La Cámara Federal de Casación Penal confirmó la condena a prisión perpetua de Carlos “Indio” Castillo y a su vez anuló la absolución de Pomares, recibida en un juicio de 2017 por homicidios y sustracción de personas.
Jueves 2 de mayo de 2019 00:03
En diciembre de 2017 el Tribunal Oral Federal en lo Criminal N°1 de La Plata dictó el veredicto en el juicio a dos miembros de la Concentración Nacional Universitaria (CNU). En la causa se juzgaban distintos crímenes cometidos durante el año 1976.
Los jueces consideraron que la banda paraestatal funcionaba con la aquiescencia absoluta del Estado y que formaba parte integral del plan de represión que era dirigido desde las más altas esferas del Estado argentino.
Luego de analizar las pruebas concluyeron que Carlos "El Indio" Castillo formaba parte de este grupo y que había participado en las desapariciones y los homicidios que allí se juzgaban. Pomares (que también formaba parte de esta agrupación) había sido reconocido, por medio de un álbum de fotografías de la época, por un sobreviviente de los hechos y por el hijo de una de las víctimas que a los diez años vio cómo se llevaban a su madre. Pero luego de declarar nulos esos reconocimientos, los jueces lo absolvieron.
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Este martes, según informó el Centro de Información Judicial, la Cámara Federal de Casación Penal (con los votos de los jueces Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Javier Carbajo confirmó la condena a prisión perpetua de Carlos Ernesto “Indio” Castillo por los delitos de homicidio y sustracción de personas y anuló la absolución de Juan José “Pipi” Pomares.
El informe de la Sala IV de la Cámara Federal señala que el reconocimiento es un medio de prueba válido y que resulta idóneo, apropiado y razonable para este tipo de causas.
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Así, luego de analizar que las pruebas anuladas resultaban dirimentes respecto de la acusación que se le formulaba a Pomares, hizo lugar a los recursos de los querellantes (el colectivo de organismos de derechos humanos Justicia Ya! La Plata, familiares de las víctimas y las secretarías de Derechos Humanos de la Nación y de la provincia de Buenos Aires), anuló su absolución y ordenó que se dicte una nueva sentencia.
Luz Santos Morón, abogada de Justicia Ya! La Plata y miembro del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) dijo a La Izquierda Diario que “este fallo es un triunfo de la lucha de las víctimas, los familiares y los organismos de derechos humanos que participamos de la querella y para todos quienes venimos denunciando que la absolución era impunidad, ya que durante todo el juicio había quedado demostrado que Pipi Pomares había sido partícipe de numerosos asesinatos contra jóvenes y obreros en La Plata”.
La letrada agregó que desde las querellas “plantearon en soledad el pedido de anulación de esa condena, ya que la fiscalía, pese a haber acusado durante el juicio oral, fue incapaz de recurrir ante Casación para tirar abajo esa absolución injusta. Este triunfo muestra una vez más la necesidad del juicio y castigo a todos los genocidas”.
Vale recordar que Juan José “Pipi” Pomares, una vez concluida la dictadura genocida, se recicló dentro del Partido Justicialista bonaerense, brindando sus “servicios” tanto al cafierismo de los 80, como al menemo-duhaldismo de los 90 y al kirchnerismo de los 2000. Al momento de ser denunciado y juzgado, Pomares era formalmente asesor del bloque de senadores de la provincia de Buenos Aires del kirchnerista Frente para la Victoria.
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