Los últimos datos que se conocieron del Indec señalan que a nivel provincial 7 de cada 10 personas que trabajan cobran menos que el salario mínimo. En la juventud y las mujeres menores de 30 años los números son aún más alarmantes. Frente a esto, en la provincia se empezó a organizar la red de trabajadores y trabajadoras precarias.
Martes 19 de mayo de 2020 20:21
Según una elaboración propia de La Izquierda Diario, que toma en cuenta los datos de la Encuesta Permanente de Hogares del Indec correspondiente al tercer trimestre de 2019, en Salta el 70% de los trabajadores cobra menos que $16.875, y una franja importante de ellos no está registrado. Quienes se llevan la peor parte son los jóvenes y las mujeres. En la juventud menor a 30 años, si el 90,1 % trabajaba en condiciones precarias en la era Macri, la situación ahora en medio de la cuarentena es mucho peor.
Además, en nuestra provincia el 45,5% de los habitantes son pobres, según datos también del Indec.
Si se toma a las mujeres trabajadoras de conjunto, el 72,7% lo hace en forma precaria, 5 puntos más que los hombres que trepan el 67,4%. Las jóvenes son las que peor sufren la falta de derechos y aportes de parte de las patronales y el Estado. El 91% de las que trabajan lo hacen en estas condiciones en comercio, venta ambulante, como empleadas domésticas, entre otras actividades.
Detrás de cada cifra hay pibas y pibes que subsisten como pueden. Muchos trabajan en la gastronomía y el turismo, la gran industria salteña que hasta antes de la pandemia estuvo al servicio de engordar los bolsillos de los empresarios. Ahora, producto de la cuarentena obligatoria, las patronales vuelven a golpear a los jóvenes, dejándolos directamente en la calle. Por eso, desde el Frente de Izquierda además de exigir que se frenen realmente los despidos y suspensiones, y que se dé respuesta a la emergencia habitacional, proponemos un salario de cuarentena de $30.000 para todas y todos los trabajadores que en medio de esa crisis no estén trabajando ni cobrando salario.
Red de precarios en Salta
A tono con esta realidad, el domingo pasado un grupo de trabajadores y trabajadoras de Salta y Jujuy se reunieron en forma virtual para poner en pie la red de precarios en estas provincias del NOA que en lugares como CABA, La Plata, Córdoba o Rosario ya venía impulsándose y que el jueves pasado salió a la luz con fuerza en todo el país en el marco de una jornada nacional.
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Si bien la cuarentena en Salta se viene flexibilizando, permitiendo a algunos sectores volver a la actividad, muchas patronales quieren aprovechar esta pandemia para flexibilizar aún más las condiciones de trabajo y de vida de la inmensa mayoría de los salteños que trabajan en blanco, en negro, en cuenta propia o que si quiera pueden trabajar. Por eso, este paso de la juventud precarizada que trabaja en bares, call center, comercios, repartiendo cartas, como mensajeros o en aplicaciones como Glovo, que es suplente en las escuelas y este año no pudo ser designada en ninguna o es personal de maestranza y sigue sin pasar a planta, atendiendo teléfonos en comercios y oficinas, es muy importante. Jóvenes que trabajan como permisionarios o vendedores y vendedoras de servicios, la misma que hace malabares para cursar en los terciarios y la UNSa o que directamente no puede acceder a estudiar por las condiciones en las que trabaja, es muy importante.
Desde La Izquierda Diario estamos al servicio de amplificar la voz de una juventud que empieza a perder el miedo, que está harta de vivir de esta forma y da los primeros pasos para organizarse también.
