A 48 años del golpe genocida, seamos miles en Mar del Plata y en todo el país para rechazar el ajuste, la represión y el negacionismo del gobierno de Milei. Es necesario que quienes impulsamos las principales movilizaciones en la ciudad podamos confluir en las calles y en un acto unificado en el que nos podamos expresar todos los sectores.
Martes 12 de marzo 10:04
En apenas tres meses de gobierno, Milei emprendió un verdadero “plan de guerra” contra los trabajadores y el pueblo. Licuó salarios vía una feroz devaluación, puso en pié junto a Patricia Bullrich el protocolo anti piquetes, e inició un ajuste brutal sobre el Estado con desfinanciamiento, centenares de despidos o directamente intentos de cierre como en Télam. Una política a tono del neoliberalismo de Menem y Martínez de Hoz.
Sin embargo, ante cada ofensiva política ha encontrado resistencia. Así ocurrió con la Ley Ómnibus, contra la que se manifestaron asambleas barriales y la izquierda en las calles, enfrentando la represión, contra una ley que finalmente naufragó en el congreso. Pero también sucedió contra el protocolo de Bullrich cuando el gobierno estaba recién asumido y con el intento de reforma laboral que impulsaba el DNU. Frente a la misoginia del presidente, el último 8 de marzo se realizó un pronunciamiento contundente del movimiento de mujeres y disidencias que se expresó por “ni un paso atrás” en los derechos conquistados y contra el ajuste.
En cada una de estas movilizaciones, actos y piquetes, han confluido decenas de organizaciones sociales, sindicales, políticas y de derechos humanos. Lamentablemente, las conducciones de la CGT y la CTA no le han dado continuidad al paro nacional del 24 de enero. Vemos que fuerzas hay para enfrentar al gobierno de Milei, pero hace falta unificar a todos los sectores obreros y populares para pararle la mano.
No olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos
La dictadura genocida vino a acabar con lo mejor de la vanguardia obrera que se venía organizando desde abajo en las fábricas y establecimientos, así como la juventud combativa y los activistas sociales. Fueron los ejecutores de un plan pergeñado por los grandes empresarios y el imperialismo. En este período hubo un verdadero festival de negocios para los especuladores y un endeudamiento externo fenomenal, que en el caso de las empresas privadas luego fue estatizada.
En Mar del Plata, los milicos se ensañaron especialmente contra los trabajadores del puerto que venían de protagonizar grandes luchas y conquistar el convenio 1975, que otorgaba la garantía horaria y otras ventajas para los laburantes. Uno de esos obreros combativos fue mi viejo Miguel Roldán. También persiguieron y desaparecieron a estudiantes y a los abogados laboralistas de “La noche de las corbatas”. Profundizaron la política represiva que se había inaugurado en la Ciudad, con la CNU de Piantoni y sus secuaces, desde 1971 con el asesinato de Filler, y las bandas parapoliciales de las AAA que actuaron bajo el peronismo desde 1974.
Con el fracaso de la dictadura en Malvinas y el movimiento de protesta encabezado por las madres y abuelas, organismos de derechos humanos y otras organizaciones, que se había iniciado años antes, los milicos tuvieron que retirarse del poder muy deslegitimados. Desde un primer momento, se supo que habían ocurrido al menos 30 mil detenciones y desapariciones, basado en informes del Departamento de Estado norteamerico y por la cantidad de centros clandestinos de detención. Por eso, bajo cada gobierno planteamos la necesidad de que se abrieran los archivos de la dictadura. Para saber dónde están todos los bebés apropiados, para que vayan presos todos los cómplices y responsables del genocidio, tanto militares, empresarios como eclesiásticos.
Una gran manifestación y un acto unificado, contra Milei y el negacionismo, con dos documentos
Este 24 de marzo está planteado poner pie una multitudinaria movilización y un acto unificado en Mar del Plata. Que sea la continuidad de las distintas expresiones de lucha que se vienen dando en la ciudad: cacerolazos, paros, luchas docentes, del CONICET, contra las petroleras y otras tantas. Realizar un pronunciamiento contundente contra el negacionismo de Milei, Villarruel y la runfla que los acompaña.
Sin embargo, proponemos que en este acto unificado se puedan expresar los dos grandes sectores que vienen impulsando las manifestaciones del 24 de marzo en Mar del Plata. Tanto los organismos de derechos humanos que han confluido con el peronismo, como los hijos de desaparecidos, movimientos sociales, sindicales y organizaciones de izquierda que nos venimos expresando de manera independiente de todos los gobiernos. Por eso proponemos que en el espacio tradicional de Luro y Mitre donde se realizan los actos, puedan ser leídos dos documentos como propone el Encuentro Memoria Verdad y Justicia en Buenos Aires.
Desde el PTS-Frente de Izquierda Unidad, vamos a proponer que haya un documento que además de denunciar la impunidad de los milicos y el negacionismo, ajuste y represión de Milei, no omita a los gobernadores como Osvaldo Jaldo o Axel Kicillof que se pliegan al ajuste y proponen seguir pagando la deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta con el FMI. Además son los responsables políticos del “gatillo fácil”, con casos como Brandon Romero, Luciano Olivera y Facundo Astudillo Castro. Por otra parte, los diputados de Unión por la Patria y las centrales sindicales le vienen dando un valioso tiempo al gobierno para que avance en su política de ajuste. En el Congreso ya se podría haber volteado el DNU. Y un plan de lucha de la CGT y la CTA para unificar todas las luchas podría rápidamente poner en jaque a los ataques del gobierno.
En este contexto de negacionismo, ajuste y represión, no podemos dividir nuestras fuerzas. Hay que salir masivamente a las calles. Proponemos que haya un acto unificado sin censuras, con dos documentos que reflejen todas las posiciones de quiénes nos movilizaremos.