Del 2 al 6 de septiembre se desarrollaron las elecciones obligatorias dónde se eligieron consejerxs estudiantiles y a Centro de Estudiantes en las 13 facultades de la Universidad más grande del país. Cómo quedan los espacios políticos y las fuerzas militantes por lugar. La red de agrupaciones que impulsa la Juventud del PTS (asociada a Myriam Bregman y Nicolás del Caño) se convierte en la corriente predominante del espacio de la izquierda en la UBA, mientras el Partido Obrero sufre un importante retroceso.
Domingo 8 de septiembre 22:59
Lo primero que surge al ver el resultado de todas las facultades es que las listas asociadas directamente al gobierno nacional de Javier Milei hicieron una mala elección, con pocos votos. A esto hay que sumar que son agrupaciones sin fuerza militante, no son parte de la vida política y académica de las casas de estudio durante cada cuatrimestre.
Se trata de Somos Libres, vinculada al bullrichismo también. De hecho utilizan el color amarillo como referencia. Sacaron 6,8 % en la FADU, 6,2 % en Ciencias Económicas, 6,7 % en Medicina y 18 % en Ingeniería. No se presentaron en otras facultades. Décadas atrás, en los ochentas, con la UPAU el liberalismo ha llegado a tener cuatro centros de estudiantes compitiendo en fuerza estudiantil con la Franja Morada.
Por eso coexisten dos tendencias a grandes rasgos en esta elección, que es importante considerar para analizar el resultado en la dinámica de un país signado por los permanentes ataques de La Libertad Avanza al sistema educativo público.
Por un lado, la primacía de un voto a las fuerzas políticas que se vienen mostrando opositoras a Milei en lo que respecta al ajuste en la universidad. El vicerrector y dirigente porteño radical Emiliano Yacobitti, al mismo tiempo transó con el gobierno la aprobación de la Ley Bases, encabezó la convocatoria a la movilización masiva del 23A buscando quedar como el “defensor de la educación pública”.
Una hipocresía, ya que los diputados de ese mismo espacio no dieron quorum para tratar el presupuesto universitario al día siguiente de la movilización y además buscaron desarticular rápidamente a les estudiantes para que no surja un movimiento estudiantil organizado, dejando en banda a los docentes y no docentes que no tuvieron aumentos salariales.
Lo mismo las distintas alas del peronismo y kirchnerismo intentaron posar cómo defensores de la educación pública. Es un doble juego, por un lado mostrarse como defensores de la universidad pública, a la vez que sostienen al gobierno desde el Congreso, con los gobernadores y, en el caso del peronismo, se agrega que la CGT y las CTAs no mueven un pelo para derrotar los planes de ajuste.
Por otro lado, este año una vez más se dieron de forma simultánea la elección de Centro de Estudiantes y Consejo Directivo, también de Juntas de Carrera en los casos de Filosofía y Letras y Ciencias Sociales. Unificar ambas elecciones, cada dos años –antes se votaba a Centro anualmente– cuando no hay elecciones nacionales que generan politización masiva en todos los ámbitos sociales, soólo beneficia a los aparatos radicales, a sus socios peronistas y a las agrupaciones kirchneristas.
Solo la izquierda denunció esto cuando se votó en un Congreso Extraordinario de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA). Y eso ocurre porque priman debates respecto a la organización de las carreras y la administración de los espacios y servicios que “otorgan” los centros de estudiantes.
De esta forma, se terminaron imponiendo discusiones sobre cuestiones académicas administrativas, lo que impacta en la preeminencia de la valoración sobre qué tipo de servicio brinda tal o cual lista para la conducción de un Centro y cómo gestionar los mismos. Intentan borrar que los Centros son herramientas de debate y organización estudiantil.
Te puede interesar: La resignación no es una opción: refundemos el movimiento estudiantil contra la derecha
Te puede interesar: La resignación no es una opción: refundemos el movimiento estudiantil contra la derecha
Para graficar esas tendencias, se ve que la derrota del bloque radical y reformista en FADU en manos de El Módulo –La Cámpora–, se produjo no solamente por una pésima gestión sino también porque fue de las pocas facultades que no convocó a movilizar el 23 de abril, ni el Centro ni las autoridades.
Sumado a eso, en una especie de “manotazo de ahogado”, Somos FADU (Franja Morada/UCR) hizo campaña proponiendo la eliminación de la materia de Matemática del Ciclo Básico Común (CBC) de la carrera de Arquitectura lo cual terminó de inclinar la balanza hacia la otra lista.
Dentro de la hegemonía de La Cámpora en el armado que incluye a las agrupaciones La Corriente, La Mella-Patria Grande y Auge-SUR, es fundamental el enorme trabajo que hicieron para desligarse de sus representantes políticos, tanto de haber apoyado a Alberto Fernández como de su jefa CFK. Con solo ver sus redes sociales alcanza.
Esto es importante ya que la corriente de la ex vicepresidenta logró sortear la crisis que atraviesa hoy el peronismo y que no salpique en la contienda electoral. Al terminar el escrutinio desplegaron una bandera de Nestor y Cristina mostrando por primera vez en la semana qué corriente son en realidad. Lo mismo sucedió en Exactas y Sociales.
En Psicología votaron menos estudiantes que en 2022, El EDI, que es el nombre de la Franja Morada, bajó 7 puntos, que son los mismos que sube El Impulso (kirchnerismo); mientras que la Izquierda sube 1 punto encabezada por En Clave Roja, que garantizó la elección durante toda la semana con baja participación de las demás agrupaciones de la lista y conserva la secretaría de Género y Sexualidades del CEP.
En esa Facultad se desarrolló la asamblea más grande de toda la UBA durante el proceso de organización previo al 23A. En Medicina, el oficialismo morado baja más de 10 puntos, que se los lleva El Torrente (Cámpora) quedando con el 61,4 %.
En el caso de Exactas volvió a ganar La Cámpora con el 46,6 % de los votos. La novedad es que el segundo lugar lo ocupa la Franja Morada con el 18 % de los votos, desplazando a La Mella que bajó 10 puntos porcentuales.
En Filosofía y Letras retuvo la conducción El Colectivo (La Mella, La Cámpora y Movimiento Evita) sumando a la otra lista de Patria Grande, Aquelarre. Todo el peronismo fue junto sumando los votos de ambas listas que habían ido por separado en 2022.
Es la Facultad donde más claramente se ve el rol de las agrupaciones referenciadas en Juan Grabois, que ofician de lavada de cara “por izquierda” al rol pasivizador y cómplice del peronismo frente al gobierno de Milei, ya que es donde la izquierda tiene más peso en influencia política y fuerza militante. No tienen margen para hacer, como en las demás facultades, campañas más asociadas al modelo de la Franja.
La Izquierda al Frente Unidad mantuvo su espacio propio tanto en porcentaje como en votos absolutos en una campaña que se puso al hombro En Clave Roja y gracias al apoyo activo de decenas de estudiantes de la Facultad que debatieron en sus cursadas, en los pasillos, que fiscalizaron y sumaron su aporte por un Centro independiente.
Allí es donde más y mejor el peronismo combina perfiles progresistas por sus discursos de oposición a Milei tanto a nivel del Centro como de las autoridades, ambas alineadas a UxP –aunque estén lejos en los hechos de ser consecuentes en eso–.
Con respecto al Nuevo Mas - Ya Basta, que decidieron rechazar una vez más la unidad y priorizar su espacio jugando en los hechos a favor del régimen universitario, volvió a sacar el 9 % confirmando que la propuesta de En Clave Roja de integración de las listas en función de los espacios políticos era la más democrática y representativa según el peso de cada lista en la base estudiantil.
Durante la campaña pegaron un salto en su aparataje, lo que genera muchísimo rechazo en los estudiantes llegando al punto de denuncias por hostigamiento en busca de votos. En el resto de las Facultades donde se presentaron hicieron elecciones marginales, donde los superó o empató el voto en blanco.
Por su parte, Política Obrera (Altamira) también decidió ir en soledad. Las tres listas de la izquierda hubieran obtenido 181 votos más que la peronista.
Sin embargo, La Izquierda al Frente Unidad mantiene su puesto en el Centro con la Secretaría General, sus consejeros y consejeras estudiantiles en las juntas de carrera de Filosofía, Artes, Geografía e Historia, y avanza en conquistar representantes por la minoría en Antropología y Letras.
En Sociales se expresa una tendencia distinta que en Filosofía y Letras. El triunfo de La Lista 15 (La Mella, La Cámpora, y otros) que también está alineada a las autoridades de esa facultad, se da por el fuerte crecimiento abstención (mas de 1000 votos menos que la última elección) lo que provocó el acortamiento de la brecha que tenía con la UES, sobretodo en las carreras donde eran mas fuertes como Relaciones del Trabajo. Además la política del kirchnerismo progresista fue fundamentalmente de disputar en el terreno de la UES (el de la gestión de las carreras y los servicios), sin mencionar la palabra Milei.
Recordemos que quienes ahora perdieron la conducción del CECSo, son el peronismo aliado a la Franja Morada del Rectorado, que en esa facultad dirigen la carrera de Ciencia Política (con Alternativa Académia) y Relaciones del Trabajo. Vienen de bancar a Scioli en las últimas elecciones nacionales. Actualmente la facultad quedará encabezada por el mismo espacio político en el Centro y en las autoridades del Decanato y las carreras de Trabajo Social, Sociología y Comunicación, además de tener mayoría en los tres claustros del Consejo Directivo.
La Izquierda al Frente Unidad conserva su lugar en el Centro con la Secretaría de Unidad Obrero Estudiantil y en la Junta de Carrera de Sociología en los tres claustros, estudiantil, graduados y profesores.
En Derecho y Económicas, Nuevo Espacio y la Franja Morada hicieron grandes elecciones, 59,2 % y 71,2 % respectivamente. En esas facultades, la Izquierda hizo elecciones con desigualdades, especialmente donde no hubo ningún tipo de activismo ni proceso de organización democrática que se sostenga durante los meses del primer cuatrimestre de conflicto estudiantil, tampoco clases públicas.
En esos escenarios, las campañas de la lista de Izquierda fueron más a contracorriente dando por resultado el 3 % en Derecho y el 1,75 % en Económicas, donde la disputa recayó en soledad en el CEProDH-La Izquierda en Derecho y En Clave Roja, ante el abandono por parte de las demás agrupaciones del FITU de la elección en esas facultades. En Odontología el mismo espacio referenciado en la UCR sacó el 94,5 % y en Agronomía el 45,6 %.
Respecto al espacio de la izquierda en su conjunto, hay notorias diferencias según las peleas que da cada fuerza de las pertenecientes al FIT-U, especialmente por el retroceso de la UJS-PO. En Farmacia y Bioquímica, la Franja Morada y el peronismo de la JUP se unieron para desplazar al PO después de 15 años sacando el 72,7 % de los votos. Una alianza oportunista de las fuerzas patronales solamente para hacer frente a la izquierda.
Sin embargo, eso no quita los debates que tenemos hace años con los compañerxs de esa agrupación sobre qué modelo de Centro de Estudiantes es necesario que impulse la izquierda, si es uno adaptado a la gestión y los servicios o un Centro que promueva el debate, la participación y politización estudiantil.
En Veterinarias el PO conservó la conducción con el 37,8 % mientras la Franja Morada obtuvo el 36 %. Se trata de Centros que no vienen cumpliendo ningún rol como polo de referencia hacia las demás facultades para organizar a la vanguardia y confluir con los jubilados, trabajadores en lucha y asambleas barriales.
A eso se suma su rol en facultades como Medicina donde al ir separados producto de mezquindades políticas, la UJS-PO intentó impugnar la lista 4 de En Clave Roja-La Posta de Salud y Cuidado, lo que Nuevo Espacio-Franja Morada aprovechó para adulterar la boleta, es decir que se consolidó un fraude contra la lista 4 que siguió con robo y ataque a las boletas durante toda la semana como se puede leer aquí.
Sin embargo, el conjunto de la izquierda en Medicina hizo una elección del 4,6 % (2,07 % la lista El Frente del PO, MST e IS, 1,92 % En Clave Roja y 0,61 el NMAS).
En FADU, la Izquierda encabezada por Contraimagen (PTS) crece 200 votos más en comparación a la elección anterior, lo que representa el 3,3 %.
En Exactas la lista de En Clave Roja (ECR) sacó el 4,97 %, quedando tan solo a dos votos de alcanzar la otra lista que agrupó a Izquierda Socialista, el Partido Obrero y el MST, lo que igualmente le dio una Secretaría en el CECEN. En Consejo Directivo, ECR quedó por encima con 69 votos a favor.
En todas las facultades, la pelea por politizar las discusiones y pensar qué rol tienen que jugar lxs estudiantes frente a los ataques del gobierno de Milei fue encabezada por las agrupaciones estudiantiles de la Juventud del PTS referenciadas en Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Christian “Chipi” Castillo, Alejandro Vilca y el Frente de Izquierda, la única fuerza que no ocultó su identidad política e ideológica sino que la mostró a bandera desplegada en oposición al resto de las listas que responden a las autoridades y los partidos tradicionales.
El voto a las listas de la izquierda fue más consciente por defender la independencia política, y mostró un electorado joven, especialmente en el CBC y en los primeros años de las carreras, que tiene interés por conocer las ideas anticapitalistas y socialistas. Eso se reflejó también en una nueva camada de jóvenes sub 25 de las agrupaciones universitarias del PTS que se puso al frente de este desafío que deja como saldo el avance de una corriente militante que planta bandera contra la resignación y por el combate a la derecha reaccionaria que gobierna el país.
Las conducciones de los Centros de Estudiantes estarán hasta la última etapa del gobierno de Milei. Con ellos se hará una experiencia ante los ataques a la educación pública, la salud, la ciencia, la cultura y el trabajo. Está inscripto en la etapa el interrogante sobre cuál será el rol del movimiento estudiantil ante el gobierno ultra de derecha actual y qué vanguardia surgirá que se ponga al frente de la lucha por la educación pública en oposición a lo que mandatan desde arriba radicales y peronistas del rectorado y los decanatos de las facultades.
Ahí estará la Juventud del PTS para dar pelea en pos de organizar a los estudiantes. Mientras tanto, aún queda la mitad del segundo cuatrimestre para prepararse para pelear junto a los y las jubiladas, por el efectivo aumento presupuestario y salarial para lxs trabajadorxs de la educación superior y los múltiples debates por carrera en cada Facultad.
Estas son las agrupaciones que dieron estos debates y disputas políticas:
En Filosofía y Letras
En Sociales
En Psicología
En Medicina
En Derecho
En FADU
En Exactas
En Económicas