PBA. Reaparece Cristina y el PJ especula: ¿Kicillof seguirá en lista de espera por su reelección o habrá anuncios?

A casi una semana de la retirada de Alberto Fernández, y con un tembladeral económico como telón de fondo, Cristina Fernández de Kirchner vuelve al Teatro Argentino de La Plata para conmemorar los 20 años de la elección que llevó a Néstor Kirchner a la presidencia, tras el abandono la contienda por parte de Carlos Menem. Como una paradoja de la historia, el kirchnerismo se reúne a conmemorar la fecha de su “nacimiento” como corriente nacional en medio de su más rotundo fracaso político y económico, que nos depositó en la actual corrida cambiaria, una inflación que sigue y una posible devaluación que aparece en el horizonte, fogoneada por el FMI y las patronales agrarias.

La reaparición pública de Cristina despertó expectativas y todo tipo de especulaciones sobre posibles anuncios de candidaturas que traten de ordenar la debacle que vive el Frente de Todos, empezando por la propia. La elección de la principal sala lírica de la provincia aparece muy a tono para poner en escena un nuevo acto de la "opereta" que suena tan desafinada en el oficialismo.

Desde el momento en que se anunció la presentación de Cristina en el Teatro Argentino, Kicillof y su entorno comenzaron a soñar con que llegaría el esperado momento en el que la vicepresidenta finalmente bendijera la reelección. Reelección que el propio gobernador bonaerense lanzó a principios de marzo pasado, en medio de la Asamblea Legislativa realizada por aquellos días. Por ahora todo indicaría que tendrá que seguir esperando.

Mal que les pese, la mayoría de las versiones adelantan que en la “clase magistral” platense CFK va a esquivar pronunciamientos sobre posibles candidaturas; pero empieza a sonar la versión de que sí habría una defensa de la gestión económica de Sergio Massa, mientras éste envía a su equipo a pasar la gorra a las oficinas del FMI. Buscan que el organismo suelte los dólares que necesita el gobierno para sostener, al menos por un par de meses, las raquíticas reservas del Banco Central.

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Como ya hemos señalado en una columna anterior, en marzo la propia Cristina había conminado a su hijo Máximo y al “Cuervo” Larroque a suspender las internas en La Cámpora para ganar la provincia como sea. ¿Será una posible fórmula con Sergio Massa como candidato a presidente y Axel Kicillof a gobernador la apuesta para lograrlo? No se puede descartar que la lapicera de Cristina vaya para ese lado, como una expresión desesperada para tratar de mantener el bastión como sea, en medio de la debacle general del kirchnerismo y cuando en la provincia siguen sobrevolando los fantasmas de la derrota en las legislativas del 2021. Pero como ya es sabido, toda especulación no es más que eso, a pesar de los “operativos clamor” que circulan con intensidad; no pueden distraernos de la debacle a la que nos está llevando el plan de Massa y el gobierno al servicio del FMI, y a la crisis en la que se hunde la provincia bajo el mando de Kicillof.

Luego de casi cuatro años de gobierno de Kicillof, el malestar por abajo aumenta, como lo demostró en estos días el importante paro realizado por las y los docentes provinciales a pesar de los aprietes del gobierno de Kicillof y el boicot de Roberto Baradel. Este paro actuó como una caja de resonancia de la situación que se vive en los barrios, tal como se hizo notar recientemente con cientos de cortes de avenidas, rutas y vías de ferrocarriles impulsados por los propios vecinos, que no se resignaban a estar sin luz ni agua en medio de la ola de calor que vivimos en el verano. También lo vimos casi un mes atrás luego del asesinato del chofer Daniel Barrientos; en aquel momento el amigo Fernando Scolnik señaló que la piña no había “caído del cielo” sino que era expresión de esta profunda indignación que se vive en los barrios del conurbano. En aquel momento Kicillof respondió sosteniendo a Sergio Berni y hasta empezaron a realizar cacheos en el transporte público. El tufillo a dictadura de la medida lo hizo retroceder.

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Ahora, en medio de la profunda crisis que golpea, quiere volver a engañar a los y las bonaerenses prometiendo un supuesto “derecho al futuro”. ¡Cuánto cinismo! Con Kicillof y el kirchnerismo, pero también con la oposición de derecha de los Larreta-Santilli o de Bullrich-Vidal-Ritondo y del propio Milei (al que tanto levantan los grandes medios pero también el propio oficialismo, para perjudicar a Juntos por el Cambio) el futuro que nos espera es negro y miserable.

La única salida es por izquierda junto a los trabajadores, las mujeres y la juventud. Ese es el desafío que tenemos por delante y el próximo 1 de Mayo tenemos que ser miles en Plaza de Mayo para mostrar que esa alternativa independiente contra el ajuste del gobierno, la derecha y el FMI que ya está en marcha.

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