En la escuela ubicado en el popular barrio La Gloria de Godoy Cruz, el gobierno provincial dispuso el cierre del turno tarde por "falta de matricula". Preocupación y bronca de la comunidad educativa porque un turno que cierra es una oportunidad menos para chicos y chicas del barrio.
Virginia Pescarmona @virpes
Viernes 5 de abril de 2019 12:24
Fuimos hasta la Escuela Padre Pedro Arce del popular Barrio La Gloria en Godoy Cruz. Una escuela que, a un mes de iniciado el clico lectivo, tuvo que cerrar completo su turno tarde. Estuvimos junto a la diputada del PTS-FIT y ex docente de la escuela Mailé Rodríguez Abalo conversando con maestras, celadoras y directoras. Hay preocupación y bronca, porque un turno que se cierra es una oportunidad menos para chicos y chicas de ese barrio y los circundantes.
La escuela de la Calle Vélez Sarsfield se transformó en noticia y son variadas las explicaciones que se ensayan: marginalidad, exclusión y déficit varios. Cerró un turno entero, cerró una escuela.
Para el gobierno un simple dato estadístico, la baja matrícula, alcanzó para atacar el elemental derecho al acceso a la educación pública de un barrio
Mientras Sergio Márquez, director de Educación Primaria, aduce cuestiones pedagógicas (sociabilización, por ejemplo), toda la comunidad sabe que en esa decisión se condensan años y años de decisiones políticas de vaciamiento, deterioro, cierres parciales, de falta de oportunidades, de maestras agotadas de remarla en soledad contra una realidad violenta y difícil.
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La DGE ni siquiera tiene claridad sobre qué pasa con esos niños y niñas que no están en esa escuela, si se cambiaron o si simplemente no están asistiendo. La política es primero cerrar, después indagar. Se atajan diciendo que en todo caso, si sube la matrícula, se vuelve abrir. Desorganizando la vida de las familias han reubicado a niños y maestras titulares a la mañana. Las que perdieron sus cargos son las que tenían doble jornada, maestras sostén de familia, que perdieron un ingreso para sus hogares.
Pero las maestras de la escuela tienen un plan propositivo: que la escuela sea de Jornada extendida. Proponen contener y que haya propuestas pedagógicas y recreativas para esos pibes y pibas por más horas. Para eso hace falta voluntad política y presupuesto. Al gobierno sólo se le ocurrió el ajuste.
Se trata de un barrio estigmatizado, y que sin duda necesita y merece #MasParaEducación, más para salud, más infraestructura, más opciones y menos ajustes. Desde la escuela están organizando actividades de visibilizaciós y de mayor acercamiento a la comunidad y quieren avanzar con su proyecto de doble jornada para la institución. Las maestras siempre tienen un plan para sostener la educación pública. Los gobiernos, no.
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Virginia Pescarmona
Docente, Corriente 9 de abril/Lista Bordó, Mendoza