Elecciones 2019. Lavagna en campaña: no habla del FMI y se declara en contra del aborto legal

La candidatura de Roberto Lavagna cada vez pareciera confirmarse un poco más. Este martes por la mañana fue entrevistado por la periodista Maria O’Donnell, por Radio Metro, y si bien no confirmó en un cien por ciento su candidatura dentro de un espacio opositor “de unidad”, como le gusta decir a él, deslizó que cada vez está más cerca de tomar esa decisión.

“Las circunstancias me fueron empujando a lo largo de los meses y aquí estamos”, dijo Lavagna. La periodista le preguntó si eso significaba entonces que se “siente convocado por el momento” y el ex economista respondió sin dudar: "sí, cambie mi actitud y efectivamente hoy estoy tratando de contribuir, las circunstancias fueron empujando y acá estamos”, dijo.

Seguramente el resultado electoral de Neuquén, donde sufrieron fuertes derrotas tanto el candidato oficialista (Horacio "Pechi" Quiroga) como el candidato impulsado por Cristina Kirchner (Ramón Rioseco) le haya dado una esperanza y afianzado su voluntad de ser uno de los líderes que represente "la tercer opción" en las próximas elecciones.

Veamos sus definiciones más importantes.

Sobre el encuentro con el conductor Marcelo Tinelli: sostuvo que "forma parte de las reuniones que mantengo con la sociedad civil, que no está en la política pero que tiene preocupaciones frente al cuadro que estamos viviendo. Ya desayunamos hace dos meses en mi casa. Esta fue una nueva charla sobre los temas del país. Es gente que no tiene que ver con la política pero que se da cuenta de que algo tiene que hacer".

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Sobre el macrismo y el kirchnerismo: indicó que el problema de los proyectos políticos que encarnan ambos dirigentes es que “los dos tienen un vocación de absorverlo todo no de alternancia, ni de buscar consensos de manera permanente”. Para Lavagna el problema central radica entonces en las formas con las que hacen política y no en las medidas políticas y económicas que impulsan, cuyas consecuencias las padecen la población. A la hora de tener que evaluar el rendimiento económico de la gestiones de Cristina Kirchner y de Mauricio Macri, señaló que "los cuatro años del Gobierno anterior fueron malos, dejaron herencia y estos últimos cuatro años en lugar de superar la herencia profundizaron la crisis".

En ningún momento de sus declaraciones sobre la situación económica hizo alusión al acuerdo sellado entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y muchos menos planteo cuál será su propuesta de vínculo de ahora en más con el organismo internacional promotor de la profundización del ajuste en el país.

La contracara de este silencio de Lavagna fue su encuentro, cargado de hermetismo, con el FMI apenas el mes pasado.

Por último, Lavagna fue consultado sobre la legalización del aborto. Afirmó que "en lo personal no estoy a favor". Y que le "le gustaría una consulta popular sobre este tema. En materia de valores, ¿queremos esto o no? y que los legisladores lo adapten a términos legales".

Extraño, por no decir retrógrado, pensamiento el de Lavagna ya que no son "valores" los que están en juego, sino las vidas de miles de mujeres que seguirán muriendo por abortos clandestinos. O lo que es peor, la vida de miles de niñas a quienes se les niega este derecho, contemplado desde 1921 en nuestro Código Penal, y se las obliga a transitar un embarazo y parir. Vale recordar que su hijo, el diputado nacional Marco Lavagna, fue uno de los legisladores que votó en contra de la legalización del aborto.

Sólo se mostró a favor de la utilización de esta práctica para casos en los que ya esta contemplada legalmente. "La Corte Suprema de Justicia hizo una ley (fallo FAL) tratando algunos casos importantes. Me gustaría ver una cosa de ese tipo y que se aplique en todo el país y que nadie pueda en su feudo, provincia o municipio, impedir que eso se cumpla y en tiempo", dijo.

Si bien Lavagna no dio nombres no hay que ser muy lúcidos para pensar en algunos nombres y provincias en donde esto sucede. Gerardo Morales y la provincia de Jujuy, y Juan Manzur y la provincia de Tucumán. Un "feudo" radical y otro peronista donde se imcumple la ley y desde el Estado se obstaculiza una y otra vez la aplicación del aborto no punible.

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