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Red Internacional
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Sigue la toma en la Universidad de Tandil: “No estamos de luto, estamos en lucha”

En un clima de firmeza y solidaridad, el tercer día de toma de la Universidad Nacional del Centro se desarrolló con diversas actividades que reflejaron el espíritu de resistencia de estudiantes, docentes, no docentes, jubilados y parte de la comunidad. El lema “No estamos de luto, estamos en lucha” resonó en cada rincón, uniendo a todos en la búsqueda de un futuro más justo y accesible.

Domingo 13 de octubre 11:15

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A las 10 de la mañana una comisión de asambleístas se adentró en el corazón de la ciudad para llevar su mensaje a los tandilenses y turistas que disfrutaban el fin de semana largo. La volanteada fue un éxito, con conversaciones que conectaron la lucha estudiantil con las preocupaciones de la comunidad.

El mediodía trajo consigo un taller de “ESI para todes” en la plaza central, donde se debatieron no sólo temas de educación sexual integral - como el VIH, HPV y otras enfermedades de transmisión sexual-, también las opresiones que enfrentan las mujeres, desde el peso del trabajo doméstico hasta la objeción de conciencia sufrida por un médico del campus. A partir de una actividad lúdica se reivindicaron las historias de lucha de Carlos Jáuregui, Bartolina Sisa y Susy Shock. Al final de la actividad, se repartieron preservativos donados por “Convivencia en Diversidad”, una organización LGBTIQ+ local, fortaleciendo la conexión entre la lucha estudiantil y los derechos de las diversidades.

Pasadas las 15 horas, se llevó a cabo un conversatorio titulado “Reconstrucción histórica de las luchas del movimiento estudiantil de la Unicen”. Andrea Oliva, ex docente de Trabajo Social y actual alumna de Artes, compartió una poderosa anécdota de los años 80; que en este mes se cumplen 40 años de las Olimpíadas estudiantiles y ella logró participar tras una exigencia que permitió la inclusión de mujeres en el deporte de las Olimpíadas interuniversitarias. Sus palabras fueron un recordatorio sobre cómo la historia está marcada por la lucha y la resistencia.

Una docente universitaria jubilada habló sobre su experiencia en tomas pasadas de la Unicen y destacamos su mención a la opresión histórica del FMI y cómo diferentes gobiernos han intentado desmantelar la educación pública. Su intervención resonó entre los presentes, recordando la importancia de defender lo que se ha logrado.

A las 16 horas, la asamblea interclaustros se reunió y el ambiente se tornó tenso al detectar un móvil policial que registraba el momento. Ante el hostigamiento, los asambleístas respondieron con el grito de “¡Vivimos en democracia!”, y alzaron la voz en redes sociales bajo el lema “UNICEN EN LUCHA”, denunciando la vigilancia y la persecución de las fuerzas de seguridad. Graduados de abogacía llegados de la sede UNICEN Azul asesoraron legalmente a la comisión de seguridad reforzando las medidas.

Las mociones aprobadas reflejaron la urgencia de la situación: se exigió la realización de asambleas docentes para garantizar la finalización del año lectivo y la inclusión de las instituciones preuniversitarias en la representación universitaria. También se reclamó por el descuento del 40% del salario para una obra social deficitaria y se votó a favor sumar a la UNICEN al reclamo de muchas otras Universidades nacionales en el pronunciamiento de declarar personas no gratas a los diputados que acompañaron el veto presidencial.

“Estamos acá para aguantar y negarnos a naturalizar la decadencia”, resonó en las voces de los presentes. El acceso a transporte y comedor universitario se volvió un tema crucial, con un llamado a no limitarse al reclamo por salarios y becas, sino a luchar por un acceso equitativo a la cultura y a la educación.

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Al caer la tarde, a las 19 horas, la toma se animó con una vibrante batucada, donde los tambores resonaron en las calles de Tandil, contagiando energía y alegría a los presentes. Este momento de expresión artística reforzó el sentido de comunidad y la determinación de continuar la lucha.

El próximo jueves, se llevará a cabo un festival de bandas locales y una marcha que marcará la tercera manifestación de esta contienda, mientras se planean intervenciones en el campus universitario. Las consignas que unen a les luchadores son claras: “Sumar luchas y cuerpos, que viva la lucha”.

Así, el tercer día de toma en la UNICEN se convierte en un capítulo más de una historia de resistencia, un recordatorio de que la lucha por la educación pública y la dignidad está más vital que nunca.

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