El sábado 5 de noviembre se realizó una nueva edición de la marcha del orgullo en la Ciudad de Buenos Aires, una multitud movilizó contra la discriminación a las personas LGBTIQ+. El Frente de Izquierda marchó denunciando el ajuste de los gobiernos y el FMI.
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Pablo Herón @PhabloHeron
Domingo 6 de noviembre de 2022 12:01
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Crédito: Enfoque Rojo
El sábado 5 de noviembre se realizó la marcha del orgullo en la Ciudad de Buenos Aires. Una multitud se movilizó desde la Plaza de Mayo al Congreso contra la discriminación hacia las personas LGBTIQ+. La defensa de los derechos conquistados contra los sectores reaccionarios como Milei y la aparición con vida de Tehuel fueron algunos de los reclamos que se escucharon.
La marcha se dio en una situación crítica para el país, las grandes mayorías día a día ven sus ingresos deteriorados bajo el ajuste del gobierno y el FMI. Una realidad que impacta de lleno en les LGBTIQ+ que tienen laburos precarios, sobre todo en las travestis y personas trans discriminadas a la hora de acceder a un trabajo, una vivienda o la salud.
Como ya sucede hace varios años, no faltó la postal de carrozas de marcas y empresas, que aprovechan la bandera del orgullo para promocionarse y hacer sus negocios, como la cervecera Brahma o la empresa de moda y perfumes Jean Paul Gaultier que se sumó este año convocando distintas celebridades.
La comisión organizadora, donde tiene mayor peso organizaciones del Gobierno, convocó a la movilización con la consigna "la deuda es con nosotres" exigiendo la ley integral trans, ley antidiscriminatoria y por sí al lenguaje inclusivo. Desde el escenario se escucharon distintas críticas, desde a Soledad Acuña por su campaña junto a Larreta contra el lenguaje inclusivo en las escuelas, hasta a la ex ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, por por los recortes y la subejecución de presupuesto en el área.
También señalaron al FMI y al ministro de economía Sergio Massa por la situación económica, pero en los hechos el ajuste es una política del conjunto del gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, que además cuenta con el aval de la derecha que pide más recortes. Juntos por el Cambio tampoco perdió la oportunidad para aparecer en la marcha y posar de “inclusivo” con su propia carroza, mientras son los mismos que después atacan el lenguaje inclusivo para hacer campaña y disputar la agenda reaccionaria con Milei, que también piden más criminalización como se vio con las mujeres mapuche de Villa Mascardi que aún se encuentran detenidas.
Una vez más, la marcha del orgullo mostró la capacidad de ser miles en las calles contra la discriminación, y también el intento de las grandes coaliciones políticas, incluyendo directamente sectores empresariales, de utilizarla para lavarse la cara mientras sostienen un rumbo que empobrece a las grandes mayorías. Por eso el Frente de Izquierda Unidad, participó denunciando el rol los gobiernos y el FMI en medio de la crisis económica, movilizando junto a jóvenes precarizades, estudiantes, trabajadores de fábricas recuperadas, docentes y de la salud que se encuentran luchando por sus salarios y condiciones laborales, porque la única manera de enfrentar esta política de ajuste es confiando en la unión de les trabajadores con todos los sectores oprimidos.
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Pablo Herón
Columnista de la sección Género y Sexualidades de La Izquierda Diario.