La democracia cristiana y la derecha salieron en picada a defender a las isapres y proponer medidas para aplicar un verdadero “perdonazo” y evitar que deban pagar 1.400 millones de dólares a usuarios por sus usureras tarifas que fueron sancionadas por la corte suprema. La respuesta del gobierno es tímida, es urgente tomar medidas estructurales para terminar con el negocio de la salud y fortalecer la salud pública.
Miércoles 17 de mayo de 2023
La democracia cristiana y la derecha en picada por un “perdonazo” a los empresarios de la salud
La iniciativa impulsada por los senadores del partido Demócratas, Ximena Rincón y Matías Walker; junto a sus pares de Chile Vamos, Rodrigo Galilea (RN), Franciso Chahuán (RN) y Javier Macaya (UDI), incorpora una disposición transitoria que regula las bases para la determinación de las tarifas de los planes de salud y la implementación de sus ajustes de precios para que las isapres no tengan que devolver 1.400 millones de dólares a usuarios frente al fallo de la corte suprema que sancionó a las isapres por sus costos usureros.
Increible el nivel de hipocresía de estos partidos empresariales que utilizan la ley cuando les conviene. El fallo de la corte suprema demuestra que hubo un perjuicio para miles de usuarios de la salud por la decisión de un puñado de empresarios de la salud que simplemente hacen lo que quieren. Y están acostumbrados por estos partidos.
Casi 800.000 contratos en los que las ISAPRES no aplicaron las tablas de factores que establece la actual constitución vigente, que evita cobros abusivos a mujeres o a la tercera edad, a la que los empresarios de la salud les cobran más por ser afiliados más riesgosos. Un robo con todas sus letras.
La Corte Suprema falló contra las Isapres por no ajustar sus planes a un decreto del 2019 que modifica los cálculos de riesgo que estas usan para establecer el monto de los planes de sus afiliados ¡Dos años en que siguieron cobrando de más! y que ahora deberían devolver a los beneficiarios, donde las primeras estimaciones están en torno a los 900 mil millones de pesos, por Isapre.
Estos son los montos que cada ISAPRE ganó como excedente utilizando tarifas usureras:
Cruz Blanca: $278.265.111.165
Colmena: $242.498.785.099
Banmédica: $222.464.640.229
Consalud: $199.465.435
Nueva Masvida: $89.088.164.612
Vida Tres: $74.939.074.210
Esencial: $174.209.476
Fundación: $10.505.782.202
Isalud: $4.214.518.731
Peticiones increibles
Frente al fallo de la corte suprema que los culpa de usureros, los empresarios de la salud piden un rescate por parte del gobierno y el estado. Increible el descaro que pueden tener los empresarios de la salud acompañado de los partidos como la democracia cristiana y la derecha, que después de haber hecho negocio redondo con los padecimientos de las familias trabajadoras, no quieren devolver lo que corresponde y además piden que el estado los salve.
Como sostiene David Debrott (economista que ha desempeñado cargos en la Superintendencia y parte del equipo para la reforma al sistema privado) para CIPER CHILE, desde 1990 hasta el 2021 las utilidades de las Isapres fueron de 1,3 billones de pesos y por concepto de ganancia bruta, la cifra asciende a $8,6 billones (8.6 millones de millones). También especifica que en el mismo período, 32 años, las pérdidas recién vinieron tras impuestos los años 2021 y 2022: 148 y 57 mil millones, respectivamente. No hay que sacar calculadora para ver la cantidad de dinero acumulado por empresarios nacionales e internacionales con la salud.
La propuesta del gobierno: una medida de “conciliación” manteniendo el negocio privado de la salud
El presidente Gabriel Boric si bien cuestiono la propuesta alternativa de la democracia cristiana y la derecha, mencionó "tenemos que garantizar a la vez la sostenibilidad del sector privado en el tiempo, pero cumpliendo las reglas, este es un equilibrio que es difícil, que sin lugar a dudar es desafiante para el sector público y privado, pero que no podemos obviar".
La propuesta del gobierno mantendrán con la misma cobertura financiera y en los mismos prestadores privados que tenían. También se mantendrán las obligaciones emanadas de sentencias judiciales que otorgan beneficios. Mantener la cobertura quiere decir que, si las personas pagaban por una atención un copago de por ejemplo $5.000, ahora seguirán pagando ese mismo monto. Y también se mantendrán en los mismos prestadores privados, pues se busca dar continuidad a los tratamientos, para supuestamente no colapsar la red pública y mantener el flujo de financiamiento a los prestadores privados, para que estos no quiebren por la quiebra de una isapre. Lógicamente Fonasa se hará cargo también de mantener el otorgamiento de prestaciones que hayan determinado los tribunales.
Es una propuesta de “conciliación” que si bien no es tan descarada como el “perdonazo” propuesto por la oposición y aprobado por la comisión de salud del senado, pero mantiene el actual sistema de salud como un negocio en donde privados pueden hacer y deshacer.
Es urgente un sistema único de salud público 100% financiado por el estado y bajo control de los trabajadores de la salud y usuarios ¡Basta de lucrar con la salud del pueblo!
El debate público frente al estado actual de las isapres refleja el descaro y la desidia que prima en la salud en Chile, donde empresarios pueden lucrar con tus padecimientos y tu salud.
Es urgente pelear por un sistema único de salud pública, que esté 100% financiado por el estado donde se garantice íntegramente este derecho mínimo, mejore las condiciones de los trabajadores de la salud y garantice en la cobertura, acceso y calidad al conjunto de las familias de la clase trabajadora.