Luego de la medida dictada el miércoles, ayer por la mañana 15 trabajadores de limpieza y 6 de la empresa Alsina no pudieron entrar a la fábrica por orden de la patronal.
Viernes 1ro de febrero de 2019 00:00
El pasado martes trabajadores terciarizados dentro de Siderar, metalúrgica perteneciente al grupo Techint de Paolo Rocca, habían tomado un sector de la planta al enterarse de que se los despedía con la excusa de la crisis económica que sufre el país. Una verdadera hipocresía teniendo en cuenta que el grupo económico más importante de Argentina viene de comprar las acciones mayoritarias de una empresa en Arabia Saudita por más de 140 millones de dólares y que además viene siendo beneficiaria de subsidios millonarios por parte del Estado a la par que precariza a sus trabajadores y viene descargando un ataque generalizado con despidos y suspensiones.
Hoy transcendió que el gobierno limitaría los subsidios en Vaca Muerta. Inmediatamente el grupo Techint amenazó con reducir las inversiones. Lo que es claro es que mientras hay disputas entre el gran empresariado argentino y sus socios del gobierno, la crisis económica siempre termina recayendo en las espaldas de la clase trabajadora y las masas empobrecidas.
La cara de Rocca
Luego de que la noticia de los despidos se difundiera rápidamente se realizó una reunión entre los delegados, el gremio y la empresa, en la cual las partes firmaron un documento que dictaba la conciliación obligatoria retrotrayendo todos los despidos, exigiendo la reincorporación de todos los despedidos.
Ayer por la mañana cuando los trabajadores regresaron a sus puestos de trabajo se encontraron con que la patronal no los dejaba pasar incumpliendo con lo que habían pactado. Desde entonces los trabajadores se encuentran en estado de asamblea permanente y a la espera de la respuesta de la empresa.
Así como la lucha tuvo eco en los diferentes sectores de la fábrica, también rápidamente la comunidad se solidarizó con los trabajadores despedidos, así fue el caso de los trabajadores de Astillero Río Santiago que se acercaron hasta el predio para brindar su apoyo.
Mientras se cerraba esta edición se estaba realizando en la ciudad de Ensenada en la esquina de Bossigna y Pte Perón, un ruidazo en contra de los tarifazos y porque en SIderar no haya ningún despido. Para variar un poco, cabe resaltar que las direcciones gremiales no adhirieron a la convocatoria depositando todas las expectativas en una audiencia prevista para mañana en el ministerio de trabajo.
Es necesario desarrollar un plan de lucha votado en asamblea para que ningún trabajador de Siderar quede afuera. En la unidad entre tercerizados y efectivos está la fuerza para pararle la mano a los Rocca que mientras reciben subsidios del Estado y ganan millonadas, atacan a los trabajadores, empezando por los precarizados para avanzar sobre las conquistas de los efectivos, es por eso que el sindicato y la patronal los divide. Este plan de lucha tiene que ser en unidad con los diferentes sectores en lucha y todo el pueblo trabajador.