Compartimos algunas conclusiones de las intervenciones e intercambios realizados por la Juventud del PTS y delegados de distintos lugares de trabajo y estudio a lo largo y ancho del país, que nos encontramos en la última Conferencia Nacional del PTS realizada el pasado 20 y 21 de julio. Desde allí, queremos pensar los desafíos que se nos presentan a quienes peleamos por un proyecto socialista para la juventud, como alternativa y superación de los proyectos que proponen tanto los libertarios como el peronismo.

¿Por qué hay una oportunidad para la izquierda en la Juventud?

Con el triunfo de Javier Milei, desde el mainstream de la política y los medios de comunicación se dedicaron a repetir que la juventud se volvió de derecha. Por eso distintos analistas políticos y encuestas vienen poniendo el foco en lo que pasa en esta franja de la sociedad (sobre todo desde los 15 a los 29 años). Ahora bien, tras los primeros meses del gobierno comenzamos a ver que es un sector que está cambiando. Frente a la desilusión con el proyecto peronista, que atraviesa una profunda crisis y que no propone ninguna alternativa para el futuro de la juventud, se expresa cierta polarización hacia los extremos. Obviamente, no podemos negar que Milei sigue conservando un peso importante, pero lo novedoso es que comienza a verse posible el desarrollo de un polo de oposición por izquierda contra el proyecto libertariano. Varias encuestadoras y analistas vienen señalando que con el transcurso de la gestión empieza a crecer la decepción entre los más jóvenes, que se alejan de la esperanza que se mantenía a inicios del gobierno.

¿Pero a qué responde este cambio?

Como expresamos en el manifiesto votado en la conferencia el pasado fin de semana desde el PTS, el gobierno está llevando adelante una brutal política de ajuste: los salarios no paran de caer en términos reales, al igual que las jubilaciones y asignaciones sociales.

El gobierno mostró desde sus primeros días que su plan es atacar los derechos históricos de la clase trabajadora y viene intentando avanzar en ese sentido. Pero la situación está cambiando por abajo y empiezan a surgir luchas y resistencias de la clase trabajadora y de la juventud. Así lo vemos en procesos de lucha que tuvieron su pico más alto en la provincia de Misiones, o actualmente en la pelea que están dando los trabajadores del Neumático, del Hospital Posadas, de GPS, la tercerizada de Aerolíneas Argentinas y de los miles de trabajadores estatales que perdieron sus puestos de trabajo, entre los que se encuentran los trabajadores de los sitios de la Memoria que el gobierno quiere vaciar.

El ajuste es aún más sentido en la juventud. El impacto se siente particularmente entre quienes ya trabajaban sin aguinaldos, sin vacaciones pagas, sin licencia por enfermedad, sin licencia por estudios, muchos incluso siendo monotributistas o trabajando en negro. Millones de jóvenes votaron a este gobierno con la esperanza de una mejor vida, pero en un país donde en lo que va del año los despidos, según un informe de CEPTA, son casi 200 mil (solo en el sector formal), se hace cada vez más difícil pensar en un progreso individual. La ilusión de cobrar mejores salarios, o “en dólares”, contrasta con un gobierno que ahora dice que volverá al Ticket canasta y quiere aumentar la jornada de trabajo a 12 horas.

Este mismo gobierno es el que busca legitimar, desde el aparato del Estado, una reacción patriarcal a todos los derechos conquistados por los movimientos de lucha de las mujeres y personas LGTTBIQ+, que tienen un peso muy relevante entre las y los jóvenes. La histórica marcha del 8M mostró que hay cientos de miles dispuestas, dispuestes y dispuestos a resistir en la vereda de enfrente del gobierno.

Otro punto de apoyo es el rechazo de sectores importantes de la juventuda la destrucción del planeta, frente a un gobierno que quiere avanzar en la entrega del litio y los bienes comunes naturales al imperialismo y las multinacionales: un plan extractivista que busca profundizar con la implementación del RIGI en las distintas provincias. En este sentido, en la conferencia se planteó la denuncia al gobierno de Axel Kicillof que en la provincia de Buenos Aires continúa esta política extractivista con un RIGI propio.

Esta tendencia tuvo un importante episodio en la marcha histórica del 23 de abril con más de un millón de movilizados en marchas masivas en CABA, Córdoba, Rosario, Mendoza, Neuquén y otras ciudades del país. Frente a esto el gobierno tuvo que retroceder en el ataque hacia el presupuesto, pese al rol que jugaron tanto las burocracias estudiantiles como los rectores, que se encargaron de desviar la lucha después de la inmensa movilización que mostró una gran potencialidad, como ya desarrollamos en otros artículos de Armas de la Crítica.

Esta pelea hoy en día sigue abierta, como evidencia la denuncia de docentes y no docentes por el ajuste en sus salarios que siguen pulverizados ante la inflación. Este reclamo pone en peligro el inicio de clases en el segundo cuatrimestre por las medidas de lucha que están llamando algunos sindicatos docentes y no docentes a los que desde el movimiento estudiantil tenemos que acompañar. En este marco repudiamos el ataque tanto a la educación pública como a la autonomía universitaria, de parte del gobierno de Milei que dispuso la intervención ilegal de la Universidad Nacional Madres de Plaza de Mayo.

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Lo nuevo que surge en la juventud y sus desafíos

Una de las delegadas de la juventud en tomar la palabra fue Sid, joven estudiante de la UNLa, quien contó a la conferencia: “yo me sumé a militar en el partido hace unas semanas. Las marchas contra la Ley Bases en el verano fueron de mis primeras. Conocí a la agrupación de la UNLa por un grupo de WhatsApp de la carrera donde les compañeres discutían con un grupo de libertarios. Creo que tenemos una gran oportunidad para sumar gente, no solo por la crisis del peronismo sino también porque el país y el mundo están pasando por una serie de sucesos que dan hacia la politización y a cuestionarse formas de vida y de gobierno. Creo que es nuestra oportunidad para demostrar que hay una alternativa al sistema capitalista y es una izquierda socialista. No solo en Argentina sino en el resto del mundo, explicando por qué somos internacionalistas”.

En la crónica de la conferencia, hicimos referencia a cómo “una joven compañera universitaria habló desde Comodoro Rivadavia para contar cómo está avanzado la organización partidaria en esa ciudad. Ella conoció a Myriam Bregman a través de Tik Tok y, con compañeros de la provincia, hace pocos meses decidió iniciar su militancia en nuestro partido, particularmente en la Universidad, a partir de pelear por una perspectiva socialista en la Juventud.”

Otras de las intervenciones destacadas vinieron de parte de las y los estudiantes secundarios: “En los últimos 6 meses triplicamos nuestra militancia. Muchos jóvenes ven que nosotros sí damos la batalla hasta el final y no nos vamos a callar con ningún gobierno. Se quieren organizar con nosotros porque ven que el peronismo está en crisis”. Kusy y Carme hablan desde la Zona Norte del conurbano. Son parte de la Juventud del PTS. Vienen organizando el No Pasarán en la zona, junto a jóvenes de 14 y 15 años, en San Fernando, Escobar, San Isidro y Tigre. Ese importante desafío no está libre de dificultades e implica múltiples debates y discusiones con defensores de Milei y peronistas. En el mismo sentido, se planteó la oportunidad de multiplicar nuestras agrupaciones secundarias No Pasarán en Capital Federal, el AMBA, La Plata, Rosario, Neuquén, entre otros lugares.

Respecto al debate sobre el rol del peronismo, Matias, compañero estudiante de Sociología en Humanidades de la Universidad de La Plata, planteó: “el fracaso del macrismo y su meritocracia, del malmenorismo y “el Estado que te cuida” con Alberto y CFK, y la inestabilidad y crisis del experimento libertariano, son una combinación que en parte permite afirmar que ‘se probó de todo’ menos lo nuestro (el proyecto de la izquierda). Significaría un gran salto adelante que sectores de las nuevas generaciones tomen en sus manos la pelea por una sociedad sin explotación ni opresión. Hoy, los que tienen que explicar la miseria y cómo llegamos hasta acá, son los ricos, los grandes empresarios y sus gobiernos amigos. En este sentido, destacó la definición de la conferencia de ‘volver a la carga’ con nuestra pelea por la ruptura con el FMI, que ni el “ala progresista”(Grabois) del peronismo cuestiona. Sin desconocer soberanamente la deuda no se puede pensar en resolver ningún problema de la clase trabajadora y los sectores populares. Ahora es momento de pelear en cada lugar el potencial de lo colectivo. En cada facultad y lugar de trabajo tenemos planteadas distintas luchas políticas, pero en todas hay que enfrentar el individualismo y la resignación que siembran el peronismo y la derecha. Construir en los hechos espacios colectivos que muestran otra alternativa.”

Todos estos testimonios muestran que desde la Juventud del PTS estamos empalmando con el descontento con el gobierno que se profundiza en sectores de la juventud y que es una oportunidad para que las ideas de la izquierda sean una alternativa. Lo que nos permite pensar cómo desde nuestra militancia podemos intervenir audazmente sobre ese sector, y pelear por desarrollar una franja de la juventud que despliegue banderas socialistas contra la idea de que la juventud se volvió de derecha. De esta forma, queremos dar batalla tanto contra las ideas individualistas impulsadas por los libertarios, como también la propuesta del Peronismo. Frente a quienes dicen que no hay alternativa, reafirmamos que la única salida es por izquierda.

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Esta hipótesis que nos planteamos fundamenta también la oportunidad de que un discurso radical socialista tenga mayor adhesión, que cuestione los aspectos reaccionarios del gobierno pero también al sistema capitalista en su conjunto. Esto empezamos a verlo expresado en un mayor interés por las ideas de izquierda. Hicimos charlas enormes de más de mil personas en la facultad de Psicología de la UNLP y Filosofía y Letras de la UBA de Myriam Bregman y Christian Castillo, y muy novedosa la asistencia de 500 personas en la UNGS (Malvinas Argentinas, segundo cordón del GBA), con Myriam y Raúl Godoy, además de talleres donde centenares de jóvenes a nivel nacional discute a partir del folleto ¿De qué hablamos cuando decimos socialismo? en casas culturales que el PTS impulsa en todo el país. Avidez que también se expresó en la gran concurrencia y difusión que tienen los cursos de debate marxista que estamos impulsando durante las vacaciones de invierno en distintas facultades. También se destacó, como parte de esta pelea que venimos impulsando, este suplemento mensual de la Juventud del PTS, desde el cual nos proponemos dar los principales debates que atraviesan a la juventud en el terreno político, como teórico e ideológico. También, con el programa de Tiempo Libre Radio, con gran llegada en redes sociales y que impulsan compañeros de la Juventud Trabajadora, con columnas que abordan varios de los temas planteados.

Malena, trabajadora de Call Center que es parte de La Red, agrupación de jóvenes trabajadores, informales, tercerizados y desocupados, transmitió: "Los ricos se están haciendo cada vez más ricos mientras los jóvenes tenemos dos, tres trabajos para llegar a fin de mes en laburos re quemantes. Hay mucha bronca con esta realidad. Nos estamos organizamos y la peleamos. No vamos a pisarle la cabeza al de al lado, como quieren que hagamos. Frente a la informalidad y la desocupación que crece más, decimos que es posible pensar otra solución: repartir las horas de trabajo a 6 horas, 5 días, con salarios que alcancen y recuperar nuestro tiempo. Queremos que se convierta en un deseo de miles de pibes más. Desde ahora nos damos esos espacios de organización, sociales y culturales, como lo vienen haciendo jóvenes de las crews de Hip Hop como ‘Insurrectos’, que se organizan en La Red. Juntos se manifestaron contra la Ley Bases con sus grafitis y breaking en las calles, a modo de protesta, haciendo también eventos en las casas culturales socialistas de cientos de jóvenes contra el FMI y en solidaridad con las luchas en curso."

En las intervenciones también se destacó cómo la juventud en Argentina viene haciendo una experiencia frente al gobierno de Milei, pero también como parte de un fenómeno de características internacionales. Ante un mundo que no tiene más que ofrecer que crisis y guerras, la juventud empieza a revelarse. Desde la juventud de la Fracción Trotskista Cuarta Internacional (FT-CI) venimos siendo parte de estos procesos en decenas de países de América Latina, Estados Unidos y Europa, como desarrollamos en este anterior artículo. En Estados Unidos, muchos analistas comienzan a comparar el movimiento pro Palestina con el fenómeno antiguerra de Vietnam, mientras se desarrollan tomas en las universidades más importantes del mundo, o se realizan festivales con miles de asistentes como en Chile. Allí, nuestros compañeros de la Juventud del PTR (partido hermano del PTS en Chile, parte de la FT) jugaron un papel muy destacado siendo uno de los principales impulsores de estas iniciativas. Estos procesos no llegan a la radicalización de los movimientos internacionales de los ‘60, pero marcan una tendencia que está impactando en todo el mundo y también en nuestro país.

La conferencia mostró la oportunidad de sumar muchos más compañeros al PTS, que están dando una lucha codo a codo. A esta instancia se llegó con decenas de informes elaborados por la militancia y reflexiones políticas, en los que fueron expresados distintos puntos de vista en la misma conferencia de forma fraternal. Ahora se nos plantea el desafío de lograr un diálogo político profundo con las compañeras y compañeros que simpatizan con nuestras ideas o nos acompañan en cada pelea, en cada lugar de estudio y de trabajo.

El ejemplo de las mujeres y las diversidades para enfrentar a Milei

“Es la primera vez que participo en una conferencia de un partido político y resultó ser una experiencia enriquecedora. Rescato algunos puntos del debate que fueron los que más me interpelan: generar espacios de reunión para organizar una lucha colectiva y hacer hincapié en la temática Iglesia y Estado, asunto separado, que tuvo su apogeo hace unos años y la burguesía logró aplazar su discusión”. Así lo planteó Victoria, estudiante de la Universidad de General Sarmiento. Es un punto muy importante de la conferencia porque, como sabemos, Milei se declaró enemigo de las conquistas del movimiento feminista y de las diversidades. Desde nuestra agrupación Pan y Rosas queremos abrir estos debates. Retomar la fuerza del movimiento de mujeres es fundamental para enfrentar las políticas retrógradas de la derecha de Milei y también para plantear una alternativa distinta a quienes proponen que la salida es de la mano de la iglesia y el papa.

La vuelta a discursos prehistóricos (que van desde denigrar la identidad sexual de las personas, hasta cuestionar la Ley de divorcio o alentar la irresponsabilidad parental) no viene solo del Gobierno. Los idearios conservadores y anti derechos operan sobre el conjunto de los partidos del régimen capitalista argentino, con una Iglesia Católica adherida al Estado.

Las alianzas políticas con la Iglesia Católica y con el Papa Francisco se sostienen, de izquierda a derecha, también dentro del peronismo. Es la misma institución que se opone a todas las leyes que conquistó el movimiento de mujeres y diversidades en los últimos años. Además fue cómplice, junto a los grandes empresarios del país, del genocidio de la última dictadura cívico-militar.

En los distintos programas y espacios del peronismo vienen impulsando a dos figuras que son afines a la Iglesia Católica: el ex Secretario de Comercio Guillermo Moreno y el “agente” del papa en Argentina, Juan Grabois. El primero directamente plantea que el “progresismo” y sobre todo el feminismo son responsables de la derrota del peronismo y promulga una vuelta a la doctrina. Por otro lado Grabois se pasea por los canales de televisión con su crucifijo, operando para dividir en dos las caras de Bergoglio: quiere mostrar un Papa bueno con los pobres, que critica las guerras y la crisis ambiental provocadas por el capitalismo. Pero a la vez oculta su rostro de poder patriarcal y antiderechos. Esta contradicción no es inocua. Los sectores del feminismo que se unieron a Grabois, como Ofelia Fernández, abandonaron la discusión de separar a la Iglesia del Estado, que había quedado como objetivo prioritario tras la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.

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Sobre este debate, Agustina, compañera de Trabajo Social de la UNLP, también nos compartió sus impresiones sobre lo que para ella fue su primera conferencia: “La discusión sobre Grabois y la Iglesia me pareció re interesante para pensar discusiones con Patria Grande en la facu también. Cuando hablaba de que la Iglesia está en todos lados y que apoyarla o no discutirle nada, es en parte aportar a un retroceso del movimiento feminista, se me venía a la cabeza lo planchado que está hoy todo con el feminismo y qué desafíos tenemos por delante entendiendo que somos, junto a las diversidades, las primeras atacadas con este gobierno."

Una batalla contra la resignación, por una juventud socialista

Desde la Juventud del PTS intentamos hacer un aporte a cada pelea que dan los trabajadores, los movimientos sociales y todos los que se levantan contra el ajuste del gobierno de Milei. Creemos que no da lo mismo si emergen de estas experiencias sectores de la clase trabajadora y de la juventud con mayor confianza en sus propias fuerzas, que superen los marcos “normales” de luchas reivindicativas y a las distintas burocracias. Por eso, apostamos a ser un actor en el desarrollo de los sectores más combativos de la clase trabajadora y el movimiento estudiantil. Peleamos en todos los lugares de estudio y trabajo en los que intervenimos, para forjar desde la juventud una poderosa alianza entre obreros y estudiantes, que retome las mejores tradiciones de nuestro país, como el Cordobazo y la oleada de levantamientos y radicalización hasta el golpe del ’76.

En este sentido, esta semana nos acercamos estudiantes y jóvenes trabajadores de la Zona Norte del Gran Buenos Aires y de la CABA, a hacer una jornada de agitación y apoyo a los trabajadores del neumático en la puerta de la fábrica Fate y, desde la juventud de Zona Sur, en Bridgestone. También estuvimos en el Hospital Posadas, desde la UNaHur, UNLP y la UBA, junto a la Posta de Salud y Cuidado. A su vez, le exigimos a las conducciones de los centros de estudiantes, en su mayoría en manos de radicales y peronistas, que sean parte de esta lucha y no dejen solos a los trabajadores frente a los despidos.

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Tenemos un gran desafío por delante. No da lo mismo dar una pelea con todas nuestras fuerzas por construir un proyecto político superador de la miseria planificada que rige este sistema. Es importante saber contra quienes peleamos y con qué fuerza contamos para ello.

“La oportunidad política que vemos, para aprovecharla requiere de un trabajo profundo y sistemático. Nosotros le dedicamos muchas horas de nuestras vidas para poder desarrollar nuestra corriente. Junto con otros compañeros lo encaramos con esa ambición, para poder transmitir nuestras ideas. Con varios que recién nos conocían discutimos que nuestra militancia no es para que Myriam sea presidenta, sino porque queremos un gobierno de trabajadores. Y, en ese sentido, veo que Madygraf es un ejemplo de que los trabajadores podemos organizar y planificar la producción con mecanismos democráticos y puede romper con muchos sentidos comunes individualistas” dijo nuestro compañero Franco, estudiante de la UNGS y trabajador de Madygraf, en la conferencia.

Desde la Juventud del PTS queremos invitar a todos aquellos jóvenes y estudiantes que quieran dar una pelea colectiva contra el individualismo de Milei a sumarse a militar esta política con nosotros, a participar de cada conflicto en curso, a preparar con nosotros el inicio del segundo cuatrimestre en reuniones abiertas para todas las batallas por delante.

En las universidades, nos proponemos pelear en unidad con quienes siguen organizados en comisiones autoconvocadas y que vieron la miseria de las direcciones radicales y peronistas frente al potencial del movimiento que ganó las calles, junto a las demás fuerzas de izquierda. Queremos refundar los centros de estudiantes para ponerlos al servicio de la lucha junto a docentes, no docentes y todos los sectores del movimiento obrero, organizarlos de forma democrática desde las bases, con asambleas, comisiones y toda instancia participativa que rompa la rutina de los centros de servicios burocráticos como existen hoy, que defiendan las banderas del movimiento de mujeres y LGTTTBI+, del movimiento ambiental, y que propongan poner los conocimientos de la universidad pública al servicio de las necesidades de las mayorías trabajadoras y no de la minoría de grandes empresarios

Nos representa la canción que miles de estudiantes cantaron durante la marcha universitaria: “¡Qué cagazo, obreros y estudiantes, como en el Cordobazo”. No podemos dejar en manos de la burocracia estudiantil enquistada en nuestros centros este deseo profundo. Nosotros queremos tomar estas banderas más que nunca, lejos de toda resignación hoy necesitamos sumar fuerzas a una alternativa política que enfrente al gobierno de Milei y el FMI.