El año político de 2016 comenzó en forma similar a como terminó el año pasado. Acuerdos, negociaciones y disputas políticas siguen su curso.
Jueves 7 de enero de 2016
El ex presidente Lula Da Silva reunió a Dilma Rousseff y a la cúpula petista en Brasilia para ensayar el próximo paso de la danza entre el PT y el gobierno. Una danza donde el partido apoya y es el pilar del gobierno, al tiempo que hace críticas y dice no con la cabeza, para intentar mantener algún perfil autónomo y no hacer naufragar su popularidad.
El tema discursivo es el mismo: el PT intentaría empujar al gobierno a adoptar una política económica distinta, una especie de combinación moderada entre las medidas de austeridad (el “ajuste”) y algo de lo “bueno que tenía” el lulismo (especialmente el crédito). A eso llaman “guiño a izquierda”.
Por otro lado, el PMDB sigue siendo el representante mayor de la inercia política del país. El presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha (PMDB), archivó el pedido de impeachment del vicepresidente Michel Temer (también del PMDB). En pleno receso parlamentario, Cunha fue a la Cámara para, entre otras cosas, rechazar una solicitud de impeachment contra el vicepresidente de la República, Michel Temer.
El pedido de impeachment de Temer fue presentado en diciembre por un abogado alegando que el vicepresidente cometió un delito de responsabilidad y habría atentado contra la Ley Presupuestaria. Fue el segundo pedido de alejamiento de Temer archivado por Cunha, después de un primer intento que presentó el diputado Cabo Daciolo (ex PSOL, actualmente sin partido).
Por su lado, Temer comenzó el año con la declaración de que pretende mantener “una relación armoniosa” con la presidenta Dilma Rousseff, “por lo menos en los inicios del año”. Rápidamente viene a la memoria la carta de Temer a Dilma, el año pasado, con una serie de reclamos sobre la alianza con el PT que sirvió para aproximar al vice del ala proimpeachment que existe en el PMDB.
Mientras tanto, la pelea interna del PMDB es para definir quién será el nuevo líder del partido en el Congreso. La división entre las alas oficialistas y las proimpeachment está más marcada que nunca, con diputados de la segunda a la ofensiva contra el actual líder Picciani, que intenta ser reelecto. La disputa se revistió con la forma de una divergencia entre el criterio de elección, si es por mayoría simple o calificada de 2/3. Pero la cuestión de fondo es si el ala proimpeachment impondrá un cambio o no, ya que la mayoría simple favorece la chance de que Picciani permanezca en el cargo.
Picciani cuenta con la articulación política del la Casa de Gobierno, con la ayuda del comando del PMDB de Rio de Janeiro, que articuló el regreso de aliados que estaban en otros cargos a sus mandatos de diputados, pero el escenario de crisis no permite definir cómo se resolverá esta cuestión.
Pero la preocupación del PT en dirimir los desacuerdos internos y consolidar el apoyo del PMDB va mucho más allá. En el cambio de año, fue el ministro petista de la Casa Civil, Jaques Wagner, el encargado de intentar volver a tender un puente con el vicepresidente Temer, vinculado al ala más hostil del PMDB. No deja de tener su lógica particular ya que el mismo Jaques Wagner acaba de estampar en los diarios nacionales de gran circulación, su afirmación de que el PT “se ensució con el poder”.
La frase de Wagner se combina con otra, en un contexto bien diferente, del intendente de San Pablo, Haddad (PT). Comentando sobre las perspectivas del PT en las elecciones municipales de octubre próximo, intentó minimizar los impactos de los recurrentes escándalos de corrupción llevando la cuestión a un nivel meramente individual. “Existe gente buena y gente mala en todas las organizaciones humanas y hay gente buena y mala en el PSDB, en el PT; en el PMDB y en el PP”.
Pero la observación de Haddad se traiciona a si misma. Intentando defender al PT contra individuos “desviados” dentro del partido, el intendente de San Pablo apenas reconoce la triste verdad, que el PT hace mucho se convirtió en un partido como los otros. El único detalle “picante” es que Haddad realizó estas declaraciones la misma semana en que se unirá para anunciar el aumento de las tarifas de transporte en San Pablo, junto a Geraldo Alckmin, (gobernador del Estado de San Pablo y miembro del PSDB).
Fue contra esa dupla dirigente que se inició el gran movimiento de Junio de 2013. En 2015, fue contra Alckmin que una nueva generación de estudiantes pos-Junio ganó un protagonismo inédito. No está demás pensar que 2016 pueda comenzar realmente con actos convocados para este viernes 8 en San Pablo, Río de Janeiro, Belo Horizonte y otras ciudades. Y que en estos embates germinen respuestas más de fondo para los grandes problemas sociales del país, que la vieja política sirve solo para perpetuar.
Edison Urbano
Integrante del Movimiento de Trabajadores Revolucionario de Brasil.