Tras reiterados ataques y censura a la película Aquarius, cuyo equipo denunció el golpe en Cannes, resultó elegida Pequeño segredo como precandidata al Oscar.
Violeta Bruck @Violeta_Bk
Miércoles 14 de septiembre de 2016
Durante el último Festival de Cannes todo el equipo de la película Aquarius , dirigida por Kleber Mendonça Filho (Sonidos vecinos) y con la actuación de Sonia Braga, realizó un acto de repudio contra el golpe en Brasil. En la sala donde se presentó el filme levantaron pancartas con las consignas "Un golpe tuvo lugar en Brasil", "Resistiremos", "Brasil ya no es una democracia", y se desplegó una bandera en la que se leía: "Stop the coup in Brazil". La intervención tuvo una importante repercusión en diversos medios de todo el mundo.
Mientras actualmente es una de las películas con más público en las salas brasileras, es blanco de constantes ataques por parte del gobierno golpista. La película, que ya es una referencia de la lucha contra el golpe, tuvo que enfrentar la arbitraria calificación de “apta para mayores de 18 años”, algo muy poco común en Brasil y que limita el público para el lanzamiento en salas.
Con buenas críticas y apoyo del público Aquarius se ubicaba como una de las favoritas para el Oscar, por eso mismo desde el Ministerio de Cultura se eligieron integrantes del jurado (que selecciona el film nacional que irá a la competencia) a personas que ya habían manifestado públicamente su rechazo a Mendonça Filho. Entre ellos el crítico Marcos Petrucelli, quien se había expresado por redes en contra de este film y su director por el rechazo al golpe que realizaron en Cannes. Debido a estoo, tres de las otras películas que participaban en la selección, Boi Neon de Gabriel Mascaro, Mae So Ha Uma de Anna Muylaert y Para minha amada morta de Aly Muritiba, se negaron a participar como posibles candidatas para aumentar las posibilidades de que Aquarius sea el film elegido.
Gabriel Mascaro lo anunció públicamente "Es lamentable que el Ministerio de Cultura, a través de la Secretaría del Audiovisual, apruebe para el comité de selección a un miembro que se comportó de manera irresponsable y poco profesional, haciendo declaraciones sin presentar pruebas contra el equipo de la película Aquarius, después de su protesta en la alfombra roja de Cannes. Aquarius fue la única película latinoamericana en la competición oficial en Cannes, aclamada por la crítica internacional. Dada la gravedad de la situación y en contra de la creación de precedentes, registramos nuestra incomodidad en participar en un proceso de selección de imparcialidad cuestionable."
Finalmente resultó elegida la película Pequeno segredo de David Schurmann como la precandidata de Brasil para competir por el Oscar a la Mejor película de habla no inglesa. Este largometraje cuenta una parte de la historia familiar del director, conocida por vivir viajando por el mundo en un velero, y se centra en la llegada de su hermana Kat, una niña huérfana y portadora de HIV que es adoptada por los Schurmann. El 24 de enero de 2017 la Academia anunciará finalmente quienes serán los cinco nominados de todo el mundo para competir como mejor película extranjera. La última vez que Brasil compitió por los premios Oscar fue en 1999 con Estación Central de Walter Salles.
Aquarius se presentará en los próximos meses en festivales importantes como el de Toronto y Nueva York, y aunque no sea elegida para representar a Brasil en los premios Oscar, varias publicaciones remarcan que Sonia Braga tiene chances de ser nominada como Mejor Actriz. Ya cuenta con acuerdos de distribución en más de 60 países (incluída Argentina), en todas las plataformas (cine, televisión y Netflix en cuatro territorios, incluyendo Asia).
La película expone la historia de Clara (Sonia Braga), una ex crítica musical de 65 años, que vive retirada en un edificio particular de la ciudad de Recife, el Aquarius, una construcción levantada en la década de 1940 y que bordea el océano Atlántico. Un importante promotor ha comprado todos los departamentos, pero ella se niega a vender el suyo y emprende una batalla contra la empresa que la acosa. La stresante situación la perturba y la lleva a pensar en su vida, en su pasado, en sus seres queridos. A pesar de las adversidades Clara está decidida a no dar el brazo a torcer.
Violeta Bruck
Nació en La Plata en abril de 1975. Prof en Comunicación Audiovisual (egresada UNLP). Miembro de Contraimagen, realizadora de los documentales Memoria para reincidentes y La internacional del fin del mundo