La inflación subió un 6% en tasa interanual en España y el IPC aumentó un 0,9% en febrero debido a una subida histórica del precio de los alimentos, un 16,6%.
Roberto Bordón @RobertoBordon13
Martes 14 de marzo de 2023
El motivo clave de la subida de la inflación reside en el precio de los alimentos que creció un 16,6%, su mayor subida desde 1994 y que no parece tener fin.
El precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas continúa subiendo tras un mes de enero donde ya subieron un 15%, destacando el encarecimiento de legumbres, hortalizas y la carne. El gobierno achaca la subida a una reducción puntual de la oferta debido a condiciones climáticas desfavorables en España y otros países de la UE, lo que habría provocado el aumento de precios por la demanda internacional. La realidad es que la rebaja de impuestos temporal del gobierno del mes de diciembre a alimentos de primera necesidad para combatir la inflación no la ha reducido. Juan Roig, presidente de Mercadona, ha admitido que han subido “los precios una burrada” pero que era necesario para proteger sus intereses.
Los alimentos acumulan así 11 meses seguidos de aumentos de doble dígito respecto al año anterior en nuestro país. Una tendencia que se replica a nivel europeo con un incremento del 21,8% en Alemania y duras subidas en Hungría o Lituania.
Algunos expertos señalan que a nivel internacional se han elevado los costes de producción en cuestiones esenciales para los agricultores como las semillas, piensos, fertilizantes, electricidad o combustible, lo que habría elevado temporalmente el precio de los alimentos. Si bien, también señalan que algunos de estos factores redujeron su coste, sin que esto influya en una bajada del precio de los alimentos.
Por su parte, el gobierno del PSOE-Podemos, lo único que ha implementado son bajadas de impuestos como el IVA en algunos productos. Medida que ya se ha demostrado ineficaz, pero que parece ser la única que propone el gobierno. Lo que por ahora se ha visto es que los empresarios han aprovechado para aumentar sus beneficios, encareciendo los productos que iban a ser rebajados, lo que descarga el peso de la crisis en las familias obreras.
De forma general, la inflación aumentó un 6%, una décima menos de lo previsto por el INE y la inflación subyacente, que no tiene en cuenta los alimentos no elaborados ni los productos energéticos, aumentó hasta el 7,6%. La subida de la primera tiene que ver con la subida de los alimentos y también de la electricidad que aumentó un 12,6%.
Por otro lado, cabe destacar el aumento del IPC de un mes para otro en un 0,9%, una subida tan brusca que no se daba desde 1978, lo que indica la gravedad de la situación. Mientras el gobierno progresista de cara al ciclo electoral intenta mostrar sus supuestas políticas anticrisis, la realidad es que los más beneficiados son los grandes capitalistas.
Frente a un escenario inflacionista donde el poder adquisitivo de los trabajadores se ve reducido cada vez más, desde la CRT defendemos algunas medidas de emergencia para defender las condiciones de vida de la clase trabajadora y combatir la inflación:
Claro que los capitalistas y la CEOE pondrán el grito en el cielo, y no querrán aceptar nada que cuestione sus fabulosas ganancias. Y las burocracias sindicales, seguirán como fieles defensores de los intereses empresariales, en contra de los trabajadores. Por eso, la lucha por imponer estas medidas será también una lucha por una salida independiente de la clase obrera, contra las burocracias sindicales y la patronal.
Roberto Bordón
Andalucía