PRECARIZACION LABORAL. UNAM: Encuentro entre universidades públicas

Este primero de junio se llevó a cabo el Encuentro de profesores universitarios, organizado por docentes de la Facultad de Ciencias de la UNAM, quienes tuvieron como invitados a sus homólogos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) y de las Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ). En conjunto dialogaron sobre su situación y su propia reflexión los fue conduciendo a la conclusión de que todos los profesores de asignatura son trabajadores, que se encuentran en una terrible condición de precarización laboral.

Denunciaron las formas de contratación precarias, las excesivas cargas de trabajo, los magros salarios, la falta de derechos y acceso a las prestaciones, la negativa al derecho de sindicalización, los desfalcos y la corrupción en los presupuestos universitarios, así como la imposición de estructuras autoritarias de gobierno, que de conjunto forman los mecanismos de precarización laboral. Los cuales además degradan la calidad de la enseñanza, pues no se les brinda a los maestros las condiciones necesarias para poder prepararse mejor para atender a los estudiantes.

Te invitamos a leer: Entrevista a un asistente de profesor-investigador de la UNAM sobre la precarización laboral

También se señaló que no se debe volver a clases presenciales aún, hasta que la comunidad esté vacunada y, aun así, si se concreta este regreso no se debe olvidar que las escuelas deben tener las condiciones necesarias para garantizar la seguridad de la comunidad. Esto lo quiere dejar de lado la política del gobierno y de la rectoría de la UNAM, quienes tratan de simular una normalidad que no existe.

Por otro lado, no se puede olvidar que se han implementado reformas lesivas a los derechos de los trabajadores de la educación, como son la Reforma Educativa y la Ley General de Educación Superior (LGES), las cuales han sido continuidad de la política neoliberal para la educación. Además de la implementación de otras leyes que atacan de conjunto a la clase trabajadora, como es la reforma al outsourcing, que se quiso disfrazar de una ley que ataca la subcontratación cuando sólo la regula para que las empresas paguen impuestos, preservando la precarización laboral.

Experiencias docentes

Los profesores de la UACM contaron las experiencias que iniciaron desde 2019 para exigir su basificación, lo que implicó una demanda laboral, una campaña para dar a conocer su situación en redes y la movilización dentro de los planteles para enfrentar a las autoridades de la institución. Ahí destacaron la estrategia política, basada en su organización democrática y su lucha independiente del régimen universitario y nacional, como lo más importante.

Pues los laudos sólo pueden ser ganados de forma efectiva a partir de la movilización de los trabajadores, ya que incluso si los laudos se ganan, aun así la autoridad puede negarse a cumplirlos, por lo que es tan importante que los trabajadores luchen en el espacio público.

La denuncia también fue muy importante, por ello se hicieron brigadas a los planteles, donde se contactó a la comunidad estudiantil, así como a los trabajadores que desempeñan otras actividades, como los de intendencia y administrativos. De ahí surgió la lección de que debían unirse, no sólo dentro de la UACM sino con otros sectores. Así es como surgió la idea de formar el Movimiento Nacional Contra la Precarización y los Despidos (Monapred).

En cuanto a los maestros de las UBBJ, se explicó cómo es que éstas nacieron en el 2016 en municipios donde ganó Morena las elecciones. En el 2018, con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia se crearon de forma oficial y se convirtieron en instituciones federales. Son 140 planteles distribuidos a lo largo y ancho del país, que cuentan con diversas carreras, de las cuales muchas tienen que ver con el medio ambiente y la producción.

Te puede interesar: Universidades del Bienestar: la enorme distancia entre el discurso y la práctica

La cuestión es que por muy “humanista” que parezca este proyecto, lo cierto es que ofrece condiciones muy terribles para sus trabajadores, quienes no tienen ningún tipo de contrato ni de prestación. En el 2019 llegaron a estar hasta ocho meses sin percibir su salario. También hay un refinamiento de la explotación y el control de los trabajadores, donde se escogen con cuidado a sus académicos, pues si se tiene un perfil social y crítico simplemente no son seleccionados.

Hay muchos docentes que llenan sus solicitudes y son discriminados, de manera que forman un “ejército de reserva” que presiona a los que son seleccionados para que acepten condiciones deplorables, entre ellas la falta de cosas tan básicas como aguinaldo, el derecho a formar un sindicato, la libertad de cátedra o la presencia suficiente de trabajadores administrativos que prácticamente no hay.

Así, las conclusiones de los profesores de la UNAM es que ellos viven exactamente los mismos problemas que sus compañeros de otras instituciones. Es así que en el Encuentro se sacaron conclusiones de cómo proceder ante esta situación, pues su análisis fue ampliamente respaldado en cifras, que muestran su condición de precarización laboral.

¿Qué se puede hacer?

Algunas de las propuestas que se plantearon fueron la necesidad de la unidad de los profesores con los estudiantes. No se deben separar las demandas de los alumnos y los docentes ya que al final son la misma comunidad. Esa unidad también debe plantearse con los trabajadores de base (administrativos), como es el caso de los de intendencia, ya que también ellos son presa de la precarización y con los de otros centros educativos, más allá de cada institución en particular. Así, la lucha debe llevarse adelante con independencia del Estado y sus instituciones, lo que implica también la independencia de las autoridades universitarias. Para conquistar estas demandas se hace indispensable la movilización unitaria y a escala nacional.