Miércoles 1ro de julio de 2015
El pasado 27 de junio se cumplió un nuevo aniversario del golpe cívico-militar encabezado por Juan María Bordaberry. La “Coordinación 27 de Junio” – integrada por organismos de derechos humanos no oficialistas, sindicatos, y gremios estudiantiles – llamó a marchar por las calles de Montevideo exigiendo el juicio y castigo para los militares y sus cómplices civiles, y planteando la renuncia del actual Ministro de Defensa Eleuterio Fernández Huidobro, un ex tupamaro que desde su cargo viene impidiendo el avance del juzgamiento de los asesinos y torturadores, y denostando sistemáticamente la lucha de familiares y ex presos políticos. La misma recibió el saludo de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay. Esta actividad buscó ser un paso adelante en continuar con lo que comenzó el 20 de mayo en la última Marcha del Silencio, donde cien mil personas en las calles se manifestaron contra la impunidad.
La columna partió desde el Hospital de Clínicas, donde se rindió homenaje a todos los trabajadores y trabajadoras que resistieron al golpe en la Huelga General de 1973. Luego la movilización se dirigió al local sindical de los trabajadores de la salud de la mutualista Casmu, donde también se realizó una reivindicación de la resistencia obrera.
La marcha culminó frente al Ministerio de Defensa. Asimismo, se aprovechó la oportunidad para conmemorar al estudiante Rodríguez Muela, asesinado por las bandas fascistas que operaban previo al golpe (como la Juventud Uruguaya de Pie, JUP), rindiendo tributo a todos los estudiantes que lucharon en todo ese proceso.
En la marcha se expresaron los sectores estudiantiles, tanto universitarios como liceales, que levantan las banderas de la lucha contra impunidad, y de sindicatos combativos como los docentes de secundaria, que participaron activamente de la organización del evento.
¡Fuera Huidobro!
Son poco más que una docena los militares que están procesados y condenados por los crímenes cometidos en la dictadura, se encuentran en cárceles “vips” llenos de lujos y con personal a disposición. El Frente Amplio, que hoy cursa su tercer período de gobierno, no ha sido capaz hasta ahora de anular la Ley de Caducidad, contando inclusive con mayoría parlamentaria para ello. Desde el gobierno del ex presidente José Mujica se insistió en que no se querían “viejitos presos”, por lo que se ha tenido una condescendencia para con los militares, en un intento de avanzar en la reconciliación de las fuerzas armadas con la población.
Tabaré Vázquez, quien asumió el pasado 1° de marzo, llamó a conformar la Comisión para la Verdad y la Justicia, pero la misma no ha tenido avances sustantivos, siendo incluso criticada porque no integró a representantes de organizaciones de DDHH disidentes, ni de los trabajadores, y todo hace presumir que será una Comisión para lavarle la cara al gobierno en el tema de DDHH.
Huidobro es, dentro del gobierno frenteamplista, quien más ha llevado hasta el final la postura de defensa de las Fuerzas Armadas, pero para nada es el único responsable de la actual situación de impunidad reinante. Él es quien “hace el trabajo sucio”, pero es claro que toda la fuerza política Frente Amplio está comprometida con la política de impunidad.
Fernández Huidobro, que ya constituye un personaje nefasto y provocador, es repudiado por amplios sectores: votantes frenteamplistas, militantes de los distintos grupos que componen el Frente Amplio, y por supuesto, los sectores de la izquierda no oficialista. Se han elevado comunicados a que el FA lo destituya de su cargo pero la Mesa Política del FA y el mismo Tabaré Vázquez se han negado, y lo único que hicieron fue llamarlo a que se cuide en sus declaraciones.
La impunidad de ayer y de hoy
Hoy, a 42 años del golpe, también se viven violaciones a los derechos humanos de parte de las fuerzas represivas: los mega operativos desde 2011 a 2013 en los barrios pobres, las persecuciones del Departamento de Operaciones Especiales (DOE), que espiaba a luchadores sociales, el sofisticado sistema de violación de la privacidad en telefonía y redes sociales “El Guardián”, de más de 2 millones de dólares, reforzado en la última semana con compras del estado de sistemas de inteligencia rusos de más de 150 mil dólares, y un largo etcétera hacen que el Frente Amplio sostenga una política represiva solapada por su fraseología de centroizquierda.
En estos momentos, en Uruguay se está debatiendo profundamente sobre el destino de los fondos del país y la asignación de los recursos necesarios para las políticas públicas, en el marco de la votación en el parlamento del presupuesto quinquenal. Los sectores de la educación exigen el 6 % para la educación pública y universitaria (ANEP y UDELAR), y que se restrinja el presupuesto destinado a las fuerzas represivas. Está prevista una lucha con ocupaciones, huelga y movilizaciones. Habrá una nueva oportunidad para que los trabajadores y estudiantes aceleren la experiencia con el partido de gobierno, y se inicie un proceso de organización independiente del estado.
Y si sobre impunidad de hoy se refiere, debemos nombrar la condescendencia que tuvo la justicia con el asesino Gavazzo hace menos de 15 días, cuando por primera vez se le otorgó a un asesino la posibilidad de las salidas transitorias.
Coordinación 27 de Junio
Está compuesta por las siguientes organizaciones: Sindicatos de docentes de secundaria ADES Montevideo, Asociación de Funcionarios del CASMU (AFCASMU), Unión de Funcionarios del Codicen (UFC), Centro de Estudiantes del instituto de formación docente más importante a nivel nacional “IPA” (CEIPA), Sindicato del taxímetro (SUATT), Unión de Trabajadores del Hospital de Clínicas, Tendencia Clasista y Combativa (TCC), Plenaria Memoria y Justicia, Agrupación Universitaria Tesis XI, e independientes.
Entrevistamos a Irma Leites y Claudio Álvarez, integrantes de la coordinadora:
Irma Leites: “Se trata de los 42 años contra todos los grupos económicos que dieron el golpe, contra las Fuerzas Armadas que se aliaron, contra los que instalaron el terrorismo de Estado y contra los personeros, como Huidobro, que ha defendido de ayer, en el 72, durante la dictadura, después de la dictadura y ahora a los torturadores y los genocidas de este pueblo. Detrás de Huidobro está toda la estrategia del silencio, del secretismo y los pactos. Existe un debe muy grande, nosotros -Plenaria Memoria y Justicia- acabamos de difundir una lista de casi 600 represores que están libres, y no se los ha juzgado, queremos un solo juicio contra la dictadura por genocidio. Hoy es un día de memoria y de lucha, por todos nuestros compañeros caídos y al mismo tiempo por la impunidad aún vigente.”
Claudio Álvarez: “Esto es un gran paso en lo que tiene que ver con la coordinación de organizaciones sindicales, estudiantiles y de DDHH de manera independiente al gobierno. Yo soy militante de La Voz de la Clase, y participamos en la Comisión de DDHH de ADES Montevideo desde donde impulsamos la participación en la coordinadora y convocatoria del sindicato a la marcha, como también realizamos recientemente el Foro "Criminalización de la Protesta" donde contamos con la presencia de referentes de los DDHH y la presencia de compañeros de sindicatos y organizaciones estudiantiles, lo que para nosotros fue un paso previo importante respecto a la marcha y un aporte a la coordinación y lucha contra la impunidad. A esto también queremos sumarle las denuncias que venimos haciendo, respecto a la impunidad actual, de las infiltraciones en nuestras movilizaciones por parte de inteligencia, como lo vimos en 2013 en nuestra huelga, así como otros ejemplos de impunidad. El balance de la marcha es muy positivo porque se pudo expresar todo lo mencionado anteriormente. También quiero aprovechar para hacer un llamado al resto de los docentes, pero especialmente al resto de la clase trabajadora, a coordinar y organizarnos de manera independiente al gobierno y confiando en nuestras propias fuerzas como clase y nuestras organizaciones, y saliendo a las calles.”
(*) El autor es familiar de desaparecidos y militante de Tesis XI
Claves: 27 de Junio de 1973
Ese día, el entonces presidente de la República Juan María Bordaberry disolvía por decreto las cámaras legislativas y conformaba un gobierno con la cúpula militar. Así nacía una de las etapas más negras de la historia uruguaya, que ya tenía su antesala varios años antes con la implementación de las medidas prontas de seguridad y la política estatal represiva dirigida contra la vanguardia obrera y las organizaciones populares. Esta etapa estuvo marcada por detenciones masivas, cárcel, torturas sistemáticas, desapariciones y ejecuciones en el marco del Plan Cóndor que operaba en toda la región, un plan sistemático armado desde los Estados Unidos para enfrentar la creciente radicalización de amplios sectores de la población trabajadora y popular en varios de los países del Cono Sur.
También se recuerda la Huelga General que desarrolló la clase trabajadora y que sostuvo durante 14 días, aquella gesta heroica donde los trabajadores no esperaron ninguna orden y decidieron ocupar las fábricas, talleres y empresas, haciendo efectiva la resolución tomada en la fundación misma de la CNT frente a cualquier “intentona golpista”, como forma de enfrentar el golpe militar. Durante 14 días los obreros, apoyados por estudiantes y vecinos de los barrios periféricos, montaron barricadas, se enfrentaron a los militares y dieron pelea hasta que la cúpula de la CNT – hegemonizada por el Partido Comunista Uruguayo – decide levantar la huelga y llamar a los trabajadores a luchar “por otros medios”, permitiendo que se instaure la derrota política que significaría el golpe sangriento contra los sectores populares.