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Red Internacional
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Impunidad. Delitos de Lesa Humanidad en Mendoza: Ningún genocida suelto!

Alcides Paris Francisca, condenado a perpetua goza de prisión domiciliaria en la ciudad de Rosario y fue visto en junio pasado en un acto en el Liceo Aeronáutico Militar en la ciudad de Funes, Santa Fe infringiendo su pena. Desde la Fiscalía Federal y organismos de Derechos humanos solicitaron tobillera electrónica y nuevos exámenes médicos para el genocida tres veces condenado por delitos de lesa humanidad.

Sábado 17 de septiembre de 2022 19:23

Desde la Oficina de Asistencia en causas por violaciones a los Derechos Humanos durante el Terrorismo de Estado en Mendoza, el auxiliar de fiscal Daniel Rodríguez Infante, solicitó al Tribunal Oral Federal N° 1 la tobillera electrónica y la realización de nuevos exámenes médicos para el genocida.
Paris Francisca fue tres veces condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad ocurridos entre los años 1976 a 1979 en los que fue Jefe de la Policía de Mendoza a cargo, entre otros, del Departamento de Comunicaciones D2.

Había sido condenado en el tercer Juicio por delitos de Lesa Humanidad en Mendoza, en el cuarto más conocido como la Megacausa en el que también se condenó por primera vez a 4 jueces y el sexto juicio, en todos ellos obtuvo la pena máxima y en todos ellos se negó a declarar.

El silencio y la impunidad

El 23 de junio, la Oficina Fiscal de Mendoza fue alertada de la denuncia recibida por la presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos en la que una docente del Liceo Aeronáutico Militar de Funes (Santa Fe) daba testimonio de que el pasado 10 de junio el sucesor de Santuccione participó del acto de cambio de uniformes y en el que fue homenajeado por haber sido el primer director de esa institución en 1980, dicho acto se llevó a cabo en presencia de funcionarios y autoridades castrenses de esa ciudad.
Según lo publicado por el portal de noticias del Ministerio Público Fiscal “la docente denunciante detalló que, en esa oportunidad, el director del instituto, comodoro Jorge Barros, agradeció la presencia del subjefe del estado mayor de la Fuerza Aérea, comodoro Hugo Schaub, y de otros funcionarios de la fuerza, representantes de la localidad de Funes y de un diputado nacional egresado del Instituto. Luego, destacó la presencia de Paris Francisca, a quien se le realizó una distinción por haber sido el primer director del Liceo.”
La gravedad de este hecho muestra que la pelea por cárcel común y efectiva para todos los genocidas es de vital importancia. Desde los organismos de derechos humanos y las organizaciones que peleamos por verdad y justicia siempre se advirtió sobre los beneficios de la domiciliaria para los genocidas que, como ya hemos visto, se mueven incluso bajo la mirada de funcionarios.

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El silencio y la negativa de Paris Francisca a declarar en los juicios por los delitos por los que se lo condenó en Mendoza, como de tantos otros acusados, claramente fueron una muestra impunidad. Como dijo una familiar de uno de los detenidos desaparecidos el día de la sentencia “Saben y callan (…), así perpetúan sus delitos”.
Alcides París Francisca es condenado a prisión perpetua por la desaparición de la docente Olga Inés Roncelli, secuestrada en 1977 y detenida también en el D2. Además se consideraron las causas por las detenciones de Roberto Marmolejo, Alfredo Ghilardi, Carlos Mauri, Mirta Hernández, Adriana Espínola, Segundo Alliendes y Fredi Ramírez Longo.

Memoria, verdad y justicia

Que una docente haya denunciado y puesto el alerta sobre la transgresión de la domiciliaria realizada por ese genocida implica que la pelea por más de 40 años de Memoria, Verdad y justicia está más viva que nunca. Pero también que el aparato represivo de ayer sigue teniendo vigencia hoy, las fuerzas represivas aún cuentan con cientos de agentes que cumplieron funciones durante la dictadura.

A pocos días de cumplirse 16 años de la desaparición del compañero Jorge Julio López, seguimos denunciando que el aparato represivo de la dictadura tiene sus raíces vivas aun hoy.

Seguimos exigiendo Juicio y Castigo, cárcel común, perpetua y efectiva para todos los genocidas.