Indagamos en el proyecto y experiencia sostenida de la Escuela Popular de Arte Sueños Intactos.
Lunes 6 de julio de 2020 12:31
En medio de la crisis sanitaria, económica y social que golpea fuertemente a los barrios y sectores populares, en Alto Comedero las y los docentes de la escuela Popular de Arte Sueños Intactos sostienen el vinculo pedagógico-artistico con lxs estudiantes, precarizados pelean por mejores condiciones y con el persistente compromiso de hacer del arte un derecho y no un privilegio. Desde la Izquierda Diario entrevistamos a las y los docentes para que nos cuenten sobre este proyecto sostenido colectivamente.
- ¿Nos pueden comentar como surge el proyecto de Escuela Artística en el barrio?
- “La escuela surge en el año 2011 a través de un proyecto comunitario de un grupo de docentes de arte que empezaron a trabajar en el barrio ofreciendo algunos talleres artísticos, a partir de ahí empezamos a pensar un proyecto más amplio donde podamos incluir a otros educadores de arte para que se vayan sumando, año a año presentando proyectos en el Ministerio de Educación argumentando la necesidad del acceso a la cultura y al arte en los barrios populares, ya que nosotros veíamos la realidad en este caso en Alto Comedero, la zona del B4, B5, el acceso a las escuelas artísticas ubicadas en el centro es de difícil acceso para las familias, nulo, o directamente se desconoce su existencia".
- "Conversando con las familias, docentes y el barrio en general fuimos construyendo este proyecto de manera colectiva discutiendo el eje fundamental del derecho al acceso, al hacer arte y crear. Fuimos elaborando proyectos, petitorios juntando firmas que avalen este proyecto de escuela, fue una lucha constante, día a día, en las calles también para poder hacer crecer este proyecto”.
La escuela se encuentra en el barrio Alto Comedero, en el sector B4 funciona una de las sedes en el centro vecinal y la otra en un lugar llamado fundación Libertad, al otro extremo del barrio sobre la ruta 66. En la escuela trabajan aproximadamente 25 docentes entre capacitadores y 5 educadores perciben el salario social complementario que también son parte de la escuela, la matricula ronda entre 800 asistentes entre niñxs que van desde los 2 años hasta adultos mayores sin limite de edad.
La Escuela es un espacio autosugestionado por docentes y familias, si bien dependen de Educación Comunitaria del Ministerio de Educación de la provincia, ellos solo pagan los sueldos, los materiales para brindar los talleres, dictar las clases, los instrumentos, los insumos de limpieza y sobre todo el espacio, es algo que se auto gestiona desde la escuela. En este sentido es que realizan diversas actividades para disponer de fondos para solventar esos gastos, rifas, ventas de comida o los aportes solidarios de las familias, como así también las clásicas muestras en el teatro Mitre.
- ¿Como son las condiciones de trabajo de las y los docentes?
- “Todos los educadores de la escuela estamos precarizados, eso quiere decir que nuestros contratos no son seguros, que las condiciones son malas, y que nuestros cargos se caen año a año, siempre cobramos tarde aveces con retraso de 5 o hasta 7 meses incluso, siempre que sucedió estuvimos exigiendo y pronunciandonos en las calles que se regularice, nosotros hemos peleado a lo largo de todos estos años para que se aumente el cupo de docente, el proyecto crece, la matricula crece impresionantemente, pero no el cupo docente y también seguimos exigiendo eso”.
- “Por otra lado también contar que hace dos años sufrimos un fuerte recorte de horas cátedras que estaban presupuestadas en nuestro proyecto que nos las sacaron deliberadamente, en ese momento mantuvimos el reclamo varias semanas, con protestas, hicimos jornadas de lucha artística con la comunidad barrial, con los profes, con los estudiantes y hemos logrado a través de eso que nos reintegren esas horas, nos parece importante marcar esto por que bueno es la manera que tenemos nosotros de exigir lo que nos corresponde aun cuando no es en las condiciones que debería que ser, pero lo seguimos peleando por eso, y sosteniendo este proyecto que nos identifica fuertemente, como docentes, como trabajadores del arte y la cultura, comprometidos entendiendo que a partir de poder acceder al derecho que tenemos y que nunca deba ser un privilegio, pero también remarcamos el derecho a una viviendo digna, a la educación, a la salud”.
Alto Comedero es el barrio con mayor densidad de población en San Salvador de Jujuy, dividido por sectores, y con su creciente extensión por la creación de viviendas sociales, es un barrio donde viven las grandes porciones de sectores trabajadores, populares y desocupados de la provincia. Barrio donde más golpea el hambre, la desocupación y la pobreza. Sumado a este contexto de pandemia y de educación a través de plataformas virtuales, es una situación compleja la que se presenta, donde la mayoría de los niñxs no pueden acceder. En Jujuy el 55% de los hogares no tiene acceso a internet fija, en relación a la cantidad de estudiantes sin acceso a internet en el hogar, tanto en nivel primario como secundario, está cerca del 30%. Si se toman los datos alrededor de 41.000 estudiantes están por fuera de esta modalidad. Aún así las y los docentes de la escuela ven la necesidad de mantener el vinculo por otros medios y estrategias para hacer llegar y crear el arte en y desde los espacios que están habitando.
- “Hacemos todo esto a pulmón, pero con la firme consciencia de que tenemos que luchar para que las condiciones sean las que tiene que ser, y no solo para la escuela, si no para las familias trabajadoras de los barrios donde golpea el hambre, golpea la desocupación, y ahora se suma esta crisis por la pandemia que profundiza y pone de relieve todas las desigualdades que existen”.
- “En medio de estas condiciones en las que tenemos que trabajar precarizados, atravesados por esta crisis por la pandemia, la realidad de las familias, lo que nos sostiene es la convicción de podemos transformar todo esto también desde el arte”.