Conflicto con Operadores Móviles Virtuales podría llevar a las grandes compañías a compartir sus redes físicas. La competencia capitalista y las beneficios de las grades empresas quedan de manifiesto.
Miércoles 4 de julio de 2018
Un escenario nada alentador avizoran las grandes empresas de telecomunicaciones Movistar, Entel y Claro tras el fallo de la Corte Suprema que las condenó por vulnerar la libre competencia y les ordenara devolver parte del espectro de banda 700 MHz. Se trata de un fallo que es calificado como histórico y sin precedentes, y que ha generado la molestia de las grandes operadoras. Más aún, luego que la Subsecretaria de Telecomunicaciones comunicara a las empresas el congelamiento de parte del espectro que usan para el despliegue del 4G y en el cual esperaban desarrollar futuras inversiones.
Se trata del conflicto que mantienen tres Operadores Móviles Virtuales (OMV), Netline, OPS y Telcomax con Movistar, Claro y Entel que también será zanjado por la misma sala del máximo tribunal del país, presidida por el ministro Sergio Muñoz. El fallo también podría dar un duro golpe a las gigantes de las telecomunicaciones, pues con el espectro que se queden, tendrían que compartirlo con aquellos que no cuenten con redes físicas.
Desde el gobierno miran con buenos ojos un eventual favorable a los OMV. ¿La razón? El alto precio que deben pagar a las empresas dueñas de las redes físicas que hacen imposible su despegue, comenta una alta fuente que pide reserva de su identidad. Ejemplo de frustrado rearme de estos players es la salida del mercado de Falabella Móvil, que anunciara en enero pasado.
La mayor crítica de los OMV hacia Movistar, Claro y Entel radica en el nivel de concentración del espectro que a la fecha mantienen, como lo detalla el siguiente gráfico.
Alejandra Valderrama
Redacción La Izquierda Diario Chile. Valparaíso, Chile