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Elecciones francesas. La candidatura de Anasse Kazib: una campaña fuera de lo común y revolucionaria

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Foto: O Phil des Contrastes.

Elecciones francesas. La candidatura de Anasse Kazib: una campaña fuera de lo común y revolucionaria

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[Desde Francia] Este artículo fue publicado el 5 de julio originalmente en francés, en Révolution Permanente, parte de la red internacional La Izquierda Diario. En el contexto de estas elecciones legislativas exprés, la campaña de Anasse Kazib y Elsa Marcel en Seine-Saint-Denis fue algo fuera de lo común. Aquí un repaso a su candidatura, que defendió la necesidad de que los trabajadores, los jóvenes y los barrios populares luchen contra Macron y la extrema derecha.

La campaña de Anasse Kazib como diputado por la segunda circunscripción de Seine-Saint-Denis [1] llegó a su fin el domingo 30 de junio, con 1128 votos emitidos (3,67%). Un resultado honroso para el primer candidato de Révolution Permanente en unas elecciones nacionales, y sobre todo el tercer mejor porcentaje para la extrema izquierda de la Francia metropolitana en estas elecciones legislativas, donde la presión para votar a favor del Nuevo Frente Popular era particularmente fuerte. “Hemos logrado el mejor resultado para una lista de extrema izquierda en la historia de la circunscripción”, resume Anasse Kazib. El anterior “récord”, de 786 votos (2,83%), lo consiguió Lutte Ouvrière en 1997, tras la excelente elección de Arlette Laguiller en 1995.

Frente a la fuerte presión para unirse a quienes han traicionado a las clases populares cada vez que han estado en el poder, y en respuesta al ascenso de la extrema derecha de Rassemblement National (RN), esta candidatura pretendía encarnar una alternativa independiente de clase que no se contentaba con una campaña testimonial y que entablaba un verdadero diálogo con amplios sectores de nuestra clase. Una política que habíamos propuesto a otras organizaciones de extrema izquierda, desgraciadamente sin ninguna respuesta positiva por parte de ellas.

Una gran campaña de encuentro con los habitantes y los trabajadores de los barrios populares

Frente a las estaciones de la red de trenes regionales del Gran París (RER) de Saint-Denis y Pierrefitte, cerca de la Basílica, en el mercado de Les Halles o frente al supermercado LIDL de Villetaneuse... durante quince días, la mayoría de los vecinos de la 2ª circunscripción se cruzaron con militantes que les entregaban un folleto sobre la candidatura de Anasse Kazib y Elsa Marcel a las elecciones legislativas, o vieron sus caras en carteles pegados en vallas publicitarias de su ciudad. Algunos incluso vieron el “RP-móvil”, una furgoneta con un altavoz en el techo que recorría los barrios de la circunscripción invitando a los votantes a reuniones públicas y a apoyar a esta candidatura obrera y revolucionaria contra la extrema derecha.

En una circunscripción que el Partido Comunista Francés (PCF) gana desde 1967 -con la excepción de las elecciones de 2017, cuando el actual alcalde de Saint-Denis del Partido Socialista (PS), Mathieu Hanotin, ganó la banca de diputado-, instalar a este candidato obrero y revolucionario era todo un reto. En total, se pegaron 45 puerta a puerta, 170 volanteadas, 20.000 carteles y se distribuyeron 80.000 folletos durante los catorce días de una campaña exprés lanzada a toda prisa al día siguiente de que Emmanuel Macron disolviera la Asamblea Nacional el 9 de junio. Para ello, decenas de militantes y simpatizantes se movilizaron cada día, durante 2 o 3 horas seguidas, sobre el terreno, a la salida de los colegios, frente a las estaciones de metro o en los centros comerciales, para promover esta nueva candidatura.

Irène, estudiante de la Universidad de Saint Denis y responsable de la campaña, afirma

En la Universidad París 8 terminamos los exámenes en mayo, y muchos teníamos previsto irnos de vacaciones o empezar trabajos de verano en junio. Pero varios de nosotros cambiamos nuestro calendario tras el anuncio de nuevas elecciones. No podíamos seguir como si nada tras el histórico resultado de la extrema derecha en las elecciones europeas, y la candidatura de Anasse Kazib era una oportunidad para defender una alternativa seria.

Es una preocupación compartida por Henda, profesora en el distrito 93 de París y madre de dos hijos, que ha sacado tiempo de su apretada agenda para participar en las actividades de la campaña varias veces por semana: “Es el futuro de nuestros hijos lo que está en juego. Hoy en día, cuando sos madre en un barrio popular, recibís muchas críticas, la gente te dice que sos mala madre, que nunca sos lo bastante buena... pero es el sistema el que es malo”. Como ella, participaron en la campaña profesores, maquinistas de la red de servicios de transporte parisina RATP, ferroviarios y otros trabajadores. Es una realidad que ha permitido hablar con muchas personas de la segunda circunscripción de Seine-Saint-Denis, que atraviesan dificultades similares. Durante la campaña puerta a puerta, sobre todo en los barrios obreros de Sémard, Allende y Floréal, los temas relacionados con la educación, la falta de infraestructuras para los jóvenes y la violencia policial ocuparon el centro de los debates. Al igual que los bajos salarios y la inflación, tema ineludible de las jornadas en las que funciona el mercado de Saint Denis.

Miseria social, desmantelamiento de los servicios públicos, violencia policial: la urgencia de un programa revolucionario para hacer frente a la extrema derecha

El objetivo de la candidatura de Anasse Kazib y Elsa Marcel era ofrecer una alternativa real frente a la miseria que viven los habitantes de Seine-Saint-Denis, pero también frente al peligroso auge de la extrema derecha, que prospera en el departamento gracias a las políticas xenófobas, antimigrantes y antisociales de los últimos años. Estas preocupaciones impulsaron a este trabajador ferroviario de 37 años y a la abogada de trabajadores y jóvenes víctimas de la violencia policial a presentarse contra la candidatura de Stéphane Peu (PCF), que busca su tercer mandato como diputado bajo la bandera del Nuevo Frente Popular (NFP), junto a François Hollande y ex ministros de la ex primera ministra de Macron, Elisabeth Borne.

En la circunscripción, donde muchos vecinos sufren las consecuencias de la Ley de Trabajo, la reforma de la “licencia para matar” introducida por Cazeneuve, del Partido Socialista, y la “Ley contra el Separatismo” [que contribuye a perseguir a la población de origen árabe y musulmán] (sobre la que Stéphane Peu se abstuvo), ha ganado terreno la esperanza de enviar a la Asamblea a un hombre que creció en la zona y sabe lo que es no poder llegar a final de mes. “Es una candidatura que le habla a los barrios, su programa me habla y hablará a muchos de los habitantes de Saint-Denis. Tiene la motivación de defendernos a nosotros y a la gente de los suburbios. Él representa realmente a los barrios, sabemos quién es, nunca ha tenido la boca cerrada”, explicaba un vecino del barrio de Franc-Moisin, en Saint-Denis, al término de una reunión del comité de campaña, el miércoles 19 de junio.

Aunque la capacidad de identificarse con Anasse Kazib, a diferencia de los candidatos políticos profesionales, era un factor importante, no era el único. “Me preocupa el racismo y no creo que podamos combatirlo con proyectos cada vez más moderados que no quieren enfrentarse directamente a las políticas coloniales, como es el caso de Kanaky”, explicaba un empleado bancario en una reunión de barrio, reivindicando el programa antiimperialista de la candidatura de Révolution Permanente, contrario al del NFP.

Del mismo modo, aunque gran parte de los habitantes de Seine-Saint-Denis no tienen derecho a voto, la participación en la campaña de militantes del Colectivo de Estudiantes Extranjeros de la Universidad París 8, que no tienen ni nacionalidad ni papeles franceses, fue inestimable para debatir con los vecinos la retórica racista de RN, que hace de los inmigrantes la causa de la pobreza de los barrios.

Un activista de la campaña al final de una reunión vecinal explicó:

Para nosotros, luchar contra la extrema derecha significa luchar por la regularización de los sin papeles, la apertura de las fronteras, el fin de los centros de internamiento, y vincular todo esto a pelear por salarios más altos para todos, jubilación a los 60 años, para mejorar la vida de todos los trabajadores.

Oumou Gueye, quien participara de la huelga de la emblemática lucha de los trabajadores de la limpieza de ONET, dijo en el mitin de fin de campaña al que asistieron cerca de 400 personas en la bolsa de trabajo de Saint Denis el 28 de junio:

Anasse es la voz de los trabajadores, la voz de los sin voz. En 2017 ganamos nuestra huelga con su apoyo y el de Révolution Permanente. Durante 45 días nunca nos abandonaron, así que sé que su candidatura defenderá nuestras luchas y nuestras condiciones de vida, nuestros salarios, nuestras pensiones.

Una campaña para preparar el camino a seguir

“Nos hemos ganado el respeto y la dignidad de los vecinos y trabajadores de los barrios populares que están en primera línea de la lucha contra el racismo y los ataques antisociales, pero que se niegan a aceptar el mal menor en favor de quienes nos traicionaron hace unos años”, declaró Anasse Kazib tras anunciarse los resultados ante los activistas de la campaña durante la velada electoral en un bar del centro de Saint Denis.

Y añadió:

Nos presentamos para no rendirnos, porque sí, la extrema derecha es un problema, pero no queremos decirle a la gente “si Bardella está ahí, estamos todos jodidos”, porque eso desmoraliza a nuestro campo social, mientras que nuestro campo social es fuerte, incluye a millones de trabajadores que hace un año salieron a la calle contra la reforma de las pensiones y que depositaron sus esperanzas en la lucha de clases y las huelgas para frustrar los ataques de Emmanuel Macron. Si creemos que Bardella significa más racismo y más reformas antisociales, la respuesta no debe ser ir a repartir volantes para Hollande y Cahuzac, sino ir a buscar a los trabajadores a las fábricas y preparar la huelga para preparar el contraataque. No podremos arrancar a los trabajadores de las garras de la RN sin un programa duro, que incluya la jubilación a los 60 años, salarios más altos, transporte gratuito, el fin del genocidio en Gaza, la disolución de las fuerzas especiales de policía y la regularización de los inmigrantes sin papeles. Pero todo ello supone movilizar a todos los sectores de la población interesados en luchar contra la extrema derecha y las políticas antisociales, empezando por el mundo del trabajo.

Esta campaña, en cierto modo inédita para Anasse Kazib y Révolution Permanente, que se habían topado con el obstáculo antidemocrático de tener que conseguir las 500 firmas de los prefectos departamentales durante las elecciones presidenciales, ha permitido demostrar la posibilidad de crear una alternativa seria e intransigente al proyecto reaccionario y antiobrero de la extrema derecha, defendiendo un programa para luchar seriamente contra la pobreza, el endurecimiento autoritario del régimen y la guerra, y dirigir la batalla contra la extrema derecha y Macron.

Un programa para presentarse a las elecciones pero que pretende ser un programa de acción para las futuras luchas que nos recuerde que los trabajadores, los jóvenes y los barrios populares deben apoyarse en sus propias fuerzas y no en los políticos profesionales del régimen. Desde este punto de vista, la campaña por la candidatura de Anasse Kazib fue más allá de las apuestas electorales y permitió defender la necesidad de organizarse más allá de las elecciones y de construir una respuesta desde abajo con los trabajadores, los jóvenes y los habitantes de los barrios. En este sentido, la campaña constituye una primera base para defender una política de independencia de clase para hacer frente al período que se avecina preparando las luchas venideras.

Traducción: Guillermo Iturbide


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NOTAS AL PIE

[1Nota del traductor: Seine-Saint-Denis es un departamento francés que limita con el noreste de la ciudad de París y forma parte de la región de Île-de-France. Este departamento tiene 12 circunscripciones, la segunda de las cuales está integrada por los cantones de Pierrefitte-sur-Seine, Saint-Denis Nord-Est, Saint-Denis Nord-Ouest y Villetaneuse, con barriadas poulares.
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