Jueves 27 de septiembre de 2018
Conscientes de las crecientes dificultades del macronismo, de las que he dado cuenta en mi último artículo El fin abrupto del espejismo macronista, el más importante periódico del mundo financiero sale rápidamente en su apoyo. En una editorial titulada “El malestar francés y por qué las reformas de Macron importan” hace un fuerte llamado al orden al presidente francés, cuando afirma que: “La popularidad del presidente está disminuyendo, pero debe mantener sus planes económicos”.
No es la primera vez que el gurú periodístico de la City de Londres sale a señalar lo que se juega en Francia desde el punto de vista de los mandamases de las finanzas. Así, ni bien ganó la elección, en un artículo titulado Por qué Emmanuel Macron es importante para el mundo, su destacado columnista Gideon Rachman afirmaba que: “Mientras que Emmanuel Macron disfruta su victoria en la elección presidencial francesa, él pudiera considerar las palabras de John Maynard Keynes en una carta abierta escrita a Franklin Roosevelt en diciembre de 1933. El economista británico le escribió al presidente de EEUU: ’Usted se ha convertido en el guardián de aquellos que en cada país procuran reparar los males de nuestra condición por medio de experimentos racionales dentro del marco de referencia del sistema social existente. Si fracasa, el progreso racional se verá gravemente perjudicado en todo el mundo, dejando a la ortodoxia y a la revolución combatiendo entre sí’".
Más allá de las exageraciones del periodista británico quien compara al “pigmeo” Macron con uno de los principales dirigentes de la burguesía imperialista en el siglo XX como fue el caso de Roosevelt, las palabras de Keynes resuenan cuando después de más de un año de mandato, “la crisis del macronismo reabre en un nuevo nivel la crisis orgánica del capitalismo francés, esa ’separación de dirigentes y dirigidos’ (Gramsci) que él mismo parecía resolver momentáneamente y que ahora está entrando en un nuevo momento de escisión más peligroso para la burguesía”. No es extraño al temor del otro lado de la Mancha que un salto en el desgaste de Macron abra la posibilidad de una contraofensiva del movimiento de masas, tomando en cuenta el carácter inflamable del movimiento obrero y estudiantil en Francia.
Para los popes del Finacial Times lo que está en juego excede a Francia: “En un mundo atravesado por hombres fuertes no liberales, es un raro ejemplo de un liberal confiado que se enfrenta a la abrumadora tarea de la reforma. Sus perspectivas importan más allá de las fronteras francesas. Hay mucho peso sobre sus hombros”. Evidentemente, no compartimos en lo más mínimo la visión de este diario imperialista sobre Macron, cuya orbanización (en relación a Víctor Orban, el dirigente “no liberal” de Hungría rechazado por buena parte de los partidos políticos mainstream europeos) es avanzada. Pero lo que sí es cierto es que la “Batalla de Francia” tiene un impacto europeo y mundial. Un motivo más para que los trabajadores y estudiantes de Francia tomen conciencia de la preocupación de la burguesía mundial por la suerte del neoliberalismo tardío a la francesa y preparar la contraofensiva contra Macron y sus (contra) reformas, antes que sus fuerzas se desgasten y sea cualquier otra variante reaccionaria la que reemplace a este neoliberalismo senil macronista.
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Juan Chingo
Integrante del Comité de Redacción de Révolution Permanente (Francia) y de la Revista Estrategia Internacional. Autor de múltiples artículos y ensayos sobre problemas de economía internacional, geopolítica y luchas sociales desde la teoría marxista. Es coautor junto con Emmanuel Barot del ensayo La clase obrera en Francia: mitos y realidades. Por una cartografía objetiva y subjetiva de las fuerzas proletarias contemporáneas (2014) y autor del libro Gilets jaunes. Le soulèvement (Communard e.s, (...)