La empresa textil anunció el cierre temporal de su planta de Alberdi, Tucumán, debido a un exceso de stock provocado por una fuerte caída en sus ventas. La medida deja en suspenso a unos 1190 trabajadores. En marzo habían despedido a 120 trabajadores. La conducción de UTICRA sigue de brazos cruzados sin anunciar ninguna medida defensiva.
Viernes 19 de julio 10:22
En las últimas horas, la fábrica de calzados Topper ha paralizado su planta ubicada en Alberdi, Tucumán. La planta permanecerá cerrada hasta el próximo lunes 22 de julio, licenciando de esta manera a 1190 operarios que temen por sus fuentes de trabajo. Recordemos que ya en marzo la empresa despidió a 120 trabajadores y adelantó las vacaciones de los empleados con mayor antigüedad. Pero no alcanzó.
La caída en las ventas del rubro textil es profunda. De acuerdo a un informe de la Fundación ProTejer, hasta el mes de abril la caída promedio fue de 36% en los volúmenes de ventas y la destrucción de empleos alcanzó al 14% de los trabajadores del sector. La fábrica de Topper en La Rioja está produciendo al 30% de su capacidad instalada. Los stocks se acumulan y el panorama se verá agravado por la eliminación de barreras arancelarias que favorecerán la importación de calzados y productos textiles.
Teddy Karagozian, dueño de TN&Platex, la empresa de hilados más importante de Argentina y con fuerte peso en la Fundación ProTejer, acompañó al gobierno de Milei como "asesor" hasta esta semana. Salió beneficiado con la flexibilización laboral y el paquete fiscal contenidos en la Ley Bases, pero abandonó el barco horas antes del anuncio del gigante de los calzados. En sus plantas de Tucumán, Karagozian también inició un proceso de retiros voluntarios y despidos. Según fuentes del sector, su planta "Pol Ambrosio" está trabajando al 50% y la ex San Nicolás al 70% de su capacidad.
Mientras tanto las conducciones de los gremios textiles brillas por su ausencia. Jorge Fugaracho, delegado provincial de la Unión Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA), manifestó su deseo de que "ojalá esta vez no pase, sería el peor escenario para una ciudad, como Aguilares, que tiene en los rubros textil y del calzado unas importantes fuentes de trabajo". Y como si fuera un simple espectador agregó que "las últimas medidas del Gobierno no parecen que vayan a ayudar a que se recupere la producción nacional".
Un ejemplo de cómo enfrentar los despidos y la crisis en el sector lo muestran las obreras de TextilCom en Catamarca, con la planta tomada hace más de un mes y movilizadas en reclamo de la reactivación de las fuentes de trabajo y donde se está discutiendo la posibilidad ponerla a producir bajo gestión obrera. La semana pasada participaron de la audiencia contra los despidos invitadas por el diputado Alejandro Vilca, desde las bancas del Frente de Izquierda.
Frente a la crisis del sector es imperioso exigir a las burocracias sindicales y a sus delegados que convoquen asambleas en cada lugar de trabajo afectado por despidos y suspensiones para discutir las medidas necesarias para dar una respuesta desde abajo y buscando la más amplia solidaridad.
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