A días de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), desde el dossier de Ideas y Universidad hablamos con algunos de los jóvenes que integran las listas unitarias del Frente de Izquierda - Unidad en todo el país para que nos cuenten cuáles son los desafíos que tiene por delante la izquierda.
Viernes 3 de septiembre de 2021 00:37
Guadalupe Oliverio, es estudiante de Antropología en la Universidad de Buenos Aires, tiene 24 años y es candidata a Legisladora por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Sobre la campaña que se viene llevando adelante, cuenta: “Estamos dando una gran pelea por transformar la decepción y la bronca con los partidos tradicionales en organización. El gobierno de Alberto y Cristina hizo decenas de promesas que sembraron esperanzas en muchos jóvenes sobre el desastre que había hecho Macri, pero no cumplió ni una sola. Hoy la derecha quiere capitalizar este descontento, pero nosotrxs queremos mostrar otra salida ante la crisis: que la juventud no está destinada a un futuro de miseria”. No hace falta ser experto en economía para ver las consecuencias de esa crisis de la que nos habla, porque lxs jóvenes la vivimos en carne propia, cómo desarrollamos en esta nota del dossier Ideas y Universidad #25.
Con distintos nombres según la provincia, tanto oficialistas y opositores tratan de tapar el Sol con las manos para que no veamos esa realidad que afecta a millones a lo largo y ancho del país. Lo quieren hacer con promesas de campaña y slogans electorales vacíos como “la vida que queremos” del Frente de Todos o los que aprobaron con think tanks la lista de Juntos por el cambio, como el de Maria Eugenia Vidal que nos dice que “es lado a lado”. Detrás de esas frases no hay grieta entre los grandes partidos cuando se trata de mantener la precarización laboral; promover el extractivismo y la destrucción del ambiente. Los que no resisten ni un archivo son aquellos que hablan de libertad y de ideas nuevas, como los liberales, pero son en realidad unviejo refrito neoliberal y conservador. En las últimas semanas desfilaron por todos los medios los candidatos jóvenes de esos partidos que se pelean en los debates, pero en el Congreso se unen para votar los acuerdos con el FMI, que hunden el país en la pobreza. Intentan canalizar ese “voto joven” del que tanto se habló y tratan de que por esa vía, lo único que nos quede es la resignación a aceptar ese futuro que nos quieren imponer.
En la vereda opuesta encontramos a las listas unitarias del Frente de Izquierda Unidad, que junto a Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Alejandrina Barry, Raul Godoy, Octavio Crivaro, Laura Vilches, Ale Vilca, Noelia Barbeito y muchos otrxs, son muchísimos pibes y pibas parte del movimiento ambiental, de mujeres y diversidad, de los derechos humanos. Algunxs encontrarán hasta a su propios compañerxs de trabajo y estudio, o a quienes podés cruzarte día a día en las calles. Hace unos días, en una recorrida por la provincia de Buenos Aires, Nicolás del Caño le decía a lxs jóvenes que lo estaban escuchando: "la juventud tiene que tomar la política en sus manos, porque sino la van a seguir haciendo por ustedes los mismos de siempre". Conocé a lxs candidatxs de la Juventud del PTS en el FITu:
Nicole Salvatierra tiene 25 años y es parte de la lista que encabeza Alejandrina Barry en CABA. Ella es una luchadora por la vivienda y el trabajo digno. Habla a partir de vivir en carne propia los ataques del gobierno peronista, enfrentando a las topadoras de Sergio Berni y Axel Kicillof en la toma de Guernica. Su candidatura es expresión de miles de jóvenes. Ella relata que “somos las mujeres las que estamos al frente y que no nos resignamos y decimos que no queremos esta vida para nuestrxs hijxs. Nosotras también podemos hacer política y transformar la realidad de miles de personas que están pasando por la misma situación que yo, que soy parte de un sector que viene muy golpeado, atacado, ajustado, hace muchísimo tiempo. La juventud entre 20-30 años que estamos desocupados, precarios, somos mamás, se nos dificulta estudiar, tener trabajo estable. Somos ese sector descartable para todos los gobiernos”.
Si de criminalizar la pobreza se trata, tampoco hay grieta. Nicole nos cuenta sobre esto: “en CABA, la agenda represiva se instaló en medio de la campaña. Santoro salió en los medios diciendo que está a favor de las taser, algo que Bullrich viene planteando hace tiempo. Acá se pelean mucho por los medios pero la realidad es que Juntos por el Cambio gobierna gracias a los votos del Frente de Todos. Tenemos un desafío muy grande que es darle fuerza a las voces de izquierda que peleamos contra la represión y la impunidad de la policía.”
Trabajar y estudiar es la realidad de muchísimos estudiantes como Sofia Martinez Naya, que tiene 23 años, es estudiante de Psicología de la UNLP y es precandidata de la Provincia de Buenos Aires. Nos cuenta que: “Para poder sostener mis estudios tuve que empezar a trabajar, al principio de niñera. En un momento me toco laburar, obviamente en negro, informal, completamente precarizada, como la realidad de la mayoría de las pibas, en el country donde viven actualmente Tolosa Paz, la candidata del Frente de Todos y Julio Garro que es el intentente de Juntos, en La Plata”, nos dice la precandidata y sigue: “Esa es la realidad de las pibas, de los pibes, de la juventud, que somos quienes integramos estas listas. Nuestras vidas no tienen nada que ver con la realidad de esos políticos que tienen que hacer un esfuerzo enorme para hablarle a la juventud porque no saben cómo vivimos”.
Hoy en día cambió de trabajo, pero su situación es la misma que la de muchas jóvenes: “trabajo como acompañante terapéutica, obviamente precarizada. Somos el último orejón del tarro en lo que hace a la salud, sobre todo la salud mental. Es un laburo que está completamente feminizado: somos muchísimas pibas jóvenes o mujeres sostenes de hogar las que trabajamos de esto, de manera informal, somos monotributistas. Una forma de precarización que el macrismo se encargó de agrandar en la juventud y que el gobierno actual mantiene”.
Esta realidad se repite en todo el país. Son cientos los y las jóvenes que se enfrentan a laburos precarios. Keila Zequeiros, que viene de ser candidata en las elecciones provinciales de Jujuy, nos comentaba que en su provincia “diez familias concentran toda la riqueza y vive uno de los empresarios más ricos de todo el país: Blaquier, el dueño del Ingenio Ledesma. Mientras, 9 de cada 10 pibxs laburamos en negro, sin derechos, por dos mangos.” En esa provincia el Frente de Izquierda se enfrenta al régimen antidemocrático de Gerardo Morales, que intenta nuevamente criminalizar a la oposición política con campañas macartistas en contra de la izquierda.
Si nos trasladamos a la provincia de Santa Fe, vamos a encontrar a Cuyen Perreta, una joven precarizada de 23 años que integra las listas del Frente de Izquierda en Rosario, encabezada por Octavio Crivaro. Fue una de lxs jóvenes protagonistas de poner en pie a La Red de Jóvenes precarizados en el 2020, que aglutinó a centenares de pibes repartidores, telemarketers, trabajadores de comercio y otros empleos precarios. La situación en la que las políticas del gobierno dejaron a este inmenso sector de la juventud fue lo que los impulsó a esta importante tarea de organización. Cuyen afirma que “mientras muchos de nosotros nos quedábamos sin laburo, o con laburos que nos exponían al virus sin ningún tipo de protección, el gobierno miraba para otro lado. Quitaron la IFE a mitad de la pandemia y nunca llegó a cubrir nuestras necesidades. Nos decían que era porque no había plata, pero mientras, negociaban el pago de la deuda con los acreedores y lo presentaban como un acto heróico. Pero nosotrxs no nos creímos ese verso”.
Muchos empresarios, que hicieron lo que quisieron durante la pandemia, quieren normalizar las formas de trabajo que se impusieron durante la cuarentena, que en la mayoría de los casos profundizan la precarización. Cuyen nos cuenta que “Desde el Frente de Izquierda hace tiempo sostenemos que es fundamental construir una fuerza histórica de trabajadores y jóvenes que pelee por trabajar 6 horas 5 días a la semana y con un salario igual a la canasta familiar. Es necesario repartir las horas de trabajo entre ocupados y desocupados. Es irracional que mientras haya algunos que nos rompemos el cuerpo trabajando 12 horas, otros no consigan trabajo. La plata para garantizar esto está, pero se la quedan los empresarios mientras los que generamos la riqueza nos llevamos migajas. La derecha y los empresarios nos dicen que somos utópicos, pero ¿Mira si se quedaban en el molde los que tuvieron que escuchar que trabajar 8 horas era imposible, 100 años atrás? Hay que pelear por conquistar esto, pero a eso nos referimos cuando decimos que el futuro que soñamos es el futuro por el que peleamos.”
No hay planeta B, contra la falsa grieta de los partidos tradicionales
Es sábado por la tarde y miles de jóvenes nos encontramos en el Parque Centenario en CABA, para ser parte del acto de la juventud del PTS. Desde una de las tarimas la escuchamos a Guadalupe: “que orgullo ver que somos una generación que irrumpió hace dos años en las calles de todo el país en defensa del ambiente, que nos metimos de lleno en el debate público para plantear que estamos contra la destrucción del ambiente y del capitalismo.” y agrega: “A la juventud nos preocupan un montón de cosas: venimos de estar en las calles contra el cambio climático, con el feminismo. Ahora estamos viviendo una crisis económica muy importante y yo veo ahí la fuerza para cambiar las cosas que nos pasan."
Esteban Martine es estudiante de la UNCo y candidato a concejal de Neuquén. Además es miembro del comité de redacción de este Dossier, en el cual ha escrito sobre diversos temas de ecología, que invitamos a su lectura. Es parte de la juventud que enfrenta el saqueo que llevan adelante las grandes empresas multinacionales con la complicidad de todos los gobiernos. Nos cuenta que el 28 de Agosto se cumplieron 8 años del pacto con Chevron y que “todo lo que en ese momento eran advertencias en relación a los efectos ambientales del fracking, se está confirmando. En los últimos años se registraron más de 300 sismos. Nadie puede negar que son producto del fracking, y cada vez más voces del ámbito científico lo confirman.”
“Esto no se discute porque no existe grieta entre el macrismo, el peronismo o el Movimiento Popular Neuquino. Ahora el gobiernoestá por enviar un proyecto de leyal Congreso para beneficiar aún más a las petroleras, que ya reciben miles de millones de pesos por año en subsidios. Dicen que es para generar divisas, es decir para juntar dólares y pagar la deuda externa. No se puede pagar la deuda sin contaminar, diría Cabandié, el ministro de ambiente…”
Desde la izquierda el planteo es totalmente opuesto: “hay que estatizar toda la industria hidrocarburífera, bajo control de trabajadores y trabajadoras, las comunidades afectadas, profesionales de universidades públicas y organizaciones ambientales. Pero no para seguir destruyendo todo con el fracking, sino para iniciar una transición energética urgente, hacia una matriz diversificada, desfosilizada, con energías de menor impacto ambiental.” sostiene Esteban.
Este año, en toda la provincia se levantaron los trabajadores de la salud y se unieron a otros sectores en lucha. Es desde ahí desde donde el referente local piensa que puede venir un cambio: “Quieren que nos resignemos a la miseria de lo posible, nos dicen que lo que proponemos es imposible, pero acá vimos que a las empresas se las puede enfrentar. La lucha de los trabajadores y trabajadoras de salud, los “elefantes”, paralizó el circuito de Vaca Muerta durante semanas, enfrentándose a multinacionales ultra poderosas, y poniendo en jaque al gobierno provincial. Lo hicieron junto a distintas comunidades del pueblo nación mapuche. Hay que apostar a esa unidad, entre trabajadores, las comunidades, la juventud, porque no hay enemigos invencibles. Si queremos un futuro vivible y no la porquería que nos está dejando el capitalismo, tenemos que organizarnos y pelearla. En última instancia esperamos que la campaña nos sirva para eso.”
En Mendoza también hubo una enorme lucha contra las grandes multinacionales mineras que poseen el aval de todas las fuerzas políticas y gobiernos. Caro Alvarez, de 20 años, precandidata a diputada provincial, nos cuenta que “estas elecciones tienen la particularidad de ser las primeras luego de la gran pueblada de 2019; fueron manifestaciones multitudinarias de incluso 30.000 personas frente a la casa de gobierno con cortes de ruta paralelos en cada departamento en los que la gente cantaba “Se sabía, se sabía, que a Suárez y a Sagasti los compró la minería”. Este cántico expresa una bronca generalizada con los partidos tradicionales. Por eso ante las elecciones buscan todo tipo de trampas para aparecer como amigos. Un ejemplo de ello es el Partido Verde, que lleva como principales figuras a Romano y Vadillo que votaron contra la megaminería, pero que en las listas llevan a Andrea Blandini, actual senadora del PJ que en el noviembre del año pasado votó a favor de subsidios para el Fracking. También a Emanuel Fugazzoto, kirchnerista que fue asesor de medioambiente de Anabel Fernández Sagasti. Por más que el peronismo se pinte de verde, extractivista queda.”
Sobre las batallas que tiene la juventud por delante, Caro nos dice que “desde el Frente de Izquierda Unidad peleamos en estas elecciones con la misma bronca que estamos en las calles denunciando que quieren destinar millones de litros de agua a la fractura hidráulica, destruir todos los bienes naturales al servicio del extractivismo y sus ganancias e introducirnos en una crisis de impacto ambiental y social como se vio demostrado en Neuquén. No nos resignamos a ese futuro de contaminación y miseria. Vamos a pelear hasta el final porque no tenemos nada que perder cuando lo que peligra es el agua y el futuro de millones.”
Contra la criminalización de la protesta y por la educación pública
Cande Guzmán es de Córdoba, tiene 26 años, es una de lxs 27 estudiantes procesadxs por defender la Educación Pública contra el ajuste presupuestario de Macri. Hoy es candidata del Frente de Izquierda. Le preguntamos sobre la lucha educativa del 2018 por el cual se encuentra procesada: “Ese año luchamos por presupuesto, por becas integrales, por raciones suficientes para el comedor universitario, por guarderías materno-parentales para estudiantes con niñxs a cargo. Todas estas demandas están más vigentes que nunca con la crisis económica y social actual, por eso decimos que la defensa de la educación pública es una pelea que tenemos que seguir dando y que todos los gobiernos nos mostraron que no es su prioridad. Esto es así en todo el país, no sólo en mi provincia.”
Nos comentaba que “me parece muy importante y necesario que la lucha que venimos dando por la absolución de lxs estudiantes tengan voz en estas elecciones, para que sigamos amplificando nuestra pelea para que nadie sea criminalizadx por luchar. Se trata de un precedente nefasto que quiere sentar la Justicia, y contra el cual peleamos, porque el derecho a la protesta, el "derecho sagrado a la insurrección" como dijeron lxs reformistas del 18, es un derecho del movimiento estudiantil y de todo el pueblo trabajador”;
En Córdoba, la lucha por la absolución de los estudiantes procesadxs tuvo mucha repercusión: se pusieron en pie asambleas en muchas facultades, y esta causa cuenta con el apoyo de reconocidas organizaciones de derechos humanos, sindicales, sociales y políticas. Sobre este proceso de organización, Cande cuenta que convocaron a “importantes movilizaciones organizadas en común con docentes, artistas, medios de comunicación independientes, con trabajadoras y trabajadores en lucha que abrazan nuestra causa. Tenemos grandes enemigos: la Justicia y los poderosos. Y estos enemigos no se equivocan en tener miedo de que lxs estudiantes en esta crisis nos organicemos en común con el pueblo trabajador. Esa es la tradición que queremos retomar: la de la unidad obrero-estudiantil!”
Ahora en las universidades de todo el país se está discutiendo sobre la vuelta a la presencialidad. Para que no siga habiendo deserción masiva, es importante que se garanticen derechos estudiantiles que nos fueron quitando: los albergues y los comedores, las becas progresar y muchisimas otras cosas que son esenciales para garantizar que la vuelta a la presencialidad no deje a muchos afuera.
Tomemos el cielo por asalto
Guadalupe, como miles de otras jóvenes en el país, sostiene que “el capitalismo ya mostró que no tiene nada para ofrecernos, y desde la pandemia a esta parte, quedó sobre la mesa que ni siquiera puede dejar de destruir el planeta. Tenemos que pelear por otra sociedad, una sociedad socialista. Los avances de la técnica permiten pensar que eso es posible, pero para eso la tecnología no debería estar al servicio de la ganancia capitalista. Hace poco fue noticia que Jeff Bezos fue al espacio, pero lo hizo a costa de hacer bolsa nuestro planeta y encima precarizar a los laburantes de Amazon. Por eso decimos que las necesidades sociales y de acabar con la desigualdad que este sistema expande por todo el globo.“
Sofía comparte esta idea y nos plantea que “tenemos que empezar a darnos cuenta que tenemos una fuerza enorme, somos la generación que en Argentina puso en pie la marea verde, la misma generación que en todo el mundo se levantó, contra la destrucción del ambiente, contra el ajuste de los gobiernos como en Chile y en Colombia contra un régimen completamente militarizado. Esa es la fuerza que tenemos y que hay que unir a la fuerza que tienen los laburantes, retomando los mejores ejemplos que nos dio la historia. Y esa es la pelea que queremos dar desde el Frente de Izquierda con nuestras candidaturas; queremos dejar en claro que no nos vamos a resignar ni bajar la cabeza, y el futuro que podamos tener depende exclusivamente de nosotros y de cuanto demos pelea. Tenemos la fuerza para plantarnos y pelear contra el ajuste, y poner en pie una fuerza social que pueda tirar abajo este sistema.”
Lucio Prieto
Es miembro del Comité Editorial de Armas de la Crítica. Estudia Psicología y Lic. en Historia en la Universidad Nacional de Rosario. Milita en la Juventud del Partido de los Trabajadores Socialistas.