Organizado por La Gaceta y Canal 10, se desarrolló el debate de candidatas a diputadas en Tucumán. La presencia de la izquierda fue clave para mostrar la complicidad del oficialismo provincial en el ajuste de Cambiemos
Viernes 11 de octubre de 2019
Con la presencia de las candidatas en segundo término por las listas a diputadas nacionales debatieron esta semana Mabel Carrizo del Frente de Todos, Lidia Ascárate por Cambiemos, Nadima Pecci de Fuerza Republicana y Alejandra Arreguez del Frente de Izquierda Unidad.
El debate giró sobre tópicos previamente pautados. En un primer bloque las candidatas se pronunciaron sobre el narcotráfico, la baja de imputabilidad y la legalización del aborto. Estos ejes fueron aprovechados por el oficialismo local, para mimetizarse con el bussismo y Cambiemos, y entre los 3 partidos se desató una competencia reaccionaria por cuál proponía más mano dura, cuál se comprometía a mandar más policías a los barrios y cuál de los 3 es más celeste.
Arreguez señaló esa coincidencia y sostuvo que contra las mujeres y contra la juventud no existen grietas entre ellos y fue la única fuerza que planteó la legalización de la marihuana, denunció el gran delito que se organiza dentro del aparato estatal y llevó la voz de la marea verde que exige la legalización del aborto y ESI en todas las escuelas: “el Frente de Todos no puede ser garantía para las mujeres, porque su lista está impulsada por Manzur, el gobernador que torturó a un niña de 11 años obligándola a parir”, afirmó.
30.000 PRESENTES! Ahora y siempre
El momento más intenso del primer segmento de debate transcurrió cuando la candidata del bussismo, Nadima Pecci reivindicó lo actuado por los militares, sostuvo que la última dictadura se trató de una “guerra” y negó la cifra de 30 mil desaparecidos. Estás afirmaciones fueron tras el señalamiento de Arreguez que sostuvo que “Fuerza Republicana no puede decir que defienden ninguna vida, cuando el fundador de su partido murió condenado por delitos de lesa humanidad”.
Con preocupante soltura, Pecci respondió: “Y?”. Las redes sociales estallaron en repudios y manifestaciones de rechazo, que se incrementaron luego de que Pecci, le sugiera a Alejandra que “deje de leer esos libros”.
Con el FMI o con los trabajadores
En un segundo bloque, las candidatas se posicionaron sobre el acuerdo con el FMI, la industria sucro-alcoholera y la reforma política.
Nuevamente grandes puntos de coincidencias pusieron del mismo lado de la grieta al Frente de Todos, Fuerza Republicana y Cambiemos. Mencionaron propuestas para aumentar la ganancia empresarial de los dueños de los ingenios, se jactaron de las obras que favorecieron la exportación de arándanos y limones. Pero no mencionaron siquiera la crítica situación que atraviesan los trabajadores temporarios con temporadas cada vez más cortas. Las situación de cientos de familias que se quedaron sin sustento luego que 2 ingenios decidieran no moler este año.
Corrió por cuenta del Frente de Izquierda llevar esa voz, proponiendo una ley de emergencia laboral que garantice un salario mínimo igual a la canasta familiar, la prohibición de despidos, una temporada mínima de 10 meses, comisiones de seguridad e higiene en los ingenios y obra social para los temporarios y sus hijos todo el año.
Durante el segundo bloque de debate libre, las candidatas del peronismo y Cambiemos se enrrostraron una seguidilla de verdades parciales: mutuamente se señalaban como responsables del ajuste. Ascárate defendió el acuerdo con el FMI y Carrizo sostuvo que hay que seguir pagando la deuda, renegociando los plazos de vencimiento y seguir pagando al FMI respetando el acuerdo que concretó el macrismo. Como se demuestra en Ecuador, esto es imposible de llevar adelante sin medidas de ajuste.
Para el cierre, al igual que durante todo el debate, Arreguez insistió en que "todos estos partidos ya gobernaron. El bussismo fue cómplice de Menem en los noventa. Se presenta como algo nuevo, pero yo no había ni nacido y Ricardo Bussi era funcionario y ya cobraba dietas siderales. El peronismo que gobierna hace veinte años la provincia o Macri, que le fue suficiente con cuatro para terminar de hundir al país (...) el Frente de Izquierda Unidad es la única fuerza que propone una salida para que está vez a la crisis la paguen los capitalistas, empezando por romper con el FMI y reorganizar la economía nacional poniendo por delante la vida y los intereses de los trabajadores y sus familias". Y defendió que para las peleas que se vienen es necesario fortalecer a la izquierda en el Congreso y en todo el país.