El gobierno de Macri viene aplicando distintas medidas antipopulares, algunas de las cuales incluso el kirchnerismo había intentado aplicar pero pensaba dejarle el trabajo duro a Daniel Scioli.
Myriam Bregman @myriambregman
Jueves 3 de marzo de 2016 00:05
Como esas medidas ya están teniendo resistencia, Patricia Bullrich viene intentando aplicar un Protocolo que impida cualquier manifestación contra esas medidas.
Desde nuestro partido impulsamos, junto a trabajadores estatales, docentes y estudiantes solidarios una importante manifestación en Callao y Corrientes este 24 de febrero. Fue en el marco del paro nacional y la movilización contra los despidos que protagonizaron los estatales. Varios comunicadores llamaron a reprimirnos “en cinco minutos” como anunció la Ministra. Pero la masividad se impuso.
Nuestra banca impulsó en la Cámara de Diputados un proyecto de resolución acompañando por diputados de diversos bloques, para rechazar y repudiar dicho Protocolo.
También desarrollamos otra importantísima iniciativa que sigue sumando apoyos: una solicitada impulsada por el CeProDH con las firmas de Abuelas de Plaza de Mayo; Chicha Mariani y Elsa Pavón, Adolfo Pérez Esquivel y Madres de Plaza de Mayo como Nora Cortiñas y Mirta Baravalle y Madres de La Rioja y de Neuquén y el Alto Valle. Adhirieron la mayoría de los organismos de derechos humanos, asociaciones de abogados y sumaron su firma diputados nacionales y provinciales de la izquierda y otras fuerzas.
Contra la protesta
Este Protocolo es un ataque directo al derecho a la protesta y los derechos elementales que con él se concatenan: el de manifestación, el de reunión y el de expresión. Por una mera resolución ministerial pretenden burlar toda la legislación nacional e internacional vigente así como numerosos fallos que con lucha hemos conseguido.
Como la violencia institucional muchas veces quedó expuesta por la audaz acción de periodistas, el Protocolo restringe su actuación. No quieren que se repita la experiencia de los casos de Kosteki y Santillán, Mariano Ferreyra, o el “gendarme carancho”. Si hay heridos o muertos en una protesta, que no se conozcan los responsables.
También es de una gravedad inusitada que no solo parta de establecer que toda manifestación constituye un “delito flagrante”, sino que además ataca directamente el derecho a la integridad física de las personas que asisten a una manifestación, que el protocolo delegue en cada una de las fuerzas federales y provinciales la facultad de dictar sus propios procedimientos de actuación. Como denunció el CELS, “no prohíbe explícitamente
Myriam Bregman
Diputada Nacional por el PTS-Frente de Izquierda Unidad. Abogada del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) y el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS). Intervino en numerosos juicios contra los genocidas de la última dictadura militar, como el de Etchecolatz, Von Wernich y la megacausa ESMA. Fue abogada de Jorge Julio López y una de las impulsoras de la lucha ante su desaparición. Impulsó, junto a trabajadores de Pepsico y Kraft-Mondelez, la denuncia por el espionaje ilegal de la Gendarmería, conocido como "Proyecto (...)
