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Red Internacional
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Editorial. La “falta” de trabajo y las maniobras empresarias

La cuestión del desempleo se presenta como una de las principales preocupaciones del Gobierno. Además del debate por la reducción de la jornada laboral, hoy se podrían crear nuevos empleos. Un recorrido por fábricas y empresas testigo. Editorial de El Círculo Rojo, programa de La Izquierda Diario que se emite los jueves de 22 a 24 h por Radio Con Vos, 89.9.

Fernando Rosso

Fernando Rosso @RossoFer

Jueves 29 de julio de 2021 23:16

  •  El tema de la desocupación está entre las principales preocupaciones de la población y ahora parece que encendió las alarmas del Gobierno.

  •  Por un lado, lanzó el programa de empleo joven “Te sumo” que implica un subsidio de hasta el 75 % del salario para que las empresas tomen a 50 mil jóvenes, con ingresos desde 15 mil a 30 mil pesos. Por otro lado, algunos referentes o adherentes al oficialismo como Héctor Recalde o el bancario Sergio Palazzo empezaron a agitar la necesidad de la reducción de la jornada laboral. Una demanda que la izquierda y el Frente de Izquierda vienen proponiendo hace mucho tiempo y que es absolutamente válida, totalmente posible (por las condiciones tecnológicas y de producción), pero, sobre todo, muy necesaria ante panorama laboral desolador que ofrece la Argentina hace mucho tiempo.
  •  Ahora, mientras justo en tiempos electorales, esto se agita por arriba, en la realidad los empresarios, con el aval de los funcionarios y en acuerdo con los dirigentes sindicales, siguen aprovechando la pandemia para aumentar los niveles de explotación y evitar la creación de puestos de trabajo que podrían efectivizarse hoy, ya mismo por la recuperación, dispar, pero recuperación que hay en muchas ramas. Le pregunté a algunos amigos, compañeros, laburantes sobre la realidad en las fábricas y empresas y miren estos ejemplos testigo.
  •  En Volkswagen, situada en Pacheco, zona norte de la provincia de Buenos Aires: a partir del 2 de agosto y por atrasos que tiene la empresa en términos de entrega de producción para exportación se hizo un acuerdo con el sindicato (SMATA) para ampliar los horarios en dos turnos. La empresa dice que la casa matriz no le permite tomar personal nuevo, entonces, supuestamente, por dos meses se va a empezar a trabajar de lunes a sábado de 5 de la mañana a 14:45 h y el turno tarde de 14:45 h hasta las 0:30 h. De esta manera se garantizan dos turnos de 9 horas de corrido. Me decía un trabajador que “ante la desocupación infernal que hay, lo ideal sería implantar turnos de 6 horas. Pero no, se está saturando a los actuales trabajadores para tener más ganancias”. Y escuchen esta paradoja: con esas extras quizá muchos comiencen a tributar el impuesto a las ganancias y, en la ecuación final, perder. Estamos hablando de una de las principales multinacionales automotrices.
  •  En la autopartista Ford, en la planta de Pacheco acaban de dar de baja a los trabajadores que habían tomado con contratos eventuales porque están regresando los que estaban suspendidos por la pandemia (personas de riesgo, con comorbilidades etc.). Ahora la planta está con suspensiones, pero por faltan piezas, no por producción. Sin embargo, la gerencia ya anunció que van a volver a trabajar, incluidos los sábados y domingos. Es decir, se anuncia aumento de la producción cuando se echó a los contratados.
  •  Otro ejemplo: Fernet Branca la planta que está la localidad de Tortuguitas también en la zona norte del Gran Buenos Aires. Se realizaron muchísimas horas extras en meses anteriores y sobre todo junio y la primera 15 quincena de julio. La modalidad en esa fábrica es trabajar sábados, domingos y feriados. En general toda la pandemia y la cuarentena se trabajó más —en promedio— que los años anteriores. La fábrica no tuvo las paradas típicas de mitad de año.
  •  Otro ejemplo es Fate, la fábrica de neumáticos con sede en San Fernando. Me decían que la empresa está casi a niveles prepandémicos en términos de producción. Hay todavía muchas personas fuera de la planta (por enfermedades pre-existentes) y no hay contratación a la altura de esa producción. La empresa lo “resuelve” por dos vías: por un lado, contratando por un periodo de tres meses (con posibilidad de extensión a tres meses más), aunque siempre es menor la cantidad de trabajadores contratados con relación a los que están afuera; y por otro lado, hay muchas horas extras (jornadas de 12 horas, ir a laburar los francos etc). Obvio no es un cuestionamiento a quienes hacen las extras porque lo necesitan, entre otras, cosas por los niveles salariales, sino a quienes lo imponen. Me decían un dato interesante: Fate aumentó más del 70 % el valor de las cubiertas en el último año y además que tiene niveles de exportación (o sea comercio en dólares) muy importantes y altos que implica gran parte de la producción. Sobre todo el principal mercado es Brasil.
  •  En la alimenticia Kraft (tiene dos plantas: en Pacheco y Victoria) donde el año pasado habían adoptado la modalidad de tomar empleados “prestados” de las cadenas de comida rápida (McDonald’s, entre otras) para suplantar a los obreros suspendidos por la pandemia (ya están dados de baja la mayoría), también se está laburando mucho todos los días con extras e incluso los fines de semana.
  •  Lo mismo me dijeron de fábricas cordobesas como Renault o Fiat: la primera que está en el barrio Santa Isabel de la Capital de la provincia que también está tomando gente con convenios más flexibles y la segunda que aprovechó para tercerizar tareas: por ejemplo, la empresa Iscot que antes hacía solo la limpieza ahora hace limpieza y mantenimiento.
  •  ¿Qué quiero decir con todo esto? Por un lado, ponerle nombre propio y dar ejemplos concretos de sobreexigencia laboral que evita crear nuevos empleos; por otro lado que la pelea por las reducción de la jornada es completamente necesaria. Pero, además hoy, evitando estas maniobras se podrían crear miles de puestos. Por último, para no comerse la curva de lo que se agita en la campaña mientras existen estas prácticas avaladas por el ministerio y que se arreglan con los sindicatos: por ejemplo Ricardo Pignanelli de SMATA firmó el acuerdo de VW. Justo el otro día, Leandro Santoro tuiteó: “Hoy con el compañero Ricardo Pignanelli hablamos de producción y empleo.” Se ve esta parte no la charlaron mucho. Rodolfo Daer (hermano de Héctor, el preferido del Presidente Fernández) etc.
  •  Porque trabajo no falta, lo que falta es ponerle límite a esa voracidad empresaria, avalada por los dirigentes o funcionarios; y no agitar por arriba todo lo contrario a lo que se acuerda o se permite por abajo.
  • Fernando Rosso

    Periodista. Editor y columnista político en La Izquierda Diario. Colabora en revistas y publicaciones nacionales con artículos sobre la realidad política y social. Conduce el programa radial “El Círculo Rojo” que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs. por Radio Con Vos 89.9.

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