Abdul Rahman El Assir, huido del Estado español por fraude fiscal, se refugia en la capital de los Emiratos Árabes Unidos en compañía de su viejo amigo el rey emérito. Ambos relacionados con el tráfico de armas y la corrupción.
Jaime Castán @JaimeCastanCRT
Lunes 27 de diciembre de 2021
Si hace unos días publicábamos un resumen de los escándalos de Juan Carlos I durante este 2021, no ha terminado el año que ya tenemos otro más. En este caso relacionado con otra de las “compañías” del emérito, ni más ni menos que un traficante de armas en busca y captura internacional.
Se trata de Abdul Rahman El Assir, de origen libanés, reside desde hace meses en Abu Dabi, huido del Estado español desde 2018 cuando tenía un juicio por fraude fiscal a Hacienda. La Fiscalía pide ocho años de cárcel y casi 90 millones de euros de multa e indemnización.
El Assir, de 71 años, es un reconocido traficante internacional de armas que habría sido protagonista en exportaciones militares españolas durante las últimas décadas. Sólo en el Estado español habría ocultado a Hacienda ganancias por valor de 31 millones de euros, por los que tendría que haber pagado 14,7 millones en impuestos.
Sin embargo, también en Francia y Suiza estaría involucrado en fraudes fiscales y escándalos de corrupción, siendo de hecho condenado en el país galo en 2020 y en “búsqueda y detención para extradición”.
Junto a Juan Carlos I en su complejo privado
La amistad de El Assier con Juan Carlos I se remonta a los años ochenta y ha sido de sobra conocida en la prensa. Sin embargo, tras la fuga de ambos de la Justicia, ahora se conoce que siguen manteniendo una estrecha relación en el complejo privado que el monarca emérito tiene en Abu Dabi, según testigos del entorno.
Ambos son viejos conocidos que habrían amasado sus inmensas fortunas a través de la corrupción y la venta de armas. No olvidemos que uno de los escándalos relacionados con Juan Carlos I ha sido justamente el del tráfico de armas.
A través de la empresa Alkantara Iberian Exports Ltd, fundada en Londres en 1978, el monarca habría recibido comisiones millonarias en los años ochenta por la venta de armamento a países como Marruecos o Egipto.
El Assier por su parte, estuvo casado con la hermana de Adnan Kashogui, el multimillonario e influyente traficante de armas saudí que estuvo afincado en Marbella. Esta relación personal con una de las figuras claves del negocio le sirvió para ser director general de Triad España y vicepresidente de la mencionada empresa Alkantara.
Ahora El Assier, en su propia huida personal de la Justicia, se beneficiaría de la cobertura del ex Jefe de Estado español con el que guarda esta larga relación de amistad y negocios.
Un viejo amigo del Régimen del 78…
Ahora bien, la relación de El Assier no es únicamente con Juan Carlos I, sino que también se extiende a personalidades políticas y de la alta sociedad española desde aquellos años ochenta.
El traficante libanés tuvo un protagonismo destacado en el lucrativo negocio de las armas durante el Gobierno del PSOE y Felipe González, siendo parte en la firma de contratos de venta de armas por valor de miles y miles de millones de pesetas. Un negocio tan lucrativo como atravesado por una corrupción en la que estaría envuelto el propio Juan Carlos I como decíamos.
Durante estas décadas, El Assier se ha codeado con la alta sociedad española y la casta política, frecuentando Sotogrande y llegando a asistir como invitado a la boda del entonces príncipe Felipe de Borbón con Letizia en 2004. Hasta su fuga en 2018.
Impunidad y silencio desde Zarzuela
Mientras tanto desde Zarzuela responden que las actividades privadas de Juan Carlos I ya no dependen de la Casa del Rey. Por parte del abogado del rey emérito, Javier Sánchez Junco, tampoco ha habido comentarios al respecto.
Otro caso más de impunidad de esta Monarquía corrupta garantizada por el Régimen del 78 y el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos que ya prepara la vuelta del emérito, mientras Felipe VI en su discurso navideño no entró al tema, centrado en bendecir el plan de ajuste subvencionado por la Unión Europea y remarcando que la Constitución del 78 debe seguir siendo inamovible.
