El Consejo Superior de la UNPaz aprobó un nuevo Régimen General del curso de ingreso que se implementará a partir de 2025. Se dictará de manera intensiva durante el mes de febrero. Hasta el momento se ofrecía de manera cuatrimestral (marzo - junio). ¿Qué otros cambios implica esta reforma y cómo afecta a docentes y estudiantes?
Martes 5 de noviembre
El pasado 29 de octubre el Consejo Superior (CS) de la Universidad Nacional de José C. Paz aprobó un nuevo Régimen General del Ciclo de Inicio Universitario (CIU). Este nuevo régimen alcanzará a todas las carreras a excepción de medicina que tendrá un Régimen Especial. ¿Qué otros cambios implican esta reforma y cómo afecta a docentes y estudiantes?
Desde el año 2016, el curso de ingreso contemplaba tres talleres (Lectura y Escritura, Matemática, y Sociedad y Vida Universitaria) y se dictaba en el primer cuatrimestre del año (marzo - junio). A partir del año próximo, el nuevo Régimen General para las carreras contará sólo con dos: Sociedad y Vida Universitaria, y un taller específico según la carrera elegida que se dictarán de manera intensiva durante febrero. Por su parte, la carrera de medicina, inaugurada en 2022, mantendrá los tres talleres mencionados, tendrá tres específicos, y se ofrecerá durante el primer cuatrimestre como ocurría hasta el momento.
¿Qué sucede entonces con el Taller de Lectura y Escritura, y el de Matemática que se ofrecían hasta este momento? El primero desaparece como tal. Por su parte, el Taller de Matemática sólo se ofrecerá en los ingresos a algunas licenciaturas y tecnicaturas. Al reducirse las carreras para las cuales se dictará matemática, muchos docentes perderán sus cargos. En los hechos, el nuevo régimen implica la destrucción de puestos de trabajo.
Otra de las modificaciones para los docentes que mantengan su puesto es la carga horaria semanal. Los talleres de este nuevo Régimen General, que se ofrecerá de manera intensiva únicamente durante el mes febrero, tendrán una carga horaria de 6 (seis) horas contra 4 (cuatro) que tenían el año pasado. Esto quiere decir que los docentes tendrán que asistir mínimamente dos veces por semana a la universidad para dictar sus clases, cuando el año pasado sólo asistían una. En consecuencia, un docente del ingreso necesita tener mayor disponibilidad horaria para poder seguir formando parte del CIU, y para el mes de febrero muchos ya tienen sus horarios asignados en escuelas secundarias donde también trabajan. De esta manera, hay profesores que corren el riesgo de perder su cargo en el CIU si los nuevos horarios no son compatibles con su disponibilidad horaria.
La reforma del CIU y sus consecuencias sobre el trabajo docente expusieron una vez más la precariedad e inestabilidad laboral en la que se encuentran los docentes del ingreso universitario. Desde la creación del CIU, los profesores que allí se desempeñan no son parte de la planta permanente de la universidad sino que su vínculo con la institución es a través de un contrato precario, que desconoce cualquier tipo de derecho laboral, por ejemplo indemnización para los docentes que pierdan sus cargos.
Estas condiciones de precariedad, en la que también se encuentran muchos trabajadores no docentes que son parte del servicio de maestranza -por mencionar otro ejemplo-, le aseguran a la universidad poder aplicar los ajustes necesarios para adecuarse a la nueva situación presupuestaria. Así ocurrió este verano con los docentes que fueron cesanteados de sus cargos de parte de la gestión de la universidad. En este caso, el nuevo régimen del CIU se amolda al fuerte recorte presupuestario que el gobierno de Javier Milei viene llevando adelante sobre las universidades públicas nacionales.
¿Cómo afecta a los estudiantes?
El nuevo Régimen General del CIU, que como se ha mencionado se cursará de manera intensiva en un mes (febrero), implicará una reducción en la carga horaria si comparamos con el régimen que estuvo vigente hasta este año. Durante el mes de febrero los estudiantes cursarán 48 horas a diferencia de las 64 que se cursaban distribuidas en un cuatrimestre con el anterior régimen. La cursada intensiva mensual que reemplaza la modalidad cuatrimestral no permite a los estudiantes ingresantes elegir por una modalidad u otra. Esta modificación no va en sentido de nivelar el aprendizaje con el que los estudiantes finalizan sus estudios secundarios, que se supone que es la función del curso de ingreso.
Este nuevo Régimen General se crea en un contexto donde el gobierno nacional intenta instalar que la responsabilidad del nivel educativo de los estudiantes que terminan sus estudios secundarios es de la docencia, idea con la que busca cuestionar a la educación pública para no focalizar el debate en el salario, la sobrecarga laboral y las condiciones de enseñanza y aprendizaje. Las Pruebas Aprender, que se llevaron adelante el pasado 24 de octubre, y cuyos resultados están próximos a publicarse, van en ese sentido.