UBA. Declaración del FITU Psicología: Luchemos por una Facultad realmente democrática

El día jueves 26 de mayo se llevó adelante la Junta Electoral del Consejo Directivo de la Facultad de Psicología UBA, con el objetivo de oficializar las listas frente a las próximas elecciones del claustro docente. Sobre los estatutos de un régimen universitario profundamente antidemocrático, Biglieri y su espacio político (Convergencia Académica - UCR) impugnaron la lista de oposición Alternativa Democrática (Kirchnerismo) en un intento de censurar a quienes piensan diferente. Desde las agrupaciones que conformamos el Frente de Izquierda Unidad, repudiamos la proscripción de la lista opositora.

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El órgano de gobierno de la Facultad, el Consejo Directivo, funciona con un voto calificado donde menos de 200 profesores eligen 8 consejeros, el resto, los más de 2 mil docentes que no cuentan con cargos concursados, votan como graduados a otros 4, mientras que 19 mil estudiantes solo cuentan con 4 consejeros, y donde los y las no docentes no tienen ni voz ni voto, de esta manera no puede representar al conjunto de la comunidad educativa de manera democrática. Este año se vota Decane en psico, y en las otras 12 facultades de la UBA y a su vez les Decanes van a votar al Rector, por eso este escándalo, tiene una lógica en este régimen. El modelo actual Universitario, sostenido tanto por autoridades radicales, como peronistas, Kirchneristas y del Pro, tiene como perspectiva la profundización de un modelo universitario mercantilista, donde se profundizan los negocios de posgrados y las injerencias empresariales, siendo además en su orientación cada vez más elitista. Ni la lista de Convergencia Académica (UCR), ni Alternativa Democrática (Kirchnerismo) plantean terminar con este régimen heredado de la Ley de Educación Superior del menemismo.

Mientras hoy la pobreza está cercana al 50%, la juventud es la que se lleva la peor parte; un 49.2% de los jóvenes se encuentran por debajo de la línea de pobreza y la desocupación llega al 29% en los jóvenes de hasta 29 años. Entramos a esta segunda ola en peores condiciones. El gobierno de Alberto Fernandez continúa priorizando el pago de la deuda externa, mientras el presupuesto 2021 constituye un ajuste real de un 11% en educación universitaria, y miles de compañeres tienen que abandonar sus estudios por falta de dispositivos o por no poder pagar la conectividad necesaria. En lo que va del año el gobierno destinó 60 veces más al pago de los intereses de deuda a los especuladores que a las becas progresar, que desde ya no son suficientes y muches ya fueron rechazades. Así mismo, las miles de familias que se quedaron sin ingresos durante la pandemia, tampoco están recibiendo el pago del IFE, ya que este fue eliminado de la partida para este año. En nuestra Facultad no estamos exentos de esta realidad, a un 1 año y medio de virtualidad, la facultad y las autoridades siguen sin garantizar las condiciones para que todes podamos cursar. Por lo contrario, profundiza restricciones y medidas que sólo apuntan a la deserción. En este contexto, ni la Federación Universitaria de Buenos Aires, ni la conducción del CEP, ambos espacios conducidos por la UCR - Cambiemos, estuvieron a la cabeza de la organización de les estudiantes para lograr que se cumplan las condiciones mínimas de cursada.

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Para que todes podamos decidir sobre cómo se conforma el gobierno de nuestra Facultad, necesitamos avanzar en un proceso de democratización general y en una nueva reforma universitaria; claustro único docente; con la aplicación de un convenio colectivo de trabajo; mayor representación estudiantil, voz y voto para los no-docentes, junta de carrera para Terapia Ocupacional y Musicoterapia. En tiempos de virtualidad necesitamos tener la conexión garantizada, acceso a dispositivos, becas integrales, y un IFE de 40 mil pesos para todo quien necesite. Por esto necesitamos organizarnos docentes, estudiantes y no docentes para conquistar una verdadera democratización, de manera independiente de las autoridades y sectores políticos, peronistas, radicales, kirchneristas y del PRO, que sostienen hace décadas este modelo antidemocrático.

¡Que nadie se quede afuera!