Juventud Precarizada. Jóvenes de Ensenada se suman a la jornada de protesta de la Red de Trabajadores Precarizados

Ensenada no escapa a la realidad del país. Hoy quienes trabajan de forma precaria e informal están sufriendo las graves consecuencias desatadas por la crisis sanitaria, social y económica del Covid -19. Es el caso de los trabajadores despedidos de la empresa Amiplast S.A., los recortes salariales que lleva adelante Siderar del grupo de Paolo Rocca en acuerdo con el sindicato de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), entre tantos otros.

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En nuestra región la precariedad del trabajo toma distintas formas, pero hay un factor común que une a todos los sectores: la necesidad de dar una respuesta de forma organizada. A continuación compartimos el testimonio de algunos de los protagonistas de la jornada que se realizará en el día de hoy las calles 7 y 50 de La Plata y en todo el país.

“Mi nombre es Gina soy trabajadora gastronómica en Punta Lara. A raíz de la pandemia muchísimos trabajadores nos quedamos sin trabajo y sin la seguridad de poder volver en cuanto la situación actual termine.”
Gina fue perseguida por su empleador Rodolfo Cerón por organizarse y acudir al sindicato frente a las condiciones paupérrimas en que se encontraban. “Las condiciones de trabajo eran muy malas, desde los sueldos hasta los maltratos psicológicos y acosos recibidos por parte del dueño. Ni mis compañeros ni yo estábamos ‘en blanco’, mis jornadas eran de 12 horas en las que estaba todo el tiempo parada y el día franco no se pagaba. A esto se sumaban las condiciones de insalubridad, había plagas de ratas y cucarachas de las cuales nadie se encargaba.” Luego de acudir al sindicato, recibió un mensaje del dueño para que no volviera a trabajar. Sin embargo, la hija del dueño, también responsable del local, le prometió que iba a ser reincorporada pero, finalmente, no tuvo más noticias sobre su fuente de trabajo. Conoció La Red a través de las redes sociales y decidió contactarse para sumarse a la organización y denunciar su situación y la de sus compañeros.

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A pesar de las ganancias siderales de la empresa en los últimos años, YPF también precariza a través de tercerizadas, que mediante contratos basura, emplean trabajadores que hoy están pagando las consecuencias de esas formas de contratación con la inestabilidad laboral y las presiones de la empresa y de los sindicatos para que sean quienes carguen con las supuestas pérdidas. Es el caso del acuerdo que realizó la Cámara Empresarial Petro-Energética de la República Argentina (Cepera) junto con el sindicato (SUPeH) e YPF para reducir un 40% el salario del sector de destilería, medida que afecta a más de 1500 trabajadores.

“Mi nombre es Juan, trabajo subcontratado en la planta YPF de Ensenada. Desde el inicio de la cuarentena, por pedido de la empresa, continuamos trabajando normalmente y con condiciones de trabajo habituales pre-pandemia. Hacinados y con haber recibido solo una vez barbijos y alcohol en gel llegamos al mes de mayo con la sorpresa de cobrar solo el 25% de nuestro sueldo por falta de certificación de abril por parte de YPF a las empresas. Los compañeros en rechazo a esta medida descarada y luego de conocer las ganancias multimillonarias del 2019 y el primer trimestre de este año decidimos no concretar los trabajos solo por un día recibiendo como respuesta la advertencia de posibles descuentos. El gremio por su parte nos dice a lxs trabajadorxs que hacer paro es una sentencia de muerte. Es necesaria la unidad de todas las luchas obreras por el pago del 100% del salario y la reincorporación de trabajadorxs despedidxs, por eso me sumo también a la jornada de protesta de La Red.”

La jornada nacional de lucha impulsada por la Red tiene como finalidad alzar la voz de los trabajadores precarizados e informales con el fin de visibilizar sus reclamos y denunciar los constantes ataques que vienen sufriendo por parte de las patronales desde que comenzó la cuarentena. En este sentido, la jornada levanta un pliego de reivindicaciones y consignas que sintetizan sus reclamos: