puse ese título porque es el primero que aparece en la lista, mientras que el año es simplemente en el que los tres músicos se conocen y forman la banda. Es una manera de imaginar un disco previo al primer oficial, que salió en 1984”.
En efecto, “Demagogo” es el nombre de la primera canción, una letra que hace juego de palabras entre las expresiones “hace ‘sí’, hace ‘no’, hace ‘sí’, ‘no’”, que a simple escucha parece decir en realidad “asesino”. En otras estrofas, Cerati canta “Quema mis oídos un walkman torturador” y también “Volverán y serán millones”, algo que también puede leerse en el contexto social y político de su composición, a pocos meses de las elecciones de 1983 que propiciarían el retorno de la democracia en Argentina.
La grabación continúa con “Choripán” y “El héroe de la serie” antes de dos que remiten a extractos de canciones posteriores, tales los casos de “Trae cola” (con un aire a “Juegos de seducción” del disco Nada personal) y “La calle enseña” (cuyo riff es similar al de “Texturas”, publicada en 1992 en Dynamo).
Todas tienen una notable impronta de The Police y la movida new wave, primerísimas influencias del trio que entonces buscaba su propia identidad sonora de cara a la grabación del primer disco de estudio. Las vueltas de la vida terminarían acercando a Gustavo Cerati con Andy Summers cuando en 1998 se grabó un disco tributo y el entonces ya ex Soda Stereo aportó bajo y voz para una versión en español de “Bring on the Night” que contó también con la participación del guitarrista de la banda liderada por Sting.
Summers terminó tan impresionado por el argentino que le propuso armar un trío junto al baterista Stewart Copeland para salir por el mundo para hacer el repertorio de The Police. Cerati agradeció pero dijo que no: prefería dedicarse a su carrera solista, que un año después se aceleraría con la salida del disco Bocanada.