En el municipio del Intendente con mayor sueldo de la provincia, estudiantes denuncian que en pleno invierno las escuelas continúan sin calefacción y con graves problemas eléctricos.
Viernes 12 de julio de 2019 22:33
En una fría y lluviosa mañana como la de hoy, decenas de estudiantes de las escuelas Media 1 y Media 2 (EES nº1 y EES nº2) y de la Técnica 2 (EEST nº2) marcharon junto a sus familias hasta la Municipalidad de Berisso para exigir mayor presupuesto para comedores y denunciar que aun en pleno invierno continúan asistiendo a clases en edificios sin calefacción, con problemas eléctricos y en algunos casos hasta peligro de derrumbe.
(Recibimos) “300 sanguches para 800 alumnos” reza uno de los carteles como contracara de la realidad en la que viven los funcionarios públicos, que en el caso de Berisso ubica aún más en las antípodas al Intendente Jorge Nedela, el funcionario que percibe el sueldo más alto en toda la provincia de Buenos Aires.
No es la primera vez que les estudiantes reclaman por infraestructura y presupuesto, quizás por eso no son optimistas respecto de la respuesta que recibieron de Elizabeth Franchi y Omar Medina, ambos del Concejo Escolar, quienes luego de negar la veracidad las demandas firmaron un acta de compromiso a resolver todo en el transcurso de la semana próxima.
Así lo expresaba Mora, una estudiante de la Técnica 2 que participó en la reunión en la que fueron recibidos por los funcionarios: “Fue una tomada de pelo, nos trataban de desorganizadas y como que esas cosas no pasaban en las escuelas, cuando nosotros somos quienes las sufrimos a diario. Después nos prometieron que antes del receso invernal tendríamos todo, el gas, la colocación de todos los vidrios del Industrial. Pero el acuerdo no llegó a nada, nos siguen prometiendo lo mismo desde el año pasado. Todo esto está plasmado en un acta con todas las necesidades que tenemos las 3 escuelas. Esperamos que nos solucionen los problemas, porque como estudiantes tenemos derecho a estudiar en condiciones dignas pero las condiciones dignas nos estarían faltando.”
Desde que se produjo el crimen social en la escuela 49 de la localidad de Moreno que se cobró la vida de Sandra y Rubén, los medidores de gas se detuvieron y estufas se apagaron en muchas instituciones. Mientras el ajuste y el desfinanciamento en educación avanzan de la mano del FMI, los estudiantes seguirán movilizándose y exigiendo que se cumplan sus demandas.
