Congreso. Diputados: hay dos sesiones este jueves entre maniobras y los reclamos desde abajo

La Cámara de Diputados pisó el acelerador de la rosca en las ultimas semanas para reactivar la actividad que venía paralizada por las disputas entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio producto de la nueva relación de fuerzas más paritaria tras las elecciones legislativas del 2021. Las negociaciones entre las dos coaliciones avanzaron y este martes se oficializaron las convocatorias a dos sesiones especiales para el jueves 5 de mayo.

Una, a las 11 de la mañana que tratará tres proyectos que obtuvieron dictamen de comisiones este martes: la ley integral de VIH, hepatitis virales, otras infecciones de transmisión sexual y tuberculosis, la creación de un marco regulatorio para el Desarrollo de la Industria del Cannabis Medicinal y el Cáñamo Industrial, y la prórroga de incentivos a la Construcción. En esta sesión se deja afuera la modificación del plazo de las asignaciones específicas para los Fondos de Fomento de la Cultura por 50 años, a pesar de que ya obtuvo dictamen de mayoría (también este martes). El oficialismo cedió a Juntos por el Cambio en este punto. Como la oposición se opone a la prórroga que reclaman las y los trabajadores de la cultura, negociaron dejarlo afuera.

La otra, es la sesión que impulsa Juntos por el Cambio, el Interbloque Federal y los liberales para tratar la Boleta Única de Papel. Está convocada formalmente a las 12 del mismo jueves 5 de mayo. Una hora después de la otra sesión especial con los temas consensuados entre las dos coaliciones. Una maniobra del oficialismo para boicotear el debate de la Boleta Ùnica de Papel. Pero que encierra el peligro de que Juntos por el Cambio y los demás impulsores del debate electoral, decidan no dar quórum a la primera sesión. De hecho Mario Negri, diputado Juntos por el Cambio y presidente del bloque de la UCR, ya anunció en sus redes sociales que “JxC no les dará quórum!”. El miércoles al medio día habrá reunión de los jefes de bloque de la opòsición.

La bancada del Frente de Izquierda ha salido al cruce de ambas coaliciones, que se ponen de acuerdo para someter al país al FMI, para después dedicarse a un show mediático que pone como prioridad sus propias disputas e internas, en vez de abordar los reclamos urgentes de las mayorías y sectores populares.

Es que por estas disputas y maniobras de palacio entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio pueden dejar una vez más en el limbo la Ley Integral de VIH, hepatitis virales, otras infecciones de transmisión sexual y tuberculosis, que ya se presentó cuatro veces y de la que depende la salud y el acceso al trabajo de miles de personas afectadas. Esta ley, además, es impulsada por más de 40 organizaciones que vienen peleando hace años para que se vote. Las prioridades de las dos coaliciones también quedaron expuestas en la decisión de dejar afuera de la sesión la prórroga de las asignaciones específicas para los Fondos de Fomento de la Cultura por 50 años, que obtuvo este martes dictamen de mayoría. Un reclamo de las y los trabajadores de la cultura que vienen peleando bajo el lema “Evitemos el apagón cultural”, y lograron la renuncia de Puenzo al frente del INCAA hace unos días tras la represión del gobierno de la Ciudad. De no tratarse esta prórroga, ponen en riesgo desde el próximo año el financiamiento de la cultura, el cine, organismos como el INCAA, bibliotecas populares, radios comunitarias. Y los más de 700.000 puestos de trabajo que involucra el desarrollo de estas actividades culturales.

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Otro de los debates que se puso en pausa es la Ley de Alquileres. El lobby inmobiliario quiere modificarla para perjudicar aún más a las y los inquilinos. Luego de varios días de exposiciones en la comisión de Legislación General hay incertidumbre sobre su deriva. El calendario había fijado que la semana pasada, el 27 de abril, debía salir un dictamen. Pero la titular de la comisión, Cecilia Moreau del Frente de Todos, confirmó este martes que recién intentarán sacar un dictamen la semana próxima: el 11 de mayo se retoma el debate en comisión de diputados. Hay 23 proyectos presentados para modificarla. Aunque con matices entre Juntos por el Cambio y el Frente de Todos, sus negociaciones se inclinan a hacer cambios que serían regresivos para inquilinos e inquilinas.

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Parte de esta rosca parlamentaria incluyó el acuerdo de levantar el pedido de sesión especial para tratar los créditos UVA, impulsada por Julio Cobos de Juntos por el Cambio, para este mismo jueves. En este caso, el oficialismo logró desactivarla a cambio de que se lleve el debate a las comisiones de Finanzas y Presupuesto y Hacienda, con el compromiso de sacar dictamen en un plazo de 30 días. El acuerdo tiene la firma de Sergio Massa y Germán Martínez por el oficialismo, y de Julio Cobos y Mario Negri por la oposición. La organización de "Hipotecados UVA" que viene peleando contra la inviabilidad de los créditos, convoca a una movilización este jueves a las 15 hs frente al Congreso. Piden por el tratamiento urgente de una Ley Nacional y la eliminación de la UVA.

FAMILIAS, Salimos a Defender Nuestros Hogares, es necesario el compromiso y participación de todos/ as✊ *el día jueves 5 de mayo movilizamos al Congreso de la Nación 15h, pedimos que se de Quórum para tratamiento de una Ley Nacional* sobre las Hipotecas UVA. @DiputadosAR pic.twitter.com/dLZ5T7nbey

— @HipotecadosUVA (@hipotecadosPBA) May 2, 2022

La encerrona en Diputados como expresión de otra crisis

La virtual parálisis en la que se encuentra la Cámara de Diputadas, que puede tener otro capítulo este jueves, expresa la crisis del régimen político y un “bicoalicionismo” de vetos mutuos entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Pero lo que ninguno puede ofrecer es una salida a los verdaderos problemas estructurales del país y las mayorías populares. Como dijo Myriam Bregman del Frente de Izquierda este martes en la comisión de Presupuesto para defender el reclamo del financiamiento para la cultura: “se que otros tienen otras prioridades y vienen rapidito cuando hay que votar para el FMI. Pero acá estamos quienes queremos defender los reclamos de las y los trabajadores”. Junto a Nicolás del Caño, Romina del Plá y Alejandro Vilca defienden esa agenda de las mayorías y de la organización desde abajo. Así lo expresan en las calles y en el Congreso. No solo rechazando el acuerdo con el FMI, sino apoyando cada uno de los reclamos desde abajo y del pueblo trabajador.

En la superficie, las disputas entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio terminan en un tironeo por quién impone la agenda parlamentaria y muestra más fuerza. Hasta el momento, Juntos le viene sacando ventaja al gobierno, marcándole la cancha en varios de los debates: desde el fracaso del presupuesto 2022, con la extorsión en la Ley de Alquileres amenazando con derogarla, con los créditos UVA, con la Boleta Ùnica. Maniobras que la oposición viene utilizando en tres sentidos. Uno, desviando el eje del ajuste más abierto que defienden de la mano de la deuda fraudulenta con el FMI. Otro, impulsando una agenda pro empresarial que les de más beneficios (y que encuentra bastante eco en el oficialismo). Y también, para negociar en mejores condiciones sus lugares en las comisiones de Diputados y hacer valer la nueva composición más paritaria. De hecho esta semana recién se conformarán apenas el 39% de las comisiones (18 de 46) y siguen en una rosca interminable por las que faltan.

Del lado del Frente de Todos, pagan los costos de ser los principales promotores de ordenar el país por el acuerdo con el FMI. Legitimando la estafa de la deuda de Macri, le abrieron la puerta a Juntos para desplegar más abiertamente su programa de ajuste. De un ajuste sobre el ajuste que hizo el gobierno de Alberto Fernández desde que asumió. Contra todas las promesas de la campaña presidencial, el malestar social está latente y ya se demostró la desilusión de amplios sectores en las últimas elecciones legislativas. Las internas a flor de piel en la coalición de gobierno, se aceleraron luego de esa derrota. Otra muestra de que los intereses y las prioridades están en las elecciones, con miras al 2023.

Las maniobras, disputas y rosca en Diputados muestra una crisis más de fondo. Un país con más de 17 millones de personas en la pobreza, de aumento de la precarización e informalidad laboral, de trabajadores formales que se vuelven pobres, crecimiento de la desigualdad, una inflación incontrolable que castiga los bolsillos populares. Pero los “modelos” de las dos coaliciones mayoritarias no tienen ninguna salida para ofrecer a las mayorías. Entre ajustes más abiertos o dibujados, entre todo el poder al mercado o “regulando” para que igualmente se beneficie el mercado, y consensuando el virreinato del FMI, no puede haber nada favorable al pueblo trabajador. Estos caminos conducen a un si no hay pan, que haya circo.

Si el malestar social latente pasa a la acción, las mayorías trabajadoras y populares podrán abrir paso a una salida por y para sus intereses.