Declaración de la agrupación 9 de abril sobre el ejemplo de la lucha de la docencia de Salta, que con asambleas, paros y movilizaciones le torcieron el brazo al gobierno de Urtubey.
Viernes 22 de marzo de 2019 13:12
No hubo escuela o sala de profesores/as y maestras/os en la que no se haya escuchado el mismo diálogo a partir del lunes de esta semana: "¿Viste lo de Salta?", "así hay que luchar, hay que salir, hay que juntarse". "Consiguieron el 38%, y el 40% para los que tienen un solo cargo y no le van a descontar los días de paro", "pasaron por arriba a los gremios, hay que autoconvocarse". Estas expresiones son producto de lo que dejó la gran lucha de la docencia salteña que le torció el brazo al gobierno peronista de Urtubey.
El día miércoles, en el marco del paro y movilización ante la inauguración de las sesiones legislativas por parte del gobernador Morales, muchas y muchos docentes tanto en la Quiaca como en la capital se expresaron espontáneamente dentro de sus escuelas juntándose, realizando afiches y cánticos contra el ajuste; como también cortes de calles junto a la comunidad en los cambios de turno. Además, en la movilización se notó una mayor participación de docentes de primaria y secundaria.
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En las recorridas por los colegios que hicimos los docentes de la agrupación 9 de abril y en las escuelas en las que trabajamos, la lucha de Salta y cómo en Jujuy podemos lograr algo similar fue el centro de todos los debates.
Se vuelve a constatar que entre los trabajadores y trabajadoras existe una bronca y descontento muy grande contra las medidas de ajuste de Macri y los gobernadores que actúan bajo las órdenes del FMI. Los descuentos por parar, los tarifazos, la inflación creciente, no llegar a fin de mes, los pases a disponibilidad, los cierres de carreras y un largo etcétera, son parte de los múltiples motivos que generan la bronca y la disposición a la lucha. Muy lejos de los discursos de las directivas gremiales de que la base no quiere luchar.
¿Por qué, entonces, esa bronca, descontento y disposición a luchar no se expresa en masivas movilizaciones y paros contundentes como en Salta?
Una docente en un diálogo en sala de profesores responde: "hay un descrédito enorme de los dirigentes sindicales en Jujuy, nadie les cree".
Desde la agrupación 9 de abril compartimos esa bronca y descontento que se expresa en la mayoría de los trabajadores y también coincidimos en las críticas a las conducciones gremiales que no responden a la altura de las medidas de ajuste que nos afectan. En ese sentido, creemos que al igual que en la vecina provincia, esa bronca y ese descontento debe transformares en la fuerza motora para exigir e imponer a las dirigencias un plan de lucha unitario en base a asambleas comunes entre docentes afiliados o no, abiertas a la comunidad para realizar medidas masivas y contundentes junto a otros sectores de trabajadores y trabajadoras que también sufren el ajuste.
Hay que hacer realidad el canto que se escucha en las movilizaciones: “Unidad de los trabajadores y al que no le gusta se jode”. Esa bronca organizada es la que puede imponer el camino de un plan de lucha y paro provincial de gremios estatales y privados. Si esa fuerza se desarrolla hay muchas más posibilidades de vencer, como lo muestra Salta.
Párrafo aparte merece CTERA que dejó aislada la lucha de la docencia salteña, a tono con la estrategia de la CGT y el peronismo de hacer un frente anti Macri y confiar en las elecciones de octubre, lo que debilita la lucha de las y los trabajadoras/es y que le hace un gran favor a gobernadores peronistas como Urtubey que aplican el ajuste, al igual que el gobierno nacional o los gobernadores de Cambiemos.
Las y los docentes salteños dejaron una primera gran enseñanza de que los trabajadores tenemos la fuerza para enfrentar el ajuste en las calles y torcerle el brazo a los gobiernos ajustadores.
Hay que llenar los sindicatos de participación para transformarlos de raíz y que realmente sirvan para luchar y unir al conjunto de la docencia, en este caso. Para eso hay que avanzar en una verdadera democratización que sólo podrá darse con la participación activa de los miles y miles de docentes que hay en la provincia. En el camino de luchar por recuperar los gremios de manos de las conducciones burocráticas y que sean realmente una herramienta democrática y de lucha que defienda los intereses de la clase trabajadora.
El rutinarismo y conservadurismo de las directivas conspira contra esa perspectiva. Para muestra hace falta un botón: los vetustos estatutos sindicales no permiten afiliar a quienes no tienen horas cátedras en un contexto de creciente precarización laboral con contratos basuras y enormes dificultades para los docentes jóvenes recién recibidos para conseguir horas. El resultado es que los sectores más precarizados y jóvenes están fuera de los sindicatos. Este corporativismo sostenido por las directivas va en contra de un plan de lucha realmente unitario.
Por un plan de lucha unitario para derrotar el ajuste de Macri-Morales y el FMI
Desde la agrupación 9 de abril en la que confluimos docentes del PTS/Frente de izquierda y compañeras y compañeros independientes, venimos dando la pelea en las asambleas tanto de CeDEMS como de ADEP por poner un pie un plan de lucha verdaderamente unitario que una al conjunto de la docencia, con las familias, los estudiantes y otros sectores de trabajadores. Exigiendo a las conducciones a que se pongan a la cabeza y convoquen a asambleas urgentes comunes de todos los gremios y junto a los compañeros y compañeras que no estén afiliados pero quieran luchar. En esa unión está la fuerza para torcer el brazo del gobierno.
Además, defendemos que los trabajadores debemos construir nuestra propia alternativa política, independiente de todos los partidos tradicionales que defienden un sistema en el que siempre ganan los empresarios y perdemos los trabajadores. Por eso somos parte del Frente de Izquierda cuyos diputados Alejandro Vilca, Natalia Morales y Eduardo Hernández denunciaron el dietazo de $ 14.000 de los diputados oficialistas y del PJ y propusimos en la última asamblea de CeDEMS la exigencia de que todos los funcionarios y diputados ganen como una maestra cuestión que se votó junto con un repudio a los diputados que dijeron que el aumento era solo un “blanqueo”.
En este sentido damos también la batalla en el terreno electoral, siempre defendiendo una política a favor del pueblo trabajador. Sabiendo que la conquista de más diputados/as es una trinchera de lucha más para enfrentar el ajuste que va a continuar cualquiera sea el próximo gobierno, ya que la propuesta de renegociar con el FMI es una trampa puesto que nunca el fondo monetario ayudó al pueblo trabajador, sino que como hace ahora exige ajustar el gasto social y a los jubilados. Ni el actual oficialismo ni las vertientes del peronismo plantean romper el pacto con el FMI y dejar de pagar la deuda. Sólo el Frente de Izquierda levanta esa perspectiva. En este sentido, una buena elección del Frente de Izquierda es una mejor preparación para luchar contra el ajuste que se va a profundizar.
Como se señaló más arriba, bronca y descontento hay de sobra, eso debe ser el motor para salir a la pelea por nuestros derechos y fortalecer la exigencia a las directivas de un verdadero plan de lucha unitario. El ejemplo de la docencia salteña debe servir para generar una nueva moral de lucha también en Jujuy.