Día internacional de las mujeres. 8M: marchamos contra la violencia y la precariedad de nuestras vidas

Norma y su hija Luz en Neuquén, Valeria en Córdoba, Ferni en Ciudad de Buenos Aires, son algunos de los nombres de las más de 50 víctimas de la violencia machista en lo que va del año. Pero esa violencia estructural en las sociedades en las que vivimos puede convertirse en letal porque las denuncias no son tomadas, la dependencia económica de las mujeres y sus hijes, que no encuentran trabajos, o son precarios, no tienen vivienda propia ni encuentran plazas en refugios siempre escasos. Por eso decimos que el Estado también es responsable.

La movilización estará atravesada por los femicidios en todo el país y por el segundo juicio por Lucía Perez, el aberrante femicidio de una joven en Mar del Plata que masivizó las marchas por NI UNA MENOS.

Es urgente que haya medidas para paliar la violencia machista que no cesa y prevenir los femicidios. La diputada Myriam Bregman, del PTS/Frente de Izquierda ya presentó en numerosas oportunidades un proyecto de plan nacional de emergencia contra la violencia de género que incluiría la construcción de hogares de refugio para las víctimas, acceso a crédito a tasa cero para la vivienda y trabajo genuino, así como asistencia de equipos interdisciplinarios. Pero éste como otros proyectos similares han sido cajoneados tanto bajo el gobierno de Cristina Kirchner, de Macri como de Alberto Fernández.

La reducción de planes sociales y la desfinanciación de los programas relacionados con las necesidades más acuciantes de las mujeres trabajadoras y del pueblo pobre son un gesto de pleitesía del gobierno del Frente de Todos a las imposiciones del FMI. Por eso, entre otras cosas, no hay -lamentablemente- una convocatoria unitaria para este próximo 8M.

La convocatoria de las agrupaciones políticamente independientes de todos los gobiernos también denuncia el ajuste que viene llevando adelante el gobierno de Alberto Fernandez, Sergio Massa y Cristina Kirchner, cuyas consecuencias se sienten en los barrios y lugares de trabajo, en la inflación que se come los salarios y las ayudas sociales, los tarifazos y la precariedad de los derechos esenciales como la luz y el gas, que afectan más a las mujeres que son sostén de hogar. Muchas ocupan los puestos de trabajo de las áreas como Salud y Educación donde los presupuestos son recortados.

La derecha de Juntos por el Cambio hace lo suyo en el Congreso y no se queda atrás en las provincias donde gobierna, y los anti derechos de Milei y Espert además de pedir más ajuste, hacen campañas reaccionarias contra los derechos conquistados como el aborto legal y la educación sexual integral, arengando para la tribuna electoral.

Por eso, este 8 de marzo marchamos contra la violencia machista, y contra al ajuste de los gobiernos y el FMI, en todo el país. Las organizaciones convocadas por la Asamblea por el Derecho al Aborto de CABA, Pan y Rosas, el Frente de Izquierda-Unidad, el Bloque piquetero y otras agrupaciones feministas y de izquierda convocan a marchar desde 9 de Julio y Avenida de Mayo, hacía la Plaza de Mayo desde las 16:30 h y también en distintos puntos del país.

Lo hacemos con las docentes que vienen de hacer paros, con las mujeres desocupadas que pelean por trabajo genuino y aumento de emergencia de las ayudas sociales, con las estudiantes que reclaman la separación de la Iglesia del Estado. Y también, hacemos de nuestra convocatoria una tribuna de solidaridad con las mujeres y todo el pueblo peruano que está enfrentando el golpe de estado y reclaman ¡fuera la golpista Boluarte!