El conflicto abierto por los estudiantes de los CEIJA, detenidos por la policía, pone al descubierto la crisis en la educación de la provincia y la política de ajuste del gobierno.
Sábado 31 de marzo de 2018 15:10
El conflicto que vienen sosteniendo los estudiantes y docentes de los CEIJA (Centros de Estudios Integrales de Jóvenes y Adultos), en respuesta a la decisión de cerrarlos por parte de la ministra de Educación, Isolda Calsina, dió un salto al no hacerse esperar la represión policial.
El jueves 29 a la noche, con un enorme operativo represivo, integrado por una gran cantidad de efectivos, agentes de la brigada de investigaciones y siete patrulleros, detuvieron a cuatro estudiantes del CEIJA, su abogado, un profesor, y la concejala de San Salvador por el PTS-FIT, Andrea Gutiérrez, vulnerando completamente sus fueros de legisladora.
Luego de un repudio generalizado, incluso a nivel nacional y la movilización frente a la Central de Policía, tuvieron que liberar a los detenidos, que habían sido duramente maltratados, con heridas uno de ellos, después de haberlos mantenidos incomunicados por varias horas.
Mientras la realidad es que el gobierno ataca a los estudiantes, docentes y a la educación pública, el relato de diálogo, proponiendo el “Pacto Social por la Educación”, queda cada vez más en evidencia como una entera falsedad. Esta situación lleva a la necesidad de esclarecer cuales son las políticas que establecieron los gobiernos frente a la crisis de la educación que no se puede ocultar.
Frente a una necesidad, crearon los CEIJA para hacer un negocio
La situación de crisis en la educación es una realidad que se arrastra desde que fuera descentralizado el sistema educativo durante el menemismo. Actualmente en Jujuy sólo cuatro de cada diez estudiantes del secundario consigue recibirse, en una situación donde hay en total 429 escuelas primarias y sólo 186 escuelas secundarias públicas y privadas, y 27.000 jóvenes no culminan sus estudios y tampoco acceden a puestos de trabajo.
Muchos jóvenes por la situación económica de sus familias, tienen que salir a trabajar y se les dificulta terminar el secundario de 5 años; como también la realidad que más afecta a las adolescentes que tienen hijos, y muchas también trabajan, por lo que deben optar por una oferta educativa más acorde a sus posibilidades para terminar la secundaria.
Como respuesta a esta situación el gobierno de Fellner por resoluciones ministeriales creó los CEIJA, que permiten finalizar la secundaria en 3 años, con modalidades de cursada diurna y nocturna. Estos institutos nunca fueron incorporados al sistema educativo plenamente, sino que el Estado los considera “para-sistémicos”, aunque el gobierno provincial cubría los salarios de los docentes y el ministerio de Educación avalaba los títulos.
La gestión de los CEIJA recaía en manos privadas, en algunos casos en ex dirigentes gremiales del CEDEMS, y otros gremios también participaron de la creación de estas instituciones como el SEOM. El Estado les permitía a los administradores cobrar una inscripción y una cuota mensual a los estudiantes, y nunca quedó claro el destino de este dinero.
De esta manera, el Estado respondía a una necesidad educativa abriendo un negocio para privados, otorgando partidas del presupuesto educativo, que en realidad podrían destinarse a crear nuevos colegios como parte del sistema de educación público.
De manera similar se manejan los conocidos JIM CEDEMS (jardín infanto-maternal), que recientemente reemplazaron toda la planta de docentes que tenía (300), mientras la comisión directiva del CEDEMS, sigue manteniendo un lucrativo negocio con los jardines maternales.
Es decir, que las propias conducciones gremiales de los sindicatos que deberían impulsar la lucha por la defensa de la educación pública y gratuita para el conjunto de la comunidad educativa, son cómplices de una política que permite al Estado desligarse aún más de su responsabilidad en torno a la educación y permitir un negocio a los privados.
“Defendemos el derecho a la educación y nos oponemos al negocio de las instituciones privadas”
El gobierno de Cambiemos, con su discurso de cambio, lejos de regularizar esta situación, o absorber a los CEIJA al Estado, garantizando su gratuidad, busca cerrar los establecimientos, dejando en una situación incierta a los estudiantes y docentes, con el resultado de un ajuste sobre la escuela secundaria.
Otro ejemplo de la falta de una política que mejore y amplíe el sistema educativo, con nuevas escuelas, es el caso de la Escuela “Hellen Keller”, un espacio dedicado a chicos hipoacúsicos, que se pretende reducir para compartirlo con los estudiantes de la escuela de teatro “Tito Guerra”.
El PTS en el Frente de Izquierda, apoya incondicionalmente a los estudiantes y docentes en su lucha frente a los ataque de Morales-Calsina, pero deja clara su posición frente a los que hicieron de las necesidades de cientos de jóvenes un lucrativo negocio.
Rechazamos toda medida que le implique a los estudiantes de los CEIJA perder los años ya acreditados y tener que empezar de nuevo. Los CEIJA deberían ser incorporados al sistema educativo estatal porque el Estado debe garantizar la gratuidad del estudio y la fuente laboral de los docentes, creando nuevos colegios volcando una mayor partida presupuestaria.
Si existen denuncias de corrupción es importante que se investigue a todas las autoridades correspondientes y se corroboren. Pero claro está que esto no podemos dejarlo en manos del gobierno ajustador, por lo que proponemos que se conforme una comisión independiente de estudiantes, docentes y padres.
Frente a los ataques a la educación desde el PTS/FIT y la agrupación docente 9 de abril sostenemos que es necesario fortalecer la pelea independiente del gobierno y del PJ, en defensa de la educación pública, uniendo a los estudiantes, familiares y docentes con el pueblo trabajador, los únicos interesados en frenar el vaciamiento de la escuela pública. Y exigiendo a las conducciones gremiales que se realicen asambleas en cada escuela para discutir y resolver un plan de lucha a la altura de los ataques del Gobierno.
Convocamos a los estudiantes, docentes y trabajadores a levantar esta política junto al PTS-Frente de Izquierda y la agrupación de docentes 9 de abril en la movilización convocada por los gremios estatales y docentes para el próximo 4 de abril.