Crisis política en Bolivia. El golpista Mesa se distancia de Áñez

A pocos días de acabar con la cuarentena nacional y pasar a la fase denominada “cuarentena dinámica”, se desató una serie de duras críticas contra la administración de Áñez.

Entre estás críticas destacó la del candidato por Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, quién hace un par de días en una entrevista realizada por el canal RTP criticó la falta de información necesaria para pasar a la fase de “cuarentena dinámica”. En la misma línea enfatizó sobre la falta de información de la curva de contagio en el país, del número de camas de terapia intensiva y la falta de implementación de laboratorios para realizar testeos en todas las ciudades capitales del país. Mesa expresó:

“la Información es insuficiente, nos hablan de cuarentena dinámica pero no nos han dicho como está Bolivia (…) no nos han dicho en qué grado esta Bolivia (…) ¿cómo está la curva de contagios (…)¿cuándo va a llegar el punto más crítico de la curva de contagio?, eso no lo sabemos y el gobierno no nos ha dicho”

Así también, habló sobre sus nuevas propuestas electorales, entre las que se encuentran la aplicación de un Gobierno digital y mayor presupuesto de salud equivalente al 10% del PIB, entre otras medidas como:

• Suspensión de la deuda externa con suspensión de intereses y capital.
• Creación de un nuevo pacto fiscal, aunque no termina de explicar en qué consistiría.
• Creación de una reforma tributaria radical que apunte a la reducción de pago del IVA e impuestos directos.
• Creación de una renta única nacional que elimine las diferencias de rentas de jubilaciones.
• Y planteó su llamado a un Diálogo Nacional para discutir medidas políticas que todos los candidatos deberían comprometerse a cumplir en vistas de la crisis económica que se avecina.

¿Propuestas progresivas o demagogia electoral?

Si bien en principio estas medidas hasta son “progresivas” no podemos deslindar las responsabilidades del interlocutor. Estás declaraciones se dan en medio de un contexto electoral y de la situación más represiva en el marco del Golpe de Estado consumado en noviembre del pasado año.

No olvidemos que Mesa fue uno de los actores políticos más importantes en el golpe, de la mano con Camacho, la CONADE, agroindustriales y hasta organizaciones como las racistas “resistencias juveniles”.

Mesa en todo este tiempo dejó en claro que en Senkata y Sacaba no hubo masacres y desconoció las muertes en Ovejuyo. Tampoco se pronunció por los detenidos políticos del 11 de noviembre, los cuales denunciaron haber sufrido tortura física y mental. ¡Mesa es cómplice!

Después de desastrosas entrevistas ante medios internacionales ha estado sin mucha exposición pública. Sin embargo hoy, en medio de una semana que inició con la noticia de corrupción en YPFB y el uso indebido de bienes del Estado por parte de allegados a Áñez, que aumentan el descontento general contra su Gobierno, Mesa aparece y junto a su equipo realiza una jugada electoralista ante esta situación.

Sus aliados como la ex diputada Jimena Costa en una entrevista con Jhon Arandia salió recientemente a decir que “el gobierno de Áñez es ilegítimo desde enero”. Así también, hace un par de días se publicó en el programa golpista radial “Cabildeo” un artículo con duras críticas al Gobierno que van desde el colapso del sistema de salud en Santa Cruz hasta críticas de la policía ante las declaraciones del ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

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Mientras hoy Mesa quiere presentarse como el candidato neutro y moderado del espectro golpista no debemos olvidar su rol y responsabilidad política durante el Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada. En ese entonces Mesa era vicepresidente y fue cómplice de las más de 70 muertes durante la Guerra del Gas el 2003. En la misma línea, hoy Mesa es cómplice de los asesinatos en las masacres de Sacaba, Senkata y Ovejuyo.

Luego Mesa se vio obligado a renunciar a la presidencia el año 2005 en medio de los levantamientos de mayo y junio de ese año para preservar los intereses de los empresarios y terratenientes. Es por ello que sabemos que hoy su discurso está plagado de promesas huecas en vistas a las elecciones buscando recuperar más electorado en la denominada “clase media” que se encuentra en evidente desacuerdo con la administración de la crisis socio-sanitaria por parte de Áñez y su gabinete; a quiénes Mesa defendió en un inicio.

La salida a esta crisis no puede ir en el marco del Estado capitalista ni de sus representantes; de quienes no podemos esperar nada más que la defensa de los intereses de empresarios, banqueros y terratenientes.

Pese a su discurso “crítico”, Mesa avala la inversión de ahorros de las y los trabajadores a la banca así como la reciente inversión de presupuesto al ministerio de Defensa, que es uno de los muchos incrementos presupuestarios para reprimir a las y los trabajadores y el pueblo pobre.

Por todo esto es necesario que las y los trabajadores nos organicemos y luchemos para que desde la bases recuperemos el control de los sindicatos en contra de las burocracias como la de la COB, que acabaron pasándose de las manos del MAS rápidamente al lado del Golpe de Estado.

Creemos que solo a la cabeza de los trabajadores y las trabajadoras podemos hacer que la crisis económica la paguen los capitalistas y no el pueblo pobre. Es a la cabeza de los trabajadores que se debe exigir el real y efectivo NO PAGO A LA DEUDA EXTERNA E IMPUESTOS PROGRESIVOS A LAS GRANDES EMPRESAS y no solamente la "suspensión del pago" como profesa Mesa. La salida está en nuestras manos porque ¡nuestras vidas valen más que sus ganancias!.