Trabajadores de la salud de distintas dependencias enfrentan incertidumbre por todo el país ante los despidos y recortes en el sector. Este es el caso de Diego Gregorio Hernández Piña, despedido por el Instituto de Salud del Estado de México tras nueve años y ocho meses de trabajar firmando contratos temporales.
Nancy Cázares @nancynan.cazares
Miércoles 2 de febrero de 2022
Este lunes se llevó a cabo una protesta de trabajadores de la salud en las afueras de Palacio Nacional. Médicos, enfermeros y enfermeras, psicólogos, así como trabajadores administrativos de distintas dependencias en el Estado de México, Chiapas, Guerrero y Michoacán, se dieron cita para denunciar los despidos que les son comunes y que por todo el país han provocado protestas entre las y los trabajadores del sector.
Los Institutos de Salud para el Bienestar, el de Salud del Estado de México, así como el de Seguridad Social y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) son algunas de las entidades señaladas por las y los trabajadores por ejercer despidos masivos a pesar de los dichos del jefe del Ejecutivo, que aseguró en reiteradas ocasiones que no habría despidos de personal de salud.
El deterioro de derechos laborales —como a la contratación y sindicalización con plenas prestaciones—, se expresa en que las políticas de austeridad y sus recortes arrasan en primer lugar con cargos eventuales (como las y los trabajadores sanitarios contratados con marco en la crisis sanitaria o con quienes no cuentan con qué respaldar años de relación laboral no reconocida o retribuida parcialmente (con menos prestaciones y/o más carga laboral).
Diego Piña, trabajador del Instituto de Salud del Estado de México que compartió su caso a La Izquierda Diario México desde la protesta de este lunes en Palacio Nacional. Denuncia corrupción y discrecionalidad para la asignación de bases, así como represión política por denunciar las condiciones de contratación en su centro de trabajo.