Diego Santilli, vicejefe de Gobierno y jefe de campaña del PRO en la Ciudad de Buenos Aires, reconoció que el oficialismo irá con Elisa Carrió a la cabeza en la Capital Federal, pero no podrá utilizar el sello de Cambiemos.
Sábado 20 de mayo de 2017 13:11
Diego Santilli, vicejefe de Gobierno y jefe de campaña del PRO en la Ciudad de Buenos Aires, reconoció que la alianza gobernante en la Capital Federal irá con Elisa Carrió a la cabeza y no podrá utilizar el sello de Cambiemos por el rechazo del radicalismo, cuyo comité local sostiene la candidatura del exembajador en los Estados Unidos, Martín Lousteau, quien reclamó que las precandidaturas se diriman en las PASO .
El vicejefe de Gobierno se ilusiona con alcanzar la mayoría absoluta de 33 diputados en la legislatura porteña, por eso dijo que "más adelante, después de la elección, se verá de construir un frente único con el radicalismo porteño”.
"Usaremos un nombre que nos identifique al PRO, la Coalición (Cívica), el PDP (Partido Demócrata Progresista), Unión por la Libertad (de la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich), Fe (del Momo Venegas), todos los partidos que nos vienen acompañando. Lo importante es lo que se va a discutir este año, que es la consolidación del cambio", admitió Santilli, quien afirmó que en la Ciudad de Buenos Aires no se logró conformar Cambiemos.
Santilli aseguró que en la Ciudad los radicales siempre se quisieron diferenciar y que la estrategia electoral del PRO será un trabajo conjunto con Nación, Ciudad y Provincia.
También hizo referencia a que, cuando el ahora detenido José Potocar fue nombrado jefe de la Policía de la Ciudad, "no había ninguna sospecha contra él". A pesar de que su designación fue presentada como parte de una política integral de seguridad en la Ciudad, el ahora renunciado exjefe de la Policía local está acusado de ser el líder de una asociación ilícita que exigía dinero a comerciantes de Núñez y Saavedra a cambio de protección.
Su relación con el peronismo
Luego de expresar que su ADN "es peronista, pero mi familia es el PRO", Santilli sostuvo que el peronismo tiene por delante el mismo desafío que enfrentó el PRO en 2003, después de perder la segunda vuelta en la Ciudad: evolucionar.
Diego Santilli arrancó a militar de muy joven en la Juventud Peronista a principios de los noventa. Por esos años Miguel Ángel Toma era una de las cabezas del partido en la Ciudad, y el actual ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires Cristian Ritondo era el líder de los jóvenes. Santilli recién se iniciaba en la política y jugaba en este espacio de la mano de su amigo Cristian.
Años más tarde, Santilli fue director general de Migraciones y director del Banco Ciudad, mientras Ritondo fue viceministro del Interior en el Gobierno de Eduardo Duhalde. Para 2003 el Colorado, como le dicen, entró como legislador porteño.
Cuando en 2007 Mauricio Macri ganó las elecciones Santilli quedó al frente de la Legislatura porteña, donde fue “evolucionando”.
Con la memoria atenta y el recuerdo de las privatizaciones, devaluaciones,
persecuciones a las organizaciones gremiales y políticas y un ejercicio a pleno de la escuela neoliberal, queda claro cómo los aires de un “cambio” se sostienen en la actualidad con iguales lazos de familiaridad entre pejotistas y macristas.