Entrevista a trabajadora. Contaminación de la Cuenca Matanza Riachuelo: Milei despidió a 350 trabajadores de ACUMAR

Las personas despedidas en realidad son de todas las áreas del organismo, no hubo áreas que se salvaron desde mi conocimiento. Sí hay una marcada tendencia a haber afectado áreas que tienen que ver con el trabajo territorial y comunitario, por ejemplo.

Hay muchos compañeros despedidos que eran justamente la pata más técnica del organismo, ya que ellos esas incumbencias hace tiempo que las intentan delegar a las a los departamentos, a la Ciudad de Buenos Aires y a los municipios de la provincia que son parte de la Cuenca y pareciera justamente que es adrede para poder recortar en estas partes del organismo.

Entre los compañeros despedidos hay muchos de la Dirección de Ordenamiento Territorial, de la Dirección de Salud, de la Dirección de Comunicaciones, de la Dirección de Fiscalización, de la Dirección de Calidad Ambiental, entre otras. Esto es lo que demuestra es un fuerte ataque a los sectores que son los que mantienen las actividades del organismo, porque después son actividades de soporte y control. Ellos son los que trabajan en el territorio, traen la información, trabajan con las comunidades, intentan gestionar los problemas en el lugar y después son todas las áreas más de tipo administrativas. Entonces parece que hay un interés bastante marcado de continuar sólo con la parte fiscal, de control y de autoridad y desligarse de todas las responsabilidades que tienen que ver con la mejora de la salud, de la población y del ambiente de la Cuenca Matanza-Riachuelo.

También me parece importante recalcar que hubo dos procesos distintos de despidos. Desde el año pasado venimos con un proceso de hostigamiento donde se le abrieron sumarios a 250 compañeros. Estos son sumarios truchos donde se dice que los compañeros no cumplieron los horarios estipulados, pero esto está basado solamente en los sistemas de fichaje que se encuentran en las oficinas. O sea, justamente lo que se hizo fue a tocar a todas las personas que trabajaban en el territorio que cumplían funciones en los municipios, diciéndoles que no habían cumplido con sus horarios laborales y que por eso tenían que presentar un descargo para poder responder el porqué de todos sus incumplimientos.

Esos descargos no fueron tomados como válidos, esos descargos se trabajaron con los sindicatos y abogados, se sumamente justificaron y sin embargo se desvinculó mediante esa manera a un montón de compañeros, unas 120 personas aproximadamente. Estos sumarios continúan abiertos, todavía quedaban la mitad de las personas con esta intimación.

Así que este año aprovecharon toda esta oleada de despidos para echar a más o menos 40 compañeros más vía esta metodología. Lo problemático de esto es que esto deja a los compañeros sin indemnización porque son compañeros de planta. No solamente se echó a gente que tenía pocos años en el organismo, sino también personas históricas que se vieron obligadas a ingresar a un juicio legal contra el Estado, contra Acumar para poder resarcir y valorar todos los años de trabajo.

Por otro lado, ayer se hicieron cesantías de aproximadamente 300 compañeros, aún todavía no tenemos los números finales porque esto se está haciendo de forma muy individual, envíandole a cada persona un mail a su casilla indicando que fue desvinculado a partir del 28 de febrero. Estas comunicaciones aparte fueron dadas a las 12:30 de la noche. Me parece terrible que las personas no puedan descansar ni un fin de semana y aprovechen la situación de un fin de semana largo para poder apaciguar un poco y dejar a los compañeros en la calle.

También me gustaría sumar que hay varios compañeros despedidos que son del Cupo Laboral Trans y esto lo justificaron en que ahora al bajar los niveles de total de de empleados en el organismo no era necesario y bajan a niveles mínimos de lo que pide la ley.

Hubo una marcada tendencia a haber despedido a personal que ingresó a planta a partir del 2020. Que esto no quiere decir que hayan ingresado al organismo en ese momento, sino que son personas históricas que tienen 15 años de trabajo, solo que hasta el 2020 habían estado con en locación de servicio, o sea, precarizadas con contrato de monotributo.

El impacto va a ser enorme porque al no estar los equipos técnicos, no se puede continuar con lo que son las tareas de recomposición, no se puede continuar con el acompañamiento de las personas que viven en la Cuenca Matanza - Riachuelo. No se puede inspeccionar las industrias que son las que generan efluentes y son muchísimas en la Cuenca.

Estamos hablando de que hay aproximadamente 1500 empresas que son las que tienen una inspección constante para poder ver cuáles son sus tareas de adecuación y de mejora para poder evitar seguir contaminando como lo venían haciendo años atrás, sumado a otras 3500 industrias que están empadronadas en la cuenca y que tienen incidencia en la calidad ambiental.

Eso es algo que hay que hacer continuamente, hay que evaluar, hay que estarles encima porque si no no no hay mejora justamente. También en este último tiempo se ve un retroceso importante en lo que es la limpieza de los márgenes, la limpieza de basurales, la limpieza del espejo de agua.

Esto es un trabajo que venía haciendo las cooperativas, que no eran trabajadores directos del organismo, sino que eran justamente compañeros que que venían trabajando en cada uno de sus territorios, en cada uno de sus barrios, haciendo las tareas de de saneamiento in situ, que son tan importantes porque ellos realmente son los que entienden lo que está pasando en en su población, en su territorio.

También hay un parate en la búsqueda activa de fuentes de exposición de contaminación. Se han cortado muchísimos convenios que eran los que iban evaluando justamente cuál era el avance de la contaminación día a día. Por ejemplo, teníamos un convenio con Aysa, que ya a partir del año pasado, se suspendió y nos achicó un montón la posibilidad de realizar evaluaciones de la calidad del agua, tanto de la superficial como subterránea y las evaluaciones de los afluentes de las de las industrias.

Nosotros además contamos con un laboratorio propio, pero también el laboratorio fue desfinanciado. También muchos de los compañeros fueron despedidos el año pasado dejando sin capacidad de trabajo a este espacio.

Asimismo, se frenaron todo lo que son relocalizaciones, soluciones habitacionales, que son programas y proyectos que ya estaban encaminados y solamente se detuvieron.

En cuanto a lo que es el presupuesto, seguimos con el mismo presupuesto de 2023. Lo cual no no ayuda mucho a poder continuar con algunas políticas que lleva a cabo el organismo. El presupuesto qestá ejecutado por varias jurisdicciones: el Estado Nacional que aporta una parte y también con préstamos internacionales y otros organismos con los cuales llevamos a cabo obras en conjunto para mejorar la infraestructuras de agua y cloaca.

Después parte del presupuesto proviene de la provincia Buenos Aires, de la Ciudad Autónoma y un presupuesto interno de Acumar. En cuanto cómo fueron utilizados durante esta gestión ese presupuesto, no podría indicártelo porque aún no están los resultados finales, pero sí viendo la pérdida de avance que tuvimos justamente en el plan integral de saneamiento ambiental, realmente da a preguntarse qué está pasando con el presupuesto de Acumar.

Esto es un proceso que viene desde aproximadamente marzo del 2024 con el principio con los sumarios administrativos que salieron a los compañeros, pero a partir de enero, después de las fiestas, empezamos a escuchar ciertos rumores de que había una posible nueva tanda de despido.

A partir de ahí, recibimos visitas del Ministerio de Economía y entiendo que el Ministerio de Desregulación, que tuvieron reuniones con los directivos del organismo para poder hablar sobre el plan de reducción que querían realizar. En conjunto con Acumar armaron un plan para despedir compañeros.

A raíz de esto se ha hablado en varias oportunidades con los sindicatos comentando la situación, los cuales en general nos lo desestimaron diciendo que hasta que no hubieran medidas más concretas no se podía accionar.

Es así que hasta que no hubo realmente despidos no tuvimos una asamblea. Hacía un montón que no teníamos un espacio de poder charlar con otras personas al respecto de lo que estaba pasando. Más allá de los comentarios entre compañeros de forma individual o algunos grupos de trabajo un poco más grandes. Por lo cual se volcaron todas las preocupaciones en esta asamblea que fue del sindicato ATE.

Nosotros también tenemos UPCN, que después de los despidos directamente le dijo a sus familiares que no se presentaran en el organismo. No podría decirte cuáles fueron las medidas que les dijeron van a llevar a cabo, pero entiendo que no fueron muchas. En cuanto a ATE, que tiene una una visión por ahí un poco más combativa, llamaron a una asamblea, pero realmente no hubieron medidas de fuerza como para poder enfrentar la situación. Esto fue hace 2 semanas y terminó en el despido de 350 compañeros más.

Lo mismo nos preguntamos. Hemos hablado con varios compañeros, ya que realmente han echado gente muy valiosa y clave en los puestos de trabajo para continuar con funciones que se llevan a cabo y que sin ellos no van a poder continuar. Estamos hablando de gente profesional, gente con un montón de años en el desarrollo de metodologías y tareas que no es que cualquier persona pueda entrar mañana y comenzar a hacerlas.

Asíque no, no estamos seguros de cómo va a continuar. Si lo que tiene esto pinta esto es justamente de empezar a sacarle incumbencias, funciones del organismo y diezmarlo, hasta un punto en donde ya no tenga sentido su continuidad. Lo cual es muy triste porque fueron muchos años de trabajo para poder lograr empezar, por lo menos, con la recomposición de la cuenca y empezar a mejorar la calidad de vida de las personas que viven ahí.

Me gustaría invitar a las personas que han trabajado con nosotros, a los que han colaborado con Acumar, a los vecinos de la Cuenca, las organizaciones sociales, que nos acompañen a partir del miércoles que se van a estar haciendo distintas actividades de movilización y visibilización en las oficinas centrales que son en Esmeralda 255 en Capital Federal desde las 9 am.

Sabemos que hay un montón de ciudadanos que nos acompañan y que saben lo importante que es nuestro trabajo y cómo ha cambiado la Cuenca Matanza Rechelo desde la intervención de Acumar en estos últimos años. Les pedimos que nos acompañen por redes, que cuenten entre su gente que esto está sucediendo y que esta situación hace peligrar aún más el estado y salud de la Cuenca.

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