Durante los meses de Enero y Octubre del año recién pasado (2023) la cantidad de trabajadores y trabajadoras que fueron despedidos en el país superó las 2 millones de personas. Llegando a 9 puntos porcentuales de desempleo. ¿Qué podemos esperar de esta situación?
Domingo 14 de enero
Los índices de despido en Chile y desocupación de las y los trabajadores, quienes nos vimos afectados por las medidas empresariales durante el año pasado continúan al alza, llegando al 9%.
Más de 1 millón de despidos se concentran en la Región Metropolitana, éstos pertenecen a su vez, a diferentes sectores, por ejemplo, cerca de 500 mil puestos de trabajo se perdieron sólo en el sector de la construcción, afectados por el tipo de contrato a los que son sometidos; Contrataciones a plazo (hasta terminar una obra) y subcontratación.
Vale decir que mientras cientos de obreros y sus familias caen en la incertidumbre de no tener una fuente laboral, vemos como las inmobiliarias aumentan sus ganancias, recaudando hasta junio del 2023 una cifra cercana a los $2.700 millones y aumentando su venta de propiedades nuevas durante el año pasado después de casi 2 años con tasas de interés altísimas.
Los sectores de servicios y retail también se han visto afectados con este incremento de la cesantía, en este caso, la mayoria son mujeres trabajadoras y la juventud que inicialmente se incorpora al mundo laboral, donde las condiciones son igual o más precarias, en el caso de las mujeres, aún existe el problema histórico de la brecha salarial, la subcontratación, la poca o casi nula cobertura en el derecho a sala cuna y los contratos part time.
Estar cesante en Chile, es estar en la penumbra, es vivir amargamente el "fortalecimineto" de las leyes laborales, los avances de la tecnología, que más allá de ser herramientas que simplifiquen la labor de las y los trabajadores, se han convertido en el mejor bien de los empresarios, ya que mucha de esta tecnología se ha utilizado para reemplazar la mano de obra, ejemplo de ello, son las cajas de auto servicio en el retail.
Es decir, que no solo generamos ganancias enormes con la plusvalía que consiguen con nuestra fuerza laboral y el miserable sueldo mínimo avalados por el Estado, si no que además, ocupan los avances tecnológicos para convertirnos en productos desechables.
El aumento en el número de cesantes en Chile, es una problemática que se viene arrastrando durante años, más aún durante la pandemia, que fue donde más aumentó esta cifra, pero que este gobierno no ha sabido ni muestra interés por revertir, todo lo contrario, sigue facultando cada vez más a los grandes empresarios y a los grupos empresariales que lo presionan, sigue dando beneficios para continuar invirtiendo su capital, y explotando a las grandes mayorias, como lo pudimos ver con la ley de “sectores estratégicos”, que impide el derecho a Huelga a las y los trabajadores que desarrollen actividades laborales en estos sectores.
Por otra parte, la solución que plantea y que nos brinda el gobierno, es la flexibilidad y agilidad en los tramites de las instituciones como la AFC para que podamos hacer uso de los seguros de cesantía.
El gobierno anuncia para este año 2024 la creación de más de 100.000 puestos de trabajo, cifra muy por debajo del gran número de cesantes que dejo el 2023 y abre además, las interrogantes; ¿A qué costo? ¿Bajo cuáles condiciones laborales? recordemos que Piñera en su mandado también creo fuentes laborales, pero en las condiciones más miserables posibles.
Como trabajadores no esperamos nada muy alejado de esas condiciones con este anuncio de Boric ya que los salarios siguen muy por debajo de los gastos básicos que tenemos que cubrir las y los trabajadores producto de la inflación.
