Después de un primer tiempo olvidable, Los Pumas jugaron un muy buen complemento y por poco no lo ganaron. Cayeron ante Francia 23-21 y ahora deberán vencer a Inglaterra en 13 días para pasar de ronda.
Sábado 21 de septiembre de 2019 10:22
Tanto Francia como Argentina buscaron presionar mucho con defensas bien altas. Ninguno quería que su rival juegue con espacio. Fue parejo el primer cuarto de hora, los europeos eran más elusivos en lo individual y Argentina más paciente, pero ambos siendo sólidos con la presión sin pelota.
El primer quiebre fue de Guido Petti, que transformó una pelota suelta en una jugada neta de ataque. Nicolás Sánchez acertó un penal y abrió el marcador. El 4 argentino, surgido del San Isidro Club, logró tener éxito en donde los otros 29 venían fallando: quebrar limpio la primera línea defensiva para poner a su equipo a correr hacia adelante y al rival, hacia atrás. Por eso, Los Pumas tuvieron la primera gran jugada de ataque concreta del partido.
¡Felicitaciones Guido! El Puma #818 cumplió 50 caps con la camiseta del seleccionado. ¡Y que sean muchos más! pic.twitter.com/l0FU5JEnFm
— Los Pumas (@lospumas) September 21, 2019
Pero Francia acusó muy bien el golpe, porque enseguida Maxime Médard copió la receta, quebró la defensa argentina y sumó Francia con un try de Gael Fickou, el 12. Y con eso se despertaron. Fickou, Vakatawa, Medard, Ollivon y compañía empezaron a encontrar espacios para arrancar y cambiar de dirección con pelota en mano, y así explotar huecos en la defensa. Leyeron muy bien que si evitaban ser muy frontales en el ataque, lograrían buenos resultados con la pelota en la mano.
Como era de esperar, sin la pelota Argentina iba a sufrir, porque Jacques Brunel tiene en su plantel más de un jugador que puede desordenar la defensa con algún cambio de paso y de carrera. Los Pumas tuvieron lo suyo entre los 30’ y los 35’. Francia repitió penales, Argentina insistió para buscar el try en lugar del penal, ya que Francia había sacado 14 puntos de ventaja. Con el line, con el scrum, Los Pumas apostaron a entrar al ingoal. Pero no hubo caso, jamás se pudo sumar.
La primera mitad terminó 20-3 en favor de Francia, claro dominador entre los 15’ y los 30’, y también luego de ese lapso de urgencias en los que Argentina no pudo descontar. Los europeos jugaron mejor y, además, cuando lo hicieron marcaron puntos, al contrario de Los Pumas.
En el segundo tiempo hubo otro semblante, los argentinos salieron decididos a atacar, obtuvieron un penal a favor y entraron al ingoal rival empujando con el maul. El try lo apoyó Petti, el primero argentino, al igual que en el Mundial 2015. Fue todo del equipo de Mario Ledesma el arranque y gran parte del ST. Los cambios cayeron bien, Francia sin pelota no es peligrosa y de a poco Los Pumas se fueron sintiendo cómodos. Minutos después del try de Petti, llegó el de Julián Montoya, con la misma receta: line + maul.
Lo poco que atacó Francia debió hacerlo con el pie, desprendiéndose de la pelota: resultó ser que fue tal la levantada de Argentina que, con la confianza lograda, mejorar también la defensa, fue más sólida. Benjamín Urdapilleta sumó puntos con su zurda que parecían alcanzar para ganar, pero un error tremendamente inoportuno entregó una chance que Camille López no desaprovechó: acertó un drop en la primera que toco y dio marcha atrás con la victoria parcial de Argentina.
#FRAvARG
Pablo Matera: "No me voy a quejar del árbitro. Si no regalábamos el primer tiempo hoy ganábamos"Muchos más sensato el capitán de los Pumas. Claramente el partido se perdió en los primeros 40 minutos. pic.twitter.com/a2dYXMxUMl
— Periodismo Rugby (@Perrugby) September 21, 2019
El partido no perdió intensidad ni nerviosismo, de principio a fin fue para verlo de pie, ya sea en una platea del estadio o en el living de casa acá en Argentina. Los Pumas se ganaron la oportunidad de darlo vuelta con un penal casi en la mitad de la cancha, unos metros volcado hacia la izquierda. Boffelli, el especialista a larga distancia, probó y su remate salió desviado por el primer palo por poco.
Lamentablemente, los buenos 40 minutos del complemento alcanzaron nada más que para emparchar un poco los malos 20 o 25’ que jugaron en el primer tiempo. Errores propios puntuales (envíos errados a los palos, tackles errados, descontrol en ese lapso del PT) y ajenos (dos o tres situaciones muy claras en las que el australiano Angus Gardner no sancionó con justeza) impidieron que Los Pumas ganen en su debut mundialista.
No fue ante cualquier rival la caída. Francia siempre tiene algo extra para dar y no era Argentina el favorito para este encuentro. No hay sistema defensivo que resista los tackles errados, aunque quizás el rendimiento en global haya dejado una sensación más positiva que negativa. La realidad es que jugar bien y perder era un escenario posible, y lo es aún más para el partido ante Inglaterra, aunque primero toca jugar ante Tonga el próximo fin de semana.