La semana pasada se dio a conocer mediante un video que difundió la Gestión de la facultad, que Psicología obtuvo un dictamen favorable en la última evaluación de CONEAU. En el mismo la decana Soledad Cottone afirma que por ello la carrera vuelve a ser de gran valor. Pero… ¿Qué es la CONEAU? ¿Qué intereses defiende? ¿Es buena su aprobación?
Lunes 29 de junio de 2020 16:04
La CONEAU (Comisión Nacional Evaluación y Acreditación Universitaria) es un órgano que se desprende de la LES (Ley de Educación Superior). Esta ley fue votada en nuestro país en 1995 durante el gobierno de Menem, como parte de una ofensiva del Banco Mundial en múltiples países latinoamericanos donde se votaron leyes similares.
Esta ley neoliberal tiene como principal característica considerar a la educación como un servicio (al leerla se refiere siempre de esta forma a la misma), y no como un derecho, por eso es que nunca habla de gratuidad. Declara a su vez, abiertamente, que su objetivo es poner las universidades “al servicio de las necesidades del mercado”, es decir de lo que necesitan los empresarios, dejando de lado las necesidades de los trabajadores y el pueblo. Por ello también es que sugiere a las facultades que avancen en convenios con empresas para de esa forma aumentar el porcentaje de financiamiento propio.
A pesar de que en 1996 el juez Marinelli dictaminó esta ley como inconstitucional por violar la autonomía universitaria esta ley continúa vigente. En nuestra facultad la acreditación se realizó en 2014, bajo la gestión de Laura Manavella que fue impulsada por las fuerzas estudiantiles ALDE, Santiago Pampillon y TUPAC.
Hoy la gestión que impulsan La Masotta junto a la Franja Morada festeja una nueva evaluación, esta vez positiva, de la CONEAU, pero después de saber lo que significa este organismo… ¿Hay que festejar?
Hoy nos encontramos en una crisis social muy profunda. Con la pandemia la situación no hizo más que profundizarse, a pesar del decreto que prohíbe los despidos, los empresarios despiden a gusto, cada vez cuesta más sostener las cursadas, aumentan los números de pobreza y desnutrición infantil. Mientras millones de dólares se van en la deuda externa, miles de trabajadores no tienen qué llevar a la mesa.
En este contexto la Universidad podría jugar un importante rol hacia la comunidad, poniendo sus recursos, conocimientos e instalaciones a disposición. Con una alianza de estas características sería posible comenzar a pensar la sociedad de otra forma. Pero nada más lejos de la realidad, hoy nos encontramos con una universidad que festeja la aprobación de un organismo que pretende poner su conocimiento al servicio del mercado.
Se vuelve urgente organizarse desde todos los sectores para poder enfrentar el ajuste que nos quieren imponer, comenzando por rechazar la injerencia de este tipo de organismos. Para ello es necesario que el centro de estudiantes se ponga a la cabeza. Trabajadoras y trabajadores precarizados se vienen organizando desde el inicio de la pandemia en La Red de Trabajadorxs Precarizadxs, vemos no sólo necesario sino imprescindible tener un centro de estudiantes que se juegue a organizar a los sectores estudiantiles a la par de las exigencias de lxs trabajadorxs y de la comunidad. Históricamente se ha demostrado que la fuerza estudiantil unida a los obreros pueden lograr cambios importantes, y hoy esto se vuelve mas vigente que nunca.
Lucio Prieto
Es miembro del Comité Editorial de Armas de la Crítica. Estudia Psicología y Lic. en Historia en la Universidad Nacional de Rosario. Milita en la Juventud del Partido de los Trabajadores Socialistas.