Se realizaron las asambleas ordinarias de SUTEBA para votar la memoria y balance. El debate central fue si el sindicato será una herramienta de organización y movilización en las calles contra el ajuste y el FMI o seguirá subordinado al gobierno y siendo cómplice del ajuste.
Martes 30 de noviembre de 2021 18:05
El miércoles pasado, se realizaron en toda la provincia de Bs. As. las asambleas de Memoria y Balance de SUTEBA. Desde la agrupación La Marrón, junto a otras agrupaciones del frente Multicolor, participamos en los distritos de Morón, Ituzaingó, Merlo de la zona oeste del GBA, donde conduce actualmente la lista Celeste dirigida provincialmente por Roberto Baradel. En ellas hubo un común denominador por parte de la conducción oficial, la negación del ajuste en curso.
Luego de más de 2 años sin asambleas, se convoca en una semana y por whatsapp, sin la posibilidad de debate en las escuelas.
Cómo si vivieran en una realidad paralela, la conducción oficialista reivindicó sin sonrojarse todo lo actuado por el sindicato y el gobierno los últimos dos años, sin dar cuenta que fue producto del ajuste y del deterioro de la vida de millones, que el gobierno, al cual subordinan el sindicato, viene de sufrir una derrota en las urnas, perdiendo el 14% desde que asumió.
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Otra vez, con el discurso del avance de la derecha, mantienen el sindicato alineado con el gobierno y dejan pasar todos los ataques sin haber convocado en dos años una sola asamblea, mientras nuestros estudiantes estuvieron sin conectividad, las familias sin ingresos, las escuelas con graves problemas de infraestructura y avanzó la precarización docente y de la educación.
Sin embargo, el resultado de las elecciones fue un claro mensaje contra el ajuste. Y en ese marco, el fortalecimiento del Frente de Izquierda Unidad expresó la negativa de sectores de la clase trabajadora y el pueblo a pagar la crisis. A la derecha hay que enfrentarla en las calles, por eso, desde las bancas nacionales y provinciales conquistadas, pero también en los casos donde conquistamos concejales o somos referentes del FITU, lanzamos una convocatoria para movilizarnos en frente único todos los que estamos contra el acuerdo y los planes del FMI, porque sabemos que la deuda se paga con el hambre del pueblo.
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Con muchos compañeros de las escuelas, incluso muchos que no son simpatizantes de la oposición multicolor o del FITU, estuvimos en las calles frente al gobierno de Macri en 2017 enfrentando la reforma previsional. La convocatoria a este 11 contra el acuerdo con el FMI, es un paso en retomar ese camino y conquistar la unidad de toda la clase trabajadora, de los sindicatos combativos o que rompan la subordinación al gobierno, las organizaciones sociales, de mujeres, ambientalista y estudiantiles, para enfrentar todo lo que se viene de la mano de las imposiciones del FMI.
En la propia asamblea de Merlo, docentes referenciados con la lista Celeste plantearon que hay que enfrentar al FMI en las calles, y también hubo un reconocimiento en las asambleas al avance de la izquierda y su consecuencia política, donde justamente una de las peleas principales fue plantear el desconocimiento a una deuda fraudulenta e ilegal, que están pagando con el hambre del pueblo.
¿Que va hacer el Suteba provincial frente al avance del ajuste y el llamado al acuerdo plurianual de Alberto Fernandez junto a la oposición de derecha y FMI para pagar la deuda?
Desde La Marron (PTS en el FITU) junto con las familias, impulsamos durante la pandemia y posteriormente comisiones de seguridad e higiene, por la vuelta segura a clases y denunciando las condiciones edilicias, la falta de dispositivos e internet de las familias y la falta de ingresos.
Pusimos en pié también comisiones contra la precarización docente, como la de la Región 8 (de Merlo, Morón e Ituzaingó), para pelear por trabajo con derechos para todos, apertura de cargos desde donde también enfrentan todas las irregularidades que sufren producto de la precarización del ATR, el FORTE y el Piedras.
Increíblemente el propio sindicato reivindica esos programas como puestos de trabajo creados por Axel Kicillof, pero oculta que son contratos sin estabilidad laboral y para colmo los considera trabajadores de segunda y no les permitió participar de la asamblea ordinaria, sosteniendo así la división entre los trabajadores. Incluso pusimos en pié Comisiones por problemas edilicios, como el caso de la Escuela 17 de Merlo, entre docentes, estudiantes y familias, en defensa del edificio histórico. Y todo con la ausencia de la conducción oficial del sindicato.
Esta fuerza que se viene expresando desde abajo entre familias, estudiantes, trabajadores docentes y de otros sectores, es la que hay que poner en movimiento, haciendo asambleas y reuniones en las escuelas para ser parte de una movilización masiva este 11 de diciembre en el camino de imponer a los sindicatos que rompan su pasividad y servilismo al gobierno, como en el caso de Suteba y CTA, y convoquen a asambleas y plan de lucha para enfrentar en las calles al FMI.
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